Ethan llegó a la habitación del senador en el hospital, se quedó en silencio por un momento, porque era difícil decirle a un padre, que secuestró a su hija porque la confundió con la esposa, se la llevó a su casa, la encerró, le arrebató la virginidad y la hizo su amante; y aun cuando descubrió que no era ella, la dejó junto a él. El hombre negó con la cabeza, por completo frustrado, porque definitivamente, no había una forma bonita de contarle eso a un padre, a menos que omitiera muchas cosas de lo sucedido.—Señor Beckham, le recuerdo que son diez minutos y ya el tiempo empezó a correr —expresó el senador sin perder detalles de las distintas expresiones que cruzaban el rostro de Ethan.—Lo siento, es que es un poco complicado contarle, no sé por dónde empezar —pronunció sintiéndose un poco contrariado, y rascando con nerviosismo su cabeza al observar el rostro intimidante del senador, lo cual no ayudaba mucho.—¿Qué tal señor Beckham si empieza por el principio? ¿Esa no es la mejor
Ethan podría decir que su encuentro con el senador Andrew Jarold, salió relativamente bien, pese a no tener, una aceptación expresa para cortejar a Blake, se podría decir que era una autorización tácita, porque no lo rechazaron, ni tampoco hub0 un gesto de oposición hacia él; en cuanto a la afirmación de los hombres Jarold de que debía merecerse a la chica de la familia, no podía estar más de acuerdo y no le importaba tener que ganársela todos los días, porque se había enamorado, era imposible ver a Blake en acción y no enamorarse de ella, las mujeres fuertes, aguerridas, siempre resultaban más atractivas a los hombres, pues les daba una satisfacción extra de poderlas dominar, aunque fuera imposible de lograr.Comenzó a despachar desde las instalaciones del hotel donde se hospedó, revisando los informes, aprobando nuevas inversiones, tuvo un par de videoconferencias con sus ejecutivos en otras sedes del mundo. Inició temprano a cumplir todas sus obligaciones porque deseaba estar junto
El senador Schimer, se quedó viendo a Blake entrecerrando los ojos, no entendía la actitud de la mujer, a pesar de verla exactamente igual con la que se comprometió un par de días atrás, parecía diferente, se veía desafiante como si no temiera en lo más mínimo su reacción, ni sus demandas.—¿Acaso estás intentando jugar conmigo? ¿A qué se debe tu actitud? ¿Perdiste la memoria para no recordar lo que puedo ser capaz de hacerte si te me opones? —pese en apariencia ser una pregunta, allí estaba implícita una amenaza.—¿En realidad no recuerdo que puede hacerme si me opongo senador Schimer? ¿Sería tan amable de recordármelo? Tengo problemas de memoria a corto plazo —. Ese trato de aparente respeto contenía una expresión de burla que no pasó desapercibido para el senador.—No sé si alguien te está aconsejando, o decidiste usar una nueva táctica conmigo, solo me queda decirte que no va a dar resultado. ¿Viste las declaraciones mías en los medios de comunicación? —inquirió el hombre sin deja
Jasón estaba en el salón del Hotel Intercontinental, esperando la hora pautada para dar la rueda de prensa que había convocado para ese día, en la sala lo estaban acompañando sus hermanos y esperaba a Ethan quien le prometió estar allí, sin embargo, los minutos pasaban y no llegaba.—Quizás se arrepintió, no quiere perder su prestigio, es aceptable y más un empresario de su talla, que actualmente está buscando que se apruebe un proyecto de ley importante para su empresa, verlo junto a nosotros, significara una guerra para él —pronunció Jasón un poco decepcionado.—¡No hables así! —exclamó Jaden. Quien en esos días aprendió a conocer a Ethan y sabía que no era hombre de dar su palabra para incumplirla—. Algo debe estar haciendo, que resulta más importante que estar aquí y seguro es algo relacionado con Blake.—¡Marcarle! Le he marcado y no responde, ni siquiera Anniston —replicó Jasón, quien sentía un poco de resentimiento porque sentía que toda la gente terminó dejándolo solo.—Tal ve
