Dayana estaba en clases pero tenía la mente perdida, esta era la segunda carrera que estaba cursando, la primera fue administración de empresas, consideró que era la más apropiada para estudiar primero por los negocios de su familia en los que desde muy pequeña ya era parte de ellos, al cumplir la mayoría de edad su madre y su padre le dieron acciones en todas sus empresas, una vez concluida esa carrera a los 21 años, empezó a estudiar arquitectura, ahora Dayana ya tenía 26 años y estaba próxima a graduarse ella era una de las pocas personas más grandes en el campus.Edgar tenía 22 años, la misma edad que su hermano Leonel, quizás la diferencia de edad era un factor muy importante entre ellos ya que para Dayana el era un hombre inmaduro y desesperante pero Leonel no era inmaduro como Edgar; pero no iba a justificar su mal comportamiento con la madures, Edgar merecía todo lo que Dayana tenía planeado contra el. Al salir de el salón de clases Edgar iba pasando por el pasillo, cuando la
Leonel se sintió pésimo al mirar como Amanda se puso triste, empezó a recapacitar a fondo sus palabras y pensó que ella tenía razón, el amaba a esa mujer por ende le daría el lugar que le corresponde dentro de su familia, si a Dayana le molestaba que Amanda fuera a su casa junto con el entonces el no volvería a poner un pie en ese lugar.— Tienes razón, haremos esa fiesta sorpresa para ella no te preocupes.— ¿Pero si ella se molesta al verme ahí y me echa? No quiero causarle problemas y arruinarle su cumpleaños.— a ella se le entró corto la voz.— No, no digas eso, Dayana no reacciona de esa manera si algo le molesta me lo dirá a mi no se irá contra ti, si le molesta no te preocupes nos iremos ambos a comer o al cine ¿Qué te parece? — Me parece bien.Amanda sonrió ampliamente y a Leonel eso le llenó de alegría el corazón, no se imaginaba que para Amanda el no significaba lo mismo; Leonel había tenido otras novias antes pero sufrían por separaciones de lo más normales, terminaban su
Amanda estaba sentada en la revuelta cama de Edgar poniéndose su ropa mientras el la observa recostado con uno de sus brazos tras su cabeza, Amanda se miraba como una chica tierna, inocente y callada pero resultó ser todo lo contrario, las apariencias engañan. — Bueno me voy, tengo cosas que hacer.En cuanto Amanda termino de cambiarse se puso de pie y tomo su bolso, Edgar también se levantó de la cama, Amanda se sonrojo al admirar su desnudez y los recuerdos de lo que acaban de hacer empezaron a proyectarse en su mente; Edgar tomó su pantalon del suelo y se lo puso.— Bien, te acompaño a la puertaAmbos salieron de la habitación, a ella le temblaban un poco las piernas Edgar era muy brusco y salvaje a comparación de lo que Leonel era en la cama, aún así se sentía satisfecha y lo peor de todo era que al recordar a Leonel ni siquiera sintió culpa alguna por lo que acaba de hacer.Ya iban llegando a la puerta cuando esta se abrió de repente, ella paró en seco mientras Edgar tocio los o
Al día siguiente al terminar las clases Edgar se encargó de entretener lo suficiente a Dayana para que Amanda y Leonel arregalan la fiesta sorpresa; para Leonel fue un golpe de suerte que Edgar se llevara a su hermana ya que no sabía como entretenerla para ganar tiempo, lo que ignoraba era que Amanda se había encargado de encomendarle eso a Edgar, nada que ver con la suerte.Ambos iban en el elevador, subiendo al piso donde vivía Dayana, al llegar Amanda se sorprendió al toparse con una puerta negra que tenía un panel con números a un lado, Leonel puso el código que Amanda se memoriso rapidemente.Al entrar al lugar ella se quedo boquiabierta, el edificio no era de lo más llamativo así que jamás imagino toparse con ese tipo de departamento, si bien la casa de Leonel era amplia siempre había cosas regadas por todos lados, pero el departamento de Dayana estaba a otro nivel, los muebles combinaban entre sí dando un aspecto contemporáneo y elegante al lugar, Dayana tenia varias decoracion
