CAPITULO 4
El beso de la noche anterior había sido una especie de venganza, una manera de bajarle su orgullo y subir mi ego, pero ahora este beso fue mucho más de mi parte.
Quería tenerlo en mi, sentir como nuestra pasión se unía para los dos.
— No puedo creer que te esté dando un beso, se supone que te tengo que odiar — Tenía muchas dudas en mi cabeza.
— ¿Y si siempre me quisiste?— me dio un beso en el cuello.
Aceptar eso era ir contra mi ego y orgullo, cuando estábamos en la secundaria, el me ayudó con algunas tareas y trabajos, pero no me aprovechaba de el, muy por el contrario estaba agradecida, y creo que fue la única persona que me trató con respeto y me dio un lugar de mujer y no de trofeo.
— No, esto no va a pasar de ser un sentimiento que no va a crecer — me alejé de el de inmediato — Además con lo de Esteban sentir esto es prohibido.
Me dirigí a mi habitación, no podía sentir esto, tenía que arrancarme este sentimiento de la cabeza, él era mi secuestrador, el me tenía aquí a la fuerza.
Yo no podía sentir ningún tipo de emoción cada vez que Pablo me besaba, quería sentirme lejana y sobre todo tranquila recordar que tenía una vida lejos de esta mansión.
Tenía que aceptar que Pablo era muy importante para mí, que yo tenía sentimientos por él cuando estábamos en la secundaria y que quizás por eso me sentía muy culpable cuando lo entregamos a él en vez de a nosotros para salvar el pellejo.
Esa noche no me pidió cenar con él, la comida llegó a mi habitación y preparo uno de mis platillos favoritos.
El se había dado cuenta cuáles eran mis gustos, sabía perfectamente que me gustaba y quién no, en un par de semanas había aprendido más de mí que yo misma.
— Mario, por favor dile qué quiero hablar con mi familia, específicamente quiero hablar con mi hermana — Paola era mi hermana y creo que era la única persona que iba a entender lo que estaba sucediendo.
Obviamente Mario de inmediato me miró muy mal, yo sentía que le estaba incómodando con mi presencia porque sabía que podía traer un problema entre los hermanos.
Según había contado Luisa, Mario era el guardián de los dos, era como un hermano mayor y se preocupaba por su bienestar más de lo que quisiera, me veía como esa posible causa de separación de ellos aunque en verdad en ese momento no era lo que yo estaba esperando.
Tenía miedo, tenia rabia y sobretodo intranquilidad de no poder mantener en control mis sentimientos.
Minutos después Mario me entrego aquel teléfono celular antiguo, llame de inmediato a mi hermana.
—¿Donde estás metida? Desde hace mucho papá está preocupado por ti — Paola no podía creer que yo estuviera hablandole.
— No te lo puedo decir, solo quiero saber si todos están bien, es lo único que quiero saber — Tenía mucha preocupación por papá , por mamá, por todos.
— La verdad es que el mundo no se detiene porque no estás, todo sigue muy bien, y bueno... Javier se comprometió con Carolina Burns, todo el mundo lo coloco como la víctima después de tu abandono — Paola me contaba.
Me dio una especie de escalofrío en mi pecho, no llevaba si no un par de semanas se que podía contar como pocos meses desaparecida, bueno ellos creían que yo había escapado de la casa pero eso no significaba que yo tenía que entender y sobretodo justificar su olvido.
—¿Tu cómo estás?— le pregunté intentando no llorar, no sentir que el alma estaba destruida.
— Me caso, mi novio por fin me pidió matrimonio, sé que mis papás están muy enojados contigo, pero creo que deberías venir a mi boda, es en dos meses — Senti algo en mi pecho.
No quería ser mejor que mi hermana, ni quería sobresalir más que ella, pero si quería casarme, Paola había destacado por su edad en muchas cosas sobre mi y casarme con Javier era eso en lo que yo le había ganado.
Ahora me doy cuenta que de nuevo Paola, a pesar de ser la hermana menor de nuevo me ganaba y era mejor que yo.
