AlbertoNo sé cuántas botellas llevo o si estoy alucinando, pero creo es que me volví loco, pero de no ser así mejor saco mi celular y lo pongo en cámara tomó unas cuantas fotos para después poner el celular en modo vídeo. Pues de ser así tengo a Cinthia en mis manos, nunca me imaginé que venir de mañana a este bar me fuera a dar grandes sorpresas pues aparte de darme la sorpresa de que mi mejor amigo está con Cinthia también acabo de caer en cuenta de quien le dice en dónde estoy y todos mis pasos es Santiago.Se supone que él y yo prácticamente somos como hermanos pues mi padre y Fernando siempre fueron muy buenos amigos y así crecimos los dos, para donde iba él una iba el otro siempre fuimos como los tres mosqueteros, pero solo los dos, es por eso que me siento traicionado, dolido, en Santiago siempre busqué un amigo compartimos muchas cosas, pero jamás me imaginé de él, y no lo digo por Cinthia por mí él y ella se pueden ir al infierno.Lo digo porque aparte de mi Santiago era la
MonserratBusco en la habitación de Carlos algo de ropa que le quedé a Harry, pues después de su baño en lodo lo invité a pasar a la casa y por supuesto a la habitación de huéspedes para que se dieran un baño pues en verdad se lo merece.—Harry aquí te dejo algo de ropa sé que tal vez no es de tu talla, pero me imagino que te servirán poco ya tu ropa la dejé en la cocina para que mi nana la lleve a la tintorería y mañana te la hago llegar y otra vez mil gracias por salvarme sombrero —digo del otro lado de la puerta y lo peor es que cada vez que me acuerdo me causa gracia ver cómo quedó Harry lleno de lodo y lo mejor es que tengo recuerdo pues mi Nana Lilia cuando ingresamos lo hizo posar para ella, no sé cuántas fotos le tomo, pero si se que nunca olvidaré el día que él gran Harry Connor hizo lo que le pedía mi Nana.—Gracias hermosa te debo una, o sin ti no sé que sería de mí, o si ya se sería una estatua más rodando por las calles, aunque a no creo que sería una estatua, más bien se
AlbertoDecidí irme de casa de Monserrat y no decir ninguna palabra a Monserrat, aunque por dentro sentí que me moría, ahora me siento como un grandísimo idiota a quien solo le vieron la cara, por qué la verdad no veo explicación, Monserrat aun estando conmigo también estaba con otro su amor solo fue una demostración falsa, y aunque sé que era virgen cuando estuvo contigo.Pero por otro lado siento algo en mi corazón y mi cabeza da vueltas al recordar aquel bebé y aunque suene ilógico y si fuera mío, y si ese fuese mío y de Montserrat, pues es apenas un bebé de meses y ella se fue hace ya un año, «hay Dios dame una señal» pero tendré que salir de esa duda, mañana por ahora veo que ya es demasiado tarde y necesito pensar con la cabeza fría y poner en orden mis ideas.Así que prefiero irme a un departamento de los cuales soy el dueño y sé que están desocupado pues al mío no quiero ir y menos saber que Cinthia daño todas mis cosas, esa maldita loca está dispuesta acabar con mi paciencia,
MonserratHace unos segundos vi como Alberto entraba a mi oficina, la verdad decidí esconderme, todavía no me siento preparada para enfrentarlo y más sin saber como va a reaccionar, bueno ya tendré tiempo para hablar con él pues sé que no debo dejar pasar mucho tiempo de lo contrario sé que él haría cualquier cosa por quitarme a mi bebé.Después de que miro que se va voy hacia mi oficina camino e inhalo su aroma que quedó impregnada en mi oficina no entiendo porque sigo siendo cosas por él, por qué si después de todo el daño que él me causó no entiendo y es la misma pregunta que me hago todos los días la cual mi corazón todavía no tiene respuesta, pero sé que lo voy a lograr a si me lleve toda una eternidad la voy a olvidar, me siento en mi escritorio y tomo mi celular y le marco a Mónica que ya para este momento debe estar disfrutando su luna de miel.—¡Hola Montse! —dice al otro lado de la línea.—Hola hermosa, que pena que tú luna de miel se haya atrasado un poco y por mi culpa —di
