Sus ojos grises toman una tonalidad oscura, la persona que ve sentada en su puesto de trabajo es completamente desagradable para el. La persona ya no era grato verla, Bjork no tiene paciencia y menos con personas que no le caen del todo bien.

─Me puedes decir que mierdas haces aquí?— ladea su cabeza enojado—¿ y en mi silla preferida?

Dice cerrando fuerte la puerta, tan fuerte que Melissandre sintió el estruendo al cerrar desde su puesto de trabajo. Mira en dirección a la oficina de Bjork y queda al pendiente ya que estaba encendiendo su computador cuando escuchó el fuerte sonido.

─Que manera de recibir a vieja amiga Bjork

Pues la chica no se asustó para nada con su reacción, no esperaba menos ya que lo conoce demasiado bien. Pasaron mucho tiempo juntos y sabe su carácter.

─Nada de amigas Agniezka, ¿qué mierda estás haciendo aquí? Vete qué no quiero verte más.

─No me iré—reta la mujer divertida.

─No me desafíes.

Se acerca con pasos agigantados, como un demonio la toma del brazo fu