Suspire despertando después de haber tenido un segundo encuentro al término de su pequeña reunión con Isaac, me había dejado en las nubes, no en las estrellas, mejor dicho.
Era de mañana nuevamente y me asombro que estuviera dormido a mi lado. Miraba como se marcaban sus músculos, y como esa sábana dejada en la cintura lo hacía ver más sexy, podría montarme en él, pero estaba algo cansada.
Pase mis manos por su abdomen, abre sus ojos con una sonrisa y me sonrojo avergonzada.
— Eres demasiado traviesa Lunita — Negué con una sonrisa.
Agarro mi mano y la encaminó desde su abdomen hasta su mejilla. Acaricia mi pequeña mano dejándome un pequeño cosquilleo en mi brazo.
— ¿Me debo de acostumbrar a ese apodo? ¿cierto? — Se gira para que lo mire, y el me ponga más atención a mi.
Me agarra de mi cintura pegándome a su cuerpo y suspiro extasiada.
— Claro, eres una luna oficial. Esa marca dice eso y también dice, que eres m
— Eres un jodido mangar — Besa pausadamente mis labios. Asiento aún perdida en sus labios.Me carga aún besandonos , entramos a la regadera y mueve las llaves dejando el agua tibia. Me besa pegándome en la pared y rió un poco recordando lo que a veces le decía a mi hermano con su novia “duro contra el muro”.Suspiro observando sus ojos, agarro su rostro mirando sus facciones bien definidas observando el rojo en sus ojos, tiro mi cabeza hacia atrás cuando atacó mi cuello dejando leves mordidas y besando las zonas sensibles de este.___Sonrió acomodando mi ropa, mirando el fino vestido que tiene una caída desde mi cintura demasiado sutil, el escote en mis pechos es algo que uso a mi favor con él. Me mira con una sonrisa cuando sale de la ducha, se trata de acercar, pero lo detengo usando como arma un peine.— Alto ahí, estás mojado y arruinaras mi vestido — Se acerca y me besa sin tocarme.— Nada de hacer
- Axel...- El jadeo de Sara lo dejo desprevenido a cualquier otra cosa. Sabía que era todo un semental, pero solo sería un semental con su Luna.- Deja mi trasero. - Gruño molesta.Axel rio un poco mientras volvía a la espalda de su Luna, pero el simple vestido que llevaba se le hacía imposible no bajar sus manos hacia el perfecto trasero de su diosa humana y moldearlo a su gusto.Lamio la entrepierna de su Luna escuchando un gemido ahogado.Le gustaba ser el causante de ellos. Volvió a repetir lo mismo antes de besar el trasero de su Luna con delicadeza. Se detuvo cuando su Luna alzaba su trasero pidiendo más de su toque y sonrió.- Por favor. - Escuchó su petición, volvió a besar el perfecto trasero de su Luna dejando caricias en sus piernas. Le dio vuelta y beso esa parte intima de ella de rico olor, le parecía una exquisitez y sin duda era algo que probaría.___Salió sostenida de su Alpha, ya es
Meses DespuésEn estos meses he sido el hombre más feliz, al lado de la mujer que amo, la mujer que en este momento esta dando a luz a mi hija, a nuestra hija, a la futura Reina de la manada.—Sólo un poco más, Luna. Vamos puje otra vez— le dice la doctora a Sara.Quien vuelve a pujar, mientras agarra mi mano con fuerza.—¡Ah!— grita ella de dolor.Seguido de eso se escucha un llanto mi bebé, le cortan el cordón umbilical y se lo entregan a Sara.—¡Felicidades! Es una hermosa niña— dice el doctor.Sara y yo observamos con ternura y amor a nuestra hija. Luego nos quitan al bebé.—Has sido muy valiente, mi reina— dije besándole la frente.—Alpha, salga por favor— asiento.Salgo de la habitación con una sonrisa en mi cara, ¡Soy padre! ¿Quién lo diría?Jamás pensé tragarme mis propias palabras. Yo el tipo duro, juré no tener hijos y veánme ahora; casado y e
Tal como lo ordené, ellos salieron primero, los cinco hombres los observan con cautela. Me buscan a mi. Es tiempo de salir, salgo con elegancia y superioridad.Bajo la atenta mirada de todos camino acercándome un poco a ellos.ㅡSeñores ㅡdije a modo de saludo, a lo que ellos asienten con la cabeza.ㅡMeinformaron que quieren hacer tratos conmigo, ¿Es eso cierto?ㅡAsi es, Alpha. Estamos cansados de enfrentarnos con su bando, asíque decidimos hacer una tregua ㅡhabla uno de ellos.ㅡ¿Qué es lo que realmente quieren?ㅡQueremos unir las manadas, no más disputas. Si usted quiere, claro está. ㅡhabla otro de ellos.ㅡ¿Cómo haríamos eso?ㅡenarco una ceja, aunque ellos no puedan verme.ㅡCasar a uno de nuestros hijosㅡ habla otro de ellos. Se ve que sólo me lleva unos tresaños más.ㅡCreo que eso no será posible, señores ㅡSara me mataría si hago algo como eso.ㅡNo tiene que dar su r
