El pequeño Peter se quedó estupefacto, embelesado por el primer beso que le dio su padre, no obstante, era lo suficientemente inteligente para saber que sus palabras habían sido como una especie de despedida y a decir verdad, no quería despedirlo.—¡Ay papito! Igual eres mi papá, y yo no quiero que te pase nada malo —salió corriendo y sacó un teléfono que tenía escondido en la cómoda, marcó a Ethan, este le atendió al segundo repique, porque en ese momento estaba dejando a las mujeres en un hotel, como un lugar neutral—. Ethan, quiero que me ayudes a salvar a mi padre, algo le pasa, no me dijo, sin embargo, se despidió, siento que está en peligro y aunque ha sido frío conmigo siempre, hoy me dirigió unas palabras que conmovieron mi corazón, me dijo que me ha amado a su manera —un suspiro se escuchó al otro lado de la línea.—Peter, te prometo hacer lo que esté a mi alcance para salvar a tu padre… no tengo ningún control para cambiar o predecir los resultados, no está bajo mi control s
Madelaine se quedó viendo al hombre con una mezcla de incredulidad y diversión, pensó que estaba bromeando, porque no tenía razones para creer que sus palabras eran reales, desde que llegó a casa de la familia Jarold, Jasón la trató muy bien, de hecho era el único integrante de la familia que tenía más consideración hacia ella, por eso se tomó a la ligera sus palabras.—Me encanta tu sentido del humor… pero hablando en serio, no tengo problemas en quedarme un par de semanas, después de ese tiempo tengo que regresar, debo conversar con Blake, ella quedó en… —su diálogo fue interrumpido por la voz fría de Jasón.—Madelaine, no estoy bromeando, de aquí no volverás a salir, porque no confío en ti, cuando te saqué del encierro dónde te tenía Ethan, te lo dije, te dejaría quedarte en la habitación de mi hermana, a cambio, tú solo debías quedarte en la casa, no huir y menos intentar hacerle daño a Blake. ¿Y qué hiciste? Justo lo que te pedí no hacer, poco te importó que me enfrenté a los dem
Marlon estaba en su oficina con aparente indiferencia, sin embargo, la angustia en su interior, era de proporciones gigantescas, nunca en su vida se sintió de esa manera, por más que quiso evitar sentir ese profundo miedo, tan frío como un iceberg, que lo penetraba hasta lo más profundo del alma, era inevitable, su mente era una sucesión de imagen tras imagen, de Hadassa desde el mismo momento cuando la vio por primera vez, de sus hijos cuando se enteró de que sus respectivas madres los estaban esperando y cuando los vio en el retén de niños, sin acercarse para no crear ningún vínculo con ellos, la vida le pasaba frente a los ojos como si se trataba de una película, no pudo evitar dejar salir de sus labios un gemido de angustia, su asistente lo observó, él trató de ignorarlo porque si no lo hacía era capaz de golpearlo hasta dejarlo inconsciente, debía simular para que todo saliera bien.El hombre se veía nervioso, durante muchas veces caminó y se paró a un lado del escritorio de Marl
Las dos mujeres comenzaron a gritar al ver la escena, no podían soportar su creciente angustia, aunque el desespero de Hadassa era peor, fue necesario sostenerla para evitar que se lanzara al agua.—¡¡¡Mi hijo!!! —exclama desesperada, al punto de perder la voz ante el profundo grito surgido desde lo más profundo de sus entrañas, no era para menos, la mujer sentía su corazón destrozado, la sola idea de perder a su hijo la enloquecía, prefería estar muerta ella a no volverlo a ver más.Desde que solo era casi una niña, su pequeño fue su aliento, su impulso, su inspiración, su fuerza, su futuro, su refugio, su consuelo, no podía imaginarse la vida sin Ethan y sin Marlon, porque aunque siempre estuvieron lejos uno de otro, por lo menos lo podía observar, así nunca lo tuviera junto a ella.Anniston, no quería quedarse en el barco, debía sacar a las dos mujeres, porque no sabía si los enemigos tenían un plan b para seguir con su propósito. Blake, estaba en Shock con los ojos anegados en lág