AlbertoDespués que Marina cancela todas mis citas y juntas, ahora voy en mi auto hacia el apartamento de Cinthia, pues si quiero aclarar las cosas con Monserrat tengo que empezar por terminar con la farsa de mi relación con Cinthia, en el camino la llamé y dijo que si yo quería el perdón tenía que hacer muchos méritos.Y vaya que si los voy hacer, pero estar lejos de ella, al llegar al apartamento de Cinthia lo primero que hago es tomar sus llaves y sacarlas de mi llavero porque después de hoy, después que hable con ella no pienso volver a pisar nunca más este apartamento, subo por las escaleras ya que el piso en que vive Cinthia es el segundo así que no veo la necesidad de tomar el elevador, camino por los pasillos hasta llegar al apartamento de ella, está vez no abro la puerta si no que decido tocar, tocó dos o tres veces hasta que sale ella puesta en un pequeño babydoll, vaya creo que se quiere esmero para que yo le pida perdón ja.—Te habías demorado en venir, no crees Alberto —
MonserratYa casi es hora para que venga Harry por mí, pero no sé si quiero verlo y más después de lo que hizo hoy en la tarde, nunca esperé un beso por parte de él, yo siempre lo vi como un amigo nunca lo vi como algo más en mi vida, y ahora me siento pésimo, no quiero crear ilusiones de las cuales no sé si pueda corresponder, pero por ahora tengo que ir paso a paso, por ahora solo queda concentrarme en esta cena, así que retoco por última vez mi maquillaje y listo, decidí ponerme un vestido negro ceñido al cuerpo hasta mis muslos, pues a Harry se le ocurrió que después de cenar iremos a bailar así que tengo que estar cómoda, además hace mucho que no lo hago.—Mi niña, el señor Connor ya llegó —Escucho a mi nana, justo cuando iba para la habitación de Alex pues tengo que darle su besó de las buenas noches.—Si dile que ya bajo, me despido de Alex y voy —respondo, así que entró en la habitación de mi pequeño y voy hasta su cuna donde duerme como un angelito, verlo dormir plácidamente
AlbertoIntento recuperar mis fuerzas para poder levantarme del suelo, pero por Dios está mujer en donde aprendió a pegar así de esa forma, creo que me saco el aire más de tres veces, me levanto y me pongo de pie al escuchar dos mujeres murmurar por qué estaba en el baño de mujeres, desde luego pedí disculpas alegando que me había equivocado, «está me las pagas Monserrat», salgo del baño directo hacia mi mesa y ahí está al lado del estúpido que se atrevió a besarla a la fuerza, pues a simple vista se vio que la tomo desprevenida, en esos momentos sentí una ganas tremendas de caerle encima y tomarlo a golpes.Pero no me fue posible ya que en ese momento un mesero se me atravesó y no alcance a llegar por eso cuando vi que Monserrat se levantó y fue directo hacia el baño no lo dude y entre tras de ella, confieso que se me removió todo por dentro al verlas así de hermosa y que no era para mí, por eso no pude resistir las ganas y la acorrale así como a un borreguito y sin pensarlo la bese
MonserratNo puedo creer que Alberto sea un bruto un patán y se aproveche de su fuerza para llevarme quien sabe dónde, aunque por dentro estoy llena de nervios. —Llegamos, y de una vez te aviso si intentas correr voy a ir tras de y te vuelvo a traer, así que le voy a quitar el seguro a la puerta y solo quiero que seas una niña buena y no hagas nada. —En verdad es un estúpido—Eres un bruto, cómo se te ocurrió golpear a Harry, y dejarlo tirado sin ayuda —digo pues sé que le voy a causar más rabia, y justamente lo que quiero ven esté momento, pues si quería hablar conmigo no tenía qué actuar como un troglodita, bruto, al cual quiero matar en este mismo instante—Deja de pensar en ese riquillo, él está bien, solo lo calme lo que él empezó y tranquila a él no le va pasar nada, si solo fue un puño en su estómago no fue nada del otro mundo, deja el dramatismo, y ya bájate que necesitamos hablar —dice, en verdad es despreciable, cómo que fue para calmarlo—Está bien, voy hablar contigo, per