Ella le había dejado todo lo necesario para avanzar en el desierto sin problemas, un jeep con GPS, agua y comida. El campamento no estaba tan lejos de la ciudad, unas cuatro horas en auto, ella tenia que dejar el jeep a unos veinte kilómetros antes de llegar al campamento, pues este estaba ubicado de tal forma que se podía ver desde gran distancia quien se acercaba vía terrestre.Lo único que tenia que hacer era llegar con sigilo por la noche, y eliminar su problema número uno. De allí desaparecer de nuevo.Por supuesto, sabía que no iba a ser nada sencillo, pero llevaba puesta la vestimenta típica de los empleados que se habían llevado al desierto. Esperaba que eso le ayudara, no importaba como, tenia que llegar hasta ella. Acabar con ella.Faltaban algunas horas para que el sol se pusiera, así que tomó su disfraz y fue hasta donde estaba el jeep. Encontró todo lo que le habían asegurado estaría.Sonrió complacida, la tonta servía de algo pensó. Aunque aun debía esperar a que esa ton
Amal lloraba y gritaba como una posesa. Estaban en las oficinas de migración del aeropuerto en Madrid. Ya había sido esposada y la sombra esperaba relevos para llevarla de vuelta a Durban. Amal había sido identificada desde poco después de haberse bajado del avión en el segundo país que había visitado, no habían dejado de seguirla porque la mujer estaba infringiendo las leyes de su país, ya no tenia derecho de salida y había pasado por alto eso al fugarse, se le añadía suplantación de identidad.Déjame ir y te diré todo. –le dijo.De todas maneras, dirás todo. –le dijo la sombra sentado tranquilamente en el filo de un escritorio frente a ella.No diré nada, me callaré. –le escupió, aunque no lo alcanzó.Fátima ha sido capturada. –mintió. –ya ha dicho todo de ti.¡Maldita! –gritó.Decían que Fátima estaba vagando por el desierto, que la vestimenta que llevaba era de Palacio y que seguramente ahora llevaba puesta otra y dada la similitud de la ropa en Durban había podido huir. El caso,
León bajaba corriendo la escalinata de la salida del edificio del consejo, jamás nadie le había visto con semejante premura y desesperación en el rostro. Entró de inmediato al auto que le esperaba.¿Quién te dijo? –preguntó a Abdul que iba en el asiento del copiloto.Karim es amiga de mi madre. –le dijo por toda respuesta.¿Y así te has enterado?Claro que no, Karim me llamó inmediatamente esperando poder hablar con usted mi señor. Le preocupaba muchísimo el estado en el que se fue la princesa y que pudiera ocurrir algo.Pero, ¿te dijo que es lo que pasa?Lo único que le dije, que la princesa debe estar internada en el hospital, que allí no correría peligro. Dijo que en el hospital le diría lo que quisiera saber, que le dejaría a la princesa que hablara con usted primero.No contesta. –dijo pulsando nuevamente remarcar. Sus dedos no coordinaban bien, se fijó y abrió y cerró las manos en puños con rapidez para quitarse la lentitud que parecía haberle agarrotado las manos.He mandado la
***************¿Niños? Quizás algún día, cuando encuentre un apuesto hombre que me haga querer darle uno. –decía Jaquie comiéndose un helado y mirando hacia el inmenso mar azul desde su tumbona.¿Para retenerlo? Que melodramático. –contestó Allyson burlona.No, para quedarme con una copia suya cuando me abandone por una súper modelo. –le contestó llevándose una mano al pecho teatralmente.–les dijo Gabriela ajustándose las gafas de sol. –no creo que tengamos hijos, al menos no pronto. -Cinco chiquillos aparecieron frente a ellas, dos era niñas y jugaban un improvisado partido de futbol bajo la mirada de unos adultos cercanos, no parecían rebasar ninguno de ellos los cinco años.Oh, son tan lindos. –Allyson se incorporó para verlos mejor.No me veo siendo madre. –dijo Jaquie pero tenia una sonrisa mientras los veía jugar. -¿Qué hay de ti Gab?En un futuro sí…Recordaba con nitidez esa conversación y aparecía en sus sueños vez tras vez ¿Por qué? Justo cuando quería despertar, el