Al tener la mirada aguda de Dayana sobre ellos Amanda empezó a ponerse nerviosa gotas de sudor empezaron aglomerarse sobre su frente.— ¡Feliz cumpleaños Dayana! .– Leonel grito y levanto los brazos, Amanda sonrió nerviosa mientras Dayana levanto ambas cejas.— Queriamos darte una sorpresa jeje.– dijo Amanda nerviosa, tenía miedo de la actitud de ella, siendo sinceros le tenía un poco de miedo a Dayana.— Y vaya sorpresa.. Dayana quitó la mirada de Amanda después de hablar para posar su mirada ahora sobre Leonel, este también estaba algo tenso, cuando el miró a Amanda sintió que se le apretó el corazón, estaba tan nerviosa y con miedo se miraba tan frágil y pequeña una extraña valentía lo invadió.— Dayana necesito hablar contigo.– Leonel hablo claro y firme mientras caminaba hacía Dayana.— De acuerdo yo también..Leonel mirlo a Amanda y le hizo señas de que se relajará, Dayana ya se había girado y entrado de vuelta al departamento, no sabía como reaccionar solo sabía que estaba alg
Amanda sonrió un poco tímida pero se recompuso de inmediato, aún así Dayana se había dado cuenta de su nerviosismo.— No te preocupes por eso Dayana, yo cuidaré muy bien de Leonel, yo lo amo.— Bueno eso espero "cuñada"... ... Ya eran altas horas de la noche cuando Leonel y Amanda se marcharon, Amanda se la había pasado algo callada pero atenta a lo que Dayana y Leonel hablaban, lastimosamente solo eran cosas de la universidad, habladurías entre los estudiantes, cosas coloquiales y algo de un viaje a Minnesota dentro unos meses fuera de ahí nada de relevancia, para ella por lo menos, como ya era muy tarde cuando Leonel dejó a Amanda a su casa tendría que ir con Edgar hasta el día lunes, el día siguiente era sábado y Dayana pasaba la tarde con el y el domingo ya había echo planes con Leonel.....El sábado era un día muy caluroso, Dayana estaba acostumbrada siempre a estar tapada pero ese día en especial el clima estaba fatal, se puso una falda ajustada no tan corta, un sostén deport
Trato de ser ajeno a ella y se volteó a otro lado sintiéndose como un depravado, pero sus instintos eran aún más fuertes la necesidad de verla lo carcomia por dentro, después de todo no era la primera vez que miraba a esa encantadora mujer en ropa interior, el ya había tenido la dicha de ver su piel desnuda, ante esa idea el cuerpo de Alexander empezó a vibrar, incapaz de controlar sus impulsos se puso de pie.Dayana acaba de ponerse el pantalón que Edgar le había regalado, sorprendentemente le había atinado a su talla, más sin embrago ella prefería usar siempre una talla más grande para evitar que la ropa le quedara muy ajustada al cuerpo como ahora, sin más metió su falta a la bolsa y salió de la sala para ir a la habitación de invitados, cuando de repente escuchó una puerta abrirse a sus espaldas. Ella giró rápidamente, abrió mucho los ojos al ver a Alexander salir de su cuarto, su rostro empezó a teñirse de rojo al recordar que había cámaras en la casa y ella creyendo las palabr
Alexander no lograba concentrarse en los documentos que tenía al frente, en su mente se repetía el momento con Dayana, sonrió divertido al recordar, no se esperaba esa reacción atrevida y agresiva de parte de ella.Su cuerpo tenía un exceso de energía que necesitaba ser liberada con urgencia; cerró los ojos y se recargo en su silla reclinable."Si tan solo Dayana no me hubiera rechazado" ....El sonido de metal golpeando hizo que Dayana se despertara, ya había pasado quizás más de una hora desde que se acostó en la cama y se quedó profundamente dormida; se sentó y empezó a frotar sus ojos, de repente el gruñir de su estómago la tomó por sorpresa, no estaba segura hasta que hora regresaría Edgar así que ella se dispuso a pedir algo de comida a domicilio.Cuando el repartidor ya estaba por llegar Dayana salió de la habitación y fue a recoger el pedido, cuando regresó se metió en la cocina en busca de un plato y algo de beber, no era la primera vez que estaba en esa cocina así que sabía