—Son para celebrar su cumpleaños, pero después los dos podrán jugar con ellos —avanzó en su camino hasta donde estaba su esposa. Sara se levantó, sintiéndose realmente feliz por el hermoso detalle de Axel, al llevarle esos globos a Amalia. —Hola mi amor —saludó, acercándose a los labios de Axel. Ella le ofreció ese beso que él anhelaba, reviviendo la pasión y el amor que los había hecho dichosos por tantos años. —¿Y Amalia? —preguntó alejándose un poco y perdiéndose en esa mirada azul, que era más hermosa que el mismísimo color de el mar . —Se está vistiendo… no quiso mi ayuda, quiso hacerlo sola porque quiere sorprendernos, me dijo que quiere parecer una princesa para su padre —comentó y su mirada se escapaba a los labios sonrojados de Axel . Él adivinó esas ganas que en ella latían, por lo que volvió a besarla con infinita premura, mientras intentaba mantener los globos que Luke pretendía quitarle.
Estiro mis brazos, observo mi alrededor viendo la blanca habitación en la que me encuentro nuevamente.Maldición, ¿que ocurrió? Rasco mi cuello sintiendo el dolor en mi brazo,observó el rasguño que esa bestia me hizo y un escalofrío me congela en mi lugar.Paso mis dedos por el rasguño sintiendo aún más fuerte escalofrío recorrer mi cuerpo.Suspiro por el dolor que transmite al solo mover mi brazo y niego, frunzo mi ceño enojada recordando quién fue el maldito que me hizo esto.Rastreadores; solo ellos se atreven a dañar sin importarles.Me incorporo y camino hacia la puerta esperando que esta esté abierta, pero no, pateó la puerta cuando no logro abrirla.Bufó enojada por haber vuelto al mismo lugar, se enojara por lo que hice.Claro que lo hará, ¿me matará?Escape de la casa de reposo mientras hacían el procedimiento básico para mi ingreso al ministerio real, lo único que sé de él es que es a
Abro mis ojos cuando escucho sus pasos alejarse y suspiro mirando la venda de mi brazo, me levanté acercándome hacia la ventana mirando me limpio y con lo que me visten y peinan.Examino todas las posibilidades que tengo para poder escapar más rápido, pero todas fallan, él no me dejara ir por nada del mundo.Me ha esperado por más de 200 años y el haberme encontrado solo hace que su posesividad sea más fuerte por todo el tiempo en el que me ha esperado, si alguien intenta quitarme de su lado morirá .Observó mi alrededor del marco de la ventana negra y la golpeó, odio que examinen cada cosa de mi, quieren una perfección que no tengo y que nadie puede tener, y no entiendo porque necesito ser tan perfecta para alguien sin alma, maldito y tan perdido en la vida.Mi familia no era así, tenía una mejor vida aun con tener solo a mi hermano en ella.Pero él tiene una vida con su esposa y yo me quedé sola en un mundo nuevo, sin sab
Soy la destinada del Alpha, estoy maldita.Nunca podré escapar de él, todas las cosas que me decían eran por ser la pareja eterna de un Alpha.Escuchó las súplicas del rastreador mientras que el Alpha pasa sus manos por el cuello de este.— A mi no debes de suplicarme, dañaste a mi luna a ella debes de implorar tu vida y su perdón. — Parpadeo un poco regresando de mi shock.Lo inca frente a mi, pero niego yo no quiero ser cómplice de una muerte.— Lo viste.Cierro mis ojos y tapo mis oídos, siento la sangre salpicarme, pero no abro los ojos hasta que dejo de sentir el agarre del rastreador sobre mi ropa.Tapó mi boca conteniendo mis gritos por tener a un cuerpo enfrente mío, los ojos de él me miran con esa oscuridad a la que me estoy acostumbrando.— ¿Qué hiciste? — pasa aplastando el cuerpo y los jadeos del rastreador aún se escuchan. Agarra mi rostro con sus manos ensangrentadas alzándolo.