Blake hizo el recorrido con el senador hasta su casa, aunque las pistas que dejó no los llevarían hasta su destino, le servirían para hacerles saber que estuvo allí y por donde escaparon.—¿Estás decepcionada por no haber podido escapar? —no espero respuesta y siguió hablando—. Creo que no podrás irte de mi lado en mucho tiempo, los Jarold Gates están acabados, pobrecitos, ni la rueda de prensa pudieron hacer porque sorpresivamente los medios no se presentaron ¿Qué les pasaría? ¿Será que alguien intervino para que no fueran? ¡Qué horror! —habló el hombre en tono burlesco —. Voy a mostrarte lo sucedido.Enseguida el hombre les mostró el vídeo de sus propias declaraciones, de las turbas enaltecidas atacando a la mansión, el hospital, su padre queriendo hablar con la gente a punto de ser atacado y Ethan defendiéndolo, no pudo evitar que su corazón saltara de alegría en su pecho, se sentía orgullosa de ese hombre y su amor por él crecía a pasos agigantados, porque definitivamente lo amaba
Al final, los cuatro terminaron yéndose a la casa de los Jarold Gates, se sentaron en uno de los salones, instalaron un televisor grande y empezaron a reproducir la rueda de prensa, enfocándose principalmente en las palabras de Blake. Terminaban y lo reproducían de nuevo, al mismo tiempo interpretaban las señas que ella les dejaba, todos estaban concentrados en anotar, luego cada uno iba diciendo las palabras interpretadas. —Solo espero que nadie más se dé cuenta del mensaje dejado por Blake, porque de hacerlo ella estaría en un grave peligro —pronunció Ethan con preocupación. —No creo que más nadie se dé cuenta por qué las palabras pronunciadas por ella, pudieran hacer referencia a cuando Marlon encontró a Madelaine, por eso ni siquiera él sospecharía, porque casualmente la forma de tú enviar por ella y de encontrarse fue similar, incluso tengo entendido que ellos, discutieron también en el avión, por lo tanto, ninguno pondrá en duda que sus palabras están dirigidas a él —expresó Ja
Blake se quedó viéndolo sin sentir un ápice de temor, a pesar de que la actitud del senador era fiera, pendenciera, ella mantuvo una absoluta calma.—Senador, ¿En serio me está preguntando eso? —interrogó como si el tema le aburriera.—Creo que es hora de que me llames Marlon, después de todo vas a ser mi esposa y si te estoy preguntando es porque requiero de una respuesta de tu parte —habló con seriedad.—Te llamaré Marlon cuando estemos ante los medios o delante del público, cuando estemos a solas serás senador… en mi familia me enseñaron a respetar a la gente mayor… —pronunció con doble intención y con lentitud, como si estuviera explicándole a alguien falta de entendimiento. Esa actitud hizo que el enojo del hombre fuera en aumento.—No me agrada tu forma de hablarme… no te quieras pasar de lista ¿Dime que decía el mensaje de seña y por qué lo hiciste? —exigió fuera de sí de manera amenazante.—Ni se te ocurra tocarme un solo cabello, porque te juro que hasta allí llega este trato
Blake respiró profundo, y en vez de responderle a la pregunta, le reclamó su presencia allí. —Esta es la cuarta lección, de las que empecé a darle desde que volvimos a vernos, debe respetar mi privacidad, esa puerta cerrada indica que la persona no quiere que alguien entre o no desea ser interrumpido… la gente decente toca la puerta y espera la voz de pase, mi habitación no es la suya y yo no soy mujer suya, para que entre con confianza de esa manera sin tocar. ¿Entiende? —habló sin disimular su molestia. —Está bien, lo siento, no lo volveré a hacer. Ahora, respóndeme la pregunta que te hice ¿De quién quieres revelar los verdaderos colores? —interrogó sin poder ocultar su expresión de sospecha. —No conoces a la persona… —como vio su rostro de incredulidad continuó—. Es una chica que es travesti… anda enamorada de mi hermano Jaden, pero se niega a decirle la verdad —respondió con rapidez. —Como tu padre se expresa de ti, y viendo tú forma de ser, no creí que tuvieras problema con