sueño
Dicen que la vida se compone de momentos, que no cuentan aquellos en los que estás respirando sino, aquellos que te dejan sin respiración. Pues él había estado a punto de morir también, se había olvidado hasta de respirar cuando la había visto tirada, con Azima abajo y con sangre en sus piernas, mortalmente pálida, pese a ello había susurrado su nombre y no había ido a ponerle fin a esa maldita mujer. Y, sinceramente no importaba el terror que él había vivido al pensar que la había perdido, simplemente no soportaba que ella cargara con el trauma también. En las esas fatídicas horas en que ella no despertaba, vez tras vez había pensado en ir al hospital donde Fátima estaba y terminar con ella de una vez por todas, pero no había querido separarse de Gabriela. No había podido ni dormir pese al cansancio, la zozobra y el miedo lo habían tenido atado a ella y despierto. Su padre le pedía que descansara para que cuando ella recobrara la conciencia él estuviera en condiciones de poder seguir
–le dijo Karim con una sonrisa sorprendida al momento de inclinarse. –pensé que iría yo a verle. No debió…Oh, sí que debí. –le dijo entrando y dándole un breve abrazo, le agradó que Karim se lo devolviera y no quedara paralizada por la impresión. La gente de Durban no era afecta a demostraciones públicas de afecto.Me alegra verla tan bien.Es que mejor, imposible. –se sentó.Estaba viendo su expediente precisamente, todo marcha bien. No hubo complicaciones, la cirugía fue muy noble, incisión pequeña, por dentro todo va muy bien. Cicatrización perfecta y luce genial. –concluyó Karim desde su escritorio.Tengo una pregunta.Por supuesto.¿Habría mucho problema si busco un bebé…? Sé que sí, es decir, ¿Cuánto debo esperar para buscar un bebé?Han pasado tres meses, yo recomendaría por lo menos un año completo. Espero que no se impaciente princesa, a la larga eso podría tener un efecto adverso. Puede tensarse demasiado y su cuerpo no querrá cooperar.Es cierto. –suspiró. –en ese caso yo…
Así que, esa fiesta será dentro de pocos días. A mitad de las demás celebraciones. –explicaba Habiba a Gabriela al día siguiente.Que raro, insisto que mi profesor de historia jamás la mencionó.Es nueva. –intervino Baasima.Entonces, explíquenme. –pidió Gabriela.Pues, es una fiesta de disfraces, puedes elegir el que mejor te vaya. Muestra piel, escote, qué sé yo y seduce a León.¿Y provocar un incidente internacional?Llevarás una máscara.Juega con él, tiéntalo…Yo…Gabriela, él está loco de amor por ti y cuentas con el aliciente de que es hombre apasionado o ¿me equivoco?No Azima, no te equivocas.Esto está a tu favor. Te pondrás esa noche bellísima. Y verás como todo fluye.Es más ponlo un poco celoso y tendrás el cóctel perfecto para enloquecerlo. –dijo Baasima.¿Celoso? No sé si sea buena idea. Porque se pone muuuuy celoso por lo general.Genial entonces. –concluyó Habiba.Seamos sinceras, necesitamos ayuda. –dijo Azima poco después.¿A qué te refieres? La fiesta se realizará.
¿Mis primas? ¿Azima, Habi y…?Son lindísimas, ahh me recuerdan como es que era de joven.Ni que fueras una vieja Jaquie. Serás mayor por unos ¿Qué? ¿dos o tres años?Sí, pero siendo madre y esposa de alguien como Stefano, créeme te da experiencia que de otra forma solo conseguirías después de muchos años.El caso es que nos llamaron y dijeron que necesitaban ayuda, para organizar un escenario perfecto de seducción. –Gabriela las miró sorprendida.¿Perdón?No pedimos más explicaciones en ese momento, nos daban la salida ideal y secreta. Hablamos con ellas hace poco y nos trajeron contigo. –Allyson continuó.¿Qué les dijeron?Que León está temeroso de que algo te pase y por lo mismo está muy contenido.Sabemos todo. O al menos lo que les has dicho. –le dijo Jaquie.No quiere hijos, no quiere que nada me ponga en riesgo. La vida misma es un riesgo y parece olvidarlo, el problema es que él ahora se considera uno para mí, creo que no quiere volver a tocarme en su vida. –Gabriela dijo todo