Anniston y Hadassa se quedaron viéndola, ya habían aprendido a conocer a la chica y sabían que ella no era de quienes corrían, por eso ni siquiera hicieron el intento de persuadirla, sabían que era en vano.—Anniston, quiero que me convoques a una rueda de prensa, busca a un abogado, el mejor que tenga Ethan o cualquier otro. Hadassa necesito de tu ayuda, porque los conoces más que yo y sabes manejar la situación, necesito que juntas enfrentemos a la familia de tu hijo… no voy a dejar que ellos nos acorralen, nadie nos hará huir, tampoco van a venir a destruir lo que Ethan le ha costado construir, porque él está allí afuera y cuando venga, debe encontrar todo o mejor como lo dejó ¿Estás dispuesta a apoyarme? —le preguntó a Hadassa sintiendo un poco de duda que la mujer, no estuviera dispuesta a apoyarla, por eso, segundos después se sintió aliviada ante sus palabras de absoluto respaldo.—Por supuesto que sí, hace mucho tiempo esa familia tiene deudas pendientes conmigo, creo que ha l
Tae leyó el documento y con cada trazo que leía su palidez se hizo extrema, cuando terminó de conocer el contenido, tomó asiento y cambió de actitud.—Bueno, vamos primero a comprobar la veracidad de este documento y después… —sus palabras no continuaron porque Hadassa lo interrumpió.—Tú puedes comprobar lo que sea, pero antes debes quedar removido de este cargo, como miembros y dueños del 65% de las acciones de Beckham, pedimos tu retiro inmediato en el cargo, por no haber cumplido el procedimiento correspondiente —la propuesta de Hadassa, provocó que el hombre se levantara del asiento con violencia, y alzara la mano para golpearla, cuando Blake lo vio se interpuso entre su suegra y él, le tomó la mano, se la dobló con fuerza provocando palidez y dolor en el rostro del hombre.—¡Ni siquiera se atreva! Pedazo de cobarde, porque voy a triturarle los dedos uno a uno, para que nunca en su vida le vuelva a levantar la mano a una mujer. Anniston saca a este hombre de las instalaciones de
—¿Ethan? ¿Volviste? ¡Sabía que estabas vivo! —exclamó feliz, hizo amago de abrazarlo y él se alejó. Blake lo observó sin poder creer su actitud, entrecerró los ojos con sospecha, pensando que en cualquier momento le diría que se trataba de un chiste o una de sus ocurrencias, creyendo que era una broma de su parte, se quitó la toalla y se arrodilló en la cama con una expresión seductora. Ethan la vio, no pudo evitar que sus voluptuosos senos causaran una gran erección en él, enseguida la toalla se levantó haciéndose una gran carpa, ella se sonrió con picardía, tomó sus dos cúspides y empezó a acariciárselos, suavemente con sus manos, los ojos del hombre se posaron en el sitio donde ella se estaba acariciando, sus ojos se oscurecieron producto del deseo. —Si no te recuerdas de mí… —pronunció con voz ronca—, estoy dispuesta a hacerte recuperar la memoria. La parte consciente de Ethan, quería salir corriendo, pero la otra, más su cuerpo, estaban ardiendo por tocarla, por probar esos j
Blake, se quedó viéndolo, aunque era una mujer inteligente, en ese momento sus ganas de tener su propia empresa, eran más que pararse a pensar, por un momento que el desmemoriado Ethan, le había montado una trampa y al parecer ella cayó redondita a pesar de ser tan hábil o eso parecía.—¿Crees que me negaré a tu petición? —interrogó con una sonrisa y después con una expresión de picardía pronunció—. Acepto.—Bueno, ahora mueve ese cul0 y sube de nuevo tu valija a mi habitación o mejor te la subo yo —respondió bajando el peldaño de las escaleras hasta donde estaba ella, Blake lo siguió y cuando el hombre iba a introducir de nuevo su maleta en su dormitorio ella lo detuvo.—¡No la lleves allí! —él se giró sorprendido ante su petición, porque no la entendía.—Acabas de aceptar el trato, no entiendo, ¿Por qué no quieres que entre tus cosas en mi habitación?—Claro que lo acepté, pero aún no te he enamorado, hasta que no lo haga, no me meto más en tu dormitorio. Además, te cuento porque co