Le entregué el teléfono a Mario, el vigilaba las llamadas para que no dijera nada imprudente y le pedí una botella de vino para ahogar mis penas.
El la trajo, y la bebi en una de las escenas más ridículas y deprimentes de mi vida, con música de fondo, mientras pensaba que lo más espectacular de mi vida monótona era este secuestro.
No voy a negar que ser médico te traía grandes dosis de adrenalina, pero mi vida personal no era la gran cosa, prácticamente era una miseria, y lo mejor que iba a hacer era tener la boda del año con Javier.
Tomé un poco de aire, y suspiré por la nariz, el secuestro quizás era de esas historias de mi vida que hablaría y alguien me vería con interés.
Me tomé toda la botella, y me perdí, minera muy buena con el alcohol, nunca lo había sido.
Quizás era momento de cambiar de ser más arriesgada, salí de la habitación y busque a Pablo.
Literalmente me metí en su habitación, el estaba aún durmiendo y al sentir que alguien estaba allí creo que instintivamente saco el arma debajo de la almohada y me apunto, nunca había sentido tanta rabia en mi vida
—¡Soy yo!— grite alzando las manos.
— ¿Que haces aquí? Por poco me matas de un susto — bajo el arma mientras tomaba un poco de aire por la boca.
— Quería hacer esto — me acerqué y le di un beso en la boca.
Las cosas se pusieron intensas en un segundo, cuando me di cuenta estaba solo en ropa interior encima de él miéntras me besaba el cuello bajando por mi abdomen los besos.
— ¿Porque está sorpresa?— dijo susurrando en mi cuello mientras lentamente metía su mano en mi mojada pantaleta.
— el vino me hizo tomar valentía — sonreí y le di un beso en la boca.
El se alejó de mi, me tomo de las mejillas y me hizo soplar, obviamente tenía aliento a alcohol.
Me bajo de encima suyo con un pequeño empujón suave y con delicadeza mientras me miraba a los ojos.
—¿Que pasa? Regresa a la cama — le dije jalandolo del brazo.
El me pasó la ropa — Vístete —.
Abri los ojos sin entender porque me pedía esto —¿No quieres? Pensé que te gustaba y que los dos estábamos deseando que esto pasará, tomé la valentía de dar el paso —.
— Estás ebria, y yo no voy a tocarte de esa manera, soy un hombre de principios y no lo pienso hacer — Pablo estaba seguro de sus palabras.
— No es necesario, yo aún estoy consciente, solo tome un poco de más pero quiero hacerlo — le repetí y agarre el condón que posteriormente el había sacado de su mesa de noche para ponérselo.
El nego con la cabeza — Tu no entiendes, me gustas desde la preparatoria, he esperado que esto pase casi como si fuera un sueño en mi cabeza pero no quiero tocarte en ese estado — empezó a vestirme el mismo con sus manos.
No sabía que decir, la verdad es que Javier no era como el, Pablo de verdad me respetaba.
Me beso en la boca y me cargó hasta llevarme a mi habitación, me arropó y se quedó allí hasta que me quedé dormida.
A la mañana siguiente desperté con uja jaqueca terrible, con la culpa de lo que hice y entendí lo que decía Pablo, no estaba en el cien por ciento de mis capacidades y no hubiera sido mágico, pero yo no volvería a tomar la iniciativa, era muy tímida después de lo que pasó.
Llegue a la habitación de Esteban, estaba muy feliz y me tomo de la mano — ayer no pude decirte algo muy importante, hoy es mi cumpleaños, vendrán algunos amigos y quiero que estés conmigo —.
Esteban no sabía que yo estaba secuestrada, Mario me había dejado claro desde el primer momento que yo no podía decirle nada, así que tenía que fingir que era una doctora con paga.
— No creo que sea prudente, lo mejor es que descanse un poco — le respondí nerviosa.
— Para el joven Esteban es muy importante que usted vaya, así que puede asistir si quiere — respondió Mario que estaba detrás de mi.
No sabía si era prudente, pero quizás esa fiesta me daba una oportunidad de escapar, quizás era la oportunidad de recuperar mi libertad y de escapar de la pasión que nacia en mi pecho por Pablo — Está bien, acepto ir a tu fiesta —.
CAPITULO 5La fiesta iba a ser algo pequeño, obviamente no sería un evento como los que yo estaba acostumbrada de la alta clase social, y los amigos que teníamos no eran en común.Creo que por eso Mario me dejaba ir a la fiesta, pero yo pensaba que era mi oportunidad de encontrar una ruta de escape.Pensé que quizás al llegar tanta gente podía camuflarme, entrar a algún vehículo, hacer un intento para dejar atrás esta casa, y sobretodo la pasión que tenía metida en el pecho.No era una mujer de tomar riesgos, era más bien el típico ratón de biblioteca pero no hacía falta entender que está era una gran oportunidad para mí.Luego de terminar la terapia, Luisa llegó y me llevó a su habitación — Estos son los vestidos que compre para las dos, creo que eres de mi misma talla — sonrio.— Quiero escapar esta noche Luisa — sabía que era un riesgo decirle esto a la prima de mi secuestrador, pero me daba cuenta que Luisa era diferente a todos.—¿Estas loca? No puedes, a pesar que es una fiesta
CAPITULO 6 Obviamente para todos los presentes que sabían mi condición de secuestrada, yo había querido escapar. Sí era verdad que había intentado hacerlo pero en el fondo de mi corazón es por el miedo a todo lo que estaba sintiendo. Tenía mucho miedo dentro de mi cabeza que al enamorarme de mi propio secuestrador estuviera cayendo en un pozo sin fin. Temblaba con mucho nerviosismo mientras intentaba suspirar un poco, lo único que necesitaba en ese momento era tener un poco de paz. Pablo llegó muy temprano para traerme el desayuno, obviamente había estado encerrado en mi habitación desde el momento en que pasó todo esto. — Yo te juro qué me arrepentí de escaparme después de lo que sucedió entre los dos, tienes que entender que todo esto es muy difícil para mí — mi voz temblaba solamente con hablarlo. Pablo me miró fijamente a los ojos, él tenía dentro de su corazón una terrible angustia por lo que yo había hecho y me imagino que supuso que solo lo seduce para poder llegar a la
CAPITULO 7Obviamente nos preocupamos mucho por la situación de Esteban, la verdad es que no podía entender que estaba sucediendo en su cuerpo pues hasta donde yo había dejado todo el se encontraba en excelente estado de salud.Tenía que aceptar que no había podido hacerle muchos de los exámenes necesarios porque Pablo y Mario se negaban a sacarlo de la casa.Efectivamente él se encontraba en el suelo y con la mucha sangre saliendo de su nariz por lo que primero decidí controlar esta hemorragia y les pedí que la ingresarán a la casa.Tenía mucha fiebre lo que se me hacía muy extraño, el accidente había ocurrido hace mucho tiempo y la verdad es que no había ningún motivo para que después de casi tres meses existiera una infección.— Tengo que llevarlo a un hospital para hacerle exámenes, o por lo menos que me permitas conseguir a una persona que le tome las muestras aquí después nos envían los resultados — quise desplegar de inmediato a Pablo lo delicado del asunto.— No podemos hacer
CAPITULO 8Esteban era una persona muy importante en mi vida, a pesar de todo lo que había sucedido en estos días yo seguía considerándolo como una persona fundamental en mi crecimiento personal y sobre todo porque me hacía muy feliz como persona.Tenía mucho miedo de lo que podía llegar a suceder en el futuro entre Pablo y yo pero la verdad es que no podía dejar que Esteban terminara con esta enfermedad.—¿Qué tengo que hacer para salvarlo?— se puede escuchar el desespero en La voz de Pablo en ese momento.— tenemos que llevarlo algún hospital la verdad es que todo lo que yo te estoy diciendo son con exámenes muy mínimos, tiene que ser sometido a muchos estudios para saber cuánto tiempo avanza la enfermedad y sobre todo qué tratamiento sería mejor para el — quería que Pablo se diera cuenta que esta situación se estaba saliendo de las manos.Inmediato Pablo llama Mario le pidió que consiguiera una clínica donde no pudiéramos pasar ningún tipo de peligro en especial Esteban y que no tu
CAPITULO 9 Esto tenía que ser una verdadera broma, Mario me detestaba con todas las fuerzas de su corazón, quería entender porque parecía odiarme cada vez más pero la respuesta creo que no era lo que yo esperaba. —¿Porque tienes esta foto de mi mamá?— el cuestióne de prácticamente de inmediato mientras le entregaba la billetera que se le había caído. — Eso es un asunto verdaderamente privado del que tú no tienes ningún tipo de información — se enojó demasiado y me quitó la billetera de las manos prácticamente rapandomela. — Yo sé qué clase de hombre eres tú pero lo único que quiero es que te alejes de mi familia para siempre, es más que claro que la historia que acabas de contar es sobre mi mamá — la única cuestión que se me había metido en la cabeza. — Si, no sabía que tu mamá era Carolina, itdt este es el primer momento solamente porque te pareces demasiado a ella lo que significa que me traes malos recuerdos ¿Contenta? — me preguntó en ese tono completamente irónico. La verdad
CAPITULO 10 Lo primero que teníamos que hacer en ese momento era preocuparnos por Esteban, recuperación iba a hacer tardia y la verdad es que en el fondo de mi corazón lo único que yo quería era que él se sintiera tranquilo. Pablo estaba muy angustiado con todo lo que estaba sucediendo y me pidió hablar durante unos segundos conmigo. — Creo que lo que dijo Mario de cierta manera puede ser verdad, sabes perfectamente que mi hermano está muy enamorado de ti y considero que sería un hermoso último deseo poder casarse contigo — Pablo me estaba pidiendo que me casara con su hermano, a pesar de que hace tan solo unos minutos nos estábamos diciendo lo mucho que nos queríamos . — Entiendo perfectamente que estás muy angustiado por Esteban, pero yo no me puedo casar con un hombre que no amo sencillamente por eso, y mucho menos cuando el hombre que hagamos precisamente a su hermano la verdad en el fondo de mi corazón Yo no podría con tanta presión — quería dejarle muy en claro que estaría pa
CAPITULO 11La decisión había tomado desde antes de ingresar a ver aquella escena pero prácticamente el mismo Pablo con su actitud con esa mujer a la que no conocía pero sentía tanta rabia que podría agarrar la de los cabellos me hizo dar ese último impulso para darme cuenta de que tenía que hacer realidad el sueño de Esteban porque realmente Pablo solamente estaba jugando conmigo.— hubieras presentado mejor así, yo soy Manuela, digamos que dentro de muy poco también voy a poder decir que soy la prometida de Pablo — la mujer le dé un beso en la boca mientras yo me encontraba aquí.Pablo le pidió un poco despacio porque necesitaba hablar conmigo de algunos temas relacionados sobre la recuperación de Esteban aunque yo sabía perfectamente que lo que quería hablar conmigo era sobre la situación de esta mujer que se encontraba prácticamente a su disposición inmediata.—¿Estás segura de lo que acabas de decir?— el de inmediato frunció el ceño mientras me miraba fijamente a los ojos esperan
CAPITULO 12Desperté después de haberme desmayado mientras intentaba gritar o por lo menos llorar al recibir esta noticia, tía completamente incrédula de todo lo que estaba sucediendo y en el fondo de mi corazón lo único que deseo ver a salir corriendo de aquí a la casa para saber que había sucedido exactamente con mi padre y entender lo que había pasado.En este momento de mi vida nunca había sentido tanto dolor dentro de mi corazón y lo único que yo necesitaba en ese momento que tener un poco de libertad para poder seguir adelante con todo el proceso que vendría.En el fondo de mi corazón lo único que necesitaba era poder continuar hacia adelante y sobre todo poder entender que las cosas habían sido diferentes para todos los que hacían parte de mi mundo.— si quieres hacerme más daño Mario por favor esto es la peor cosa que pudiste haber intentado — llegué a creer que todo era una mentira de Mario para vengarse porque lo había intentado confrontar.Mi papá era un hombre saludable y