Gabriel...⸻Bueno, también tengo algo que contarles ⸻Dije con un poco de temor.⸻¿Qué pasa? ⸻Dijo Havanna un poco preocupada.Daniel y Deva se han convertido en personas muy importantes para mí. Ambos son como mis hijos, a ambos los he visto crecer. No será problema hablarlo. Supongo.⸻Bueno, mientras estaba con mi madre… digo, Loraine… ella me comentó que… ⸻Me costaba decirlo. Es que no lo podía superar aun ⸻Me comentó que no era mi madre.Todos se quedaron sorprendidos. No los culpo, era verdad.⸻¿Pero cómo? ⸻Dijo Deva sorprendida ⸻¿Cómo pasó eso?⸻De manera resumida ella dice que soy un bastardo, mi padre tuvo otro hijo con una mujer y bueno. Esta mujer es… Laura ⸻Dije con un gran desconcierto ⸻No sé si esto sea verdad. Pero para mí Loraine ya dejó de ser mi madre hace bastante tiempo.Todos estaban en shock. No sabían que decir. Hasta que Daniel dijo algo.⸻¿y como te sientes? ¿ya ha hablado con ella?⸻Pues me siento normal. Ya había tenido odio contra ella hace bastante tiempo
Havanna...Después de días, todo estaba normal, todo iba bien con todo. Sin embargo, ahora debía de hacer algo que no me esperaba. Como por obra satánica, los concejales empezaron a retirarnos su apoyo diciendo que por causa de nosotros Cassius murió. Aunque Gabriel y yo éramos fuertes, necesitábamos su apoyo ya que todos conformábamos el reino.Crystal nunca nos retiro el apoyo, eso era digno de admirar.Ahora recurriría a mi arma más poderosa: El sexo.Debo de admitir que me ha ayudado bastante y es uno de mis talentos de convencimiento. Haría esto antes de la boda ya que después de esta, Gabriel no estaría para nada feliz ni yo tampoco de estar teniendo sexo con otras personas.Así que manos a la obra, ahora me encargaré de estar con el concejal Marco.Lo observe detalladamente. Estaba como un tren: Algo más alto que yo, ancho de espaldas, unos hermoso pezones marcados bajo la ropa, cintura estrecha y vientre plano y bajo el pantalón se adivinaba que hacía honores a la fama de s
Iba para donde Isabel. No había mucho que hacer, ella redondita caería a mis pies. Llamé a su puerta y sí, ella estaba ahí.No hubo respuesta, pero la puerta se abrió y en el umbral se dibujó la silueta de una persona; me entró un pavor terrible, desperada encendí la luz y ahí estaba ella, Isabel, totalmente desnuda. Hubo uno de esos silencios que se pueden hasta respirar y ella fue la que dijo:⸻Me estoy muriendo de miedo y estoy súper caliente, déjame acostarme contigo, por favor.Me acerqué a ella muy despacio, temblando por la turbación, ella me tomó del rostro y me besó despacio, muy despacio y muy suave en la boca.⸻Perdóname, no sé lo que estoy haciendo, de estado tan loca últimamente que no sé ni lo que hago.⸻No, no te preocupes Isabel, no pasa nada, le dije con la voz más tierna que pude.Después de eso se sentó en mi cama y me dijo que había soñado conmigo, que hacíamos el amor, que nos acariciábamos y que nos tocábamos todas; yo de verdad no sabía qué hacer, pero algo en m
Tras un saludo, le dije que no era necesario que se apresurara, que yo no tenía prisas y que había venido a relajarme y no a pasarle mi estrés a ella. Amanda estaba radiante y bueno, me había dejado en un lugar para relajarme, era como un spa. Ella dijo que viene en un momento.Una mujer me atendía con felicidad. La traté muy bien y bueno, quien sabe, podría divertirme en esto.⸻Gracias, señora, ya era hora de encontrar una clienta sin aires de grandeza. Por aquí abundan las gentes que se creen que las camareras de piso somos una especie inferior y que estamos sometidas a sus caprichos.⸻Pues ya ve, no es mi caso. Tan solo quiero descansar.⸻¿Viene sola?, no crea que soy cotilla, señora, le pregunto para poner toallas y demás complementos para una o dos personas, según sea.⸻Sí, vengo sola, es la mejor manera de andar libre en cuerpo y alma, ¿no cree? ⸻Mentí un poco.⸻Pues supongo que sí. Yo nunca he estado sola más de 30 minutos seguidos, así que no puedo opinar con conocimiento de c
Con el concejal Alberto fue más fácil, simplemente tuvimos que cenar… supuestamente. Pusimos la mesa juntos y luego nos sentamos a cenar. Como siempre nos sentamos uno enfrente del otro y yo no podía dejar de mirarle.⸻¿Por qué me miras siempre así? – me preguntó repentinamente rompiendo el silencio que inundaba el comedor.⸻Siempre miro así… entonces ¿acepta? ⸻Dije sonriéndole.⸻Claro que sí, todo por usted mi reina.Entonces nos miramos profundamente y nuestros labios se unieron en un apasionado beso. No sé cómo, pero nuestras manos empezaron a recorrer nuestros cuerpos, yo traté de desabrocharle la camisa, pero Alberto me dijo:⸻Espera.Me cogió en brazos y me llevó hasta la habitación, allí me depositó sobre la cama y se recostó a mi lado. Seguimos besándonos, mientras él me desabrochaba la falda y me la quitaba con cuidado. Luego me desabrochó la blusa que llevaba dejándome en bragas y sostén a continuación empezó a besarme el cuello haciendo que todo mi cuerpo se erizara. Despac
Ahora era el turno de lila. Esta chica no se había sentado y solo estaba escribiendo. Esperaba a que termine, ya que estábamos en su despacho, rozó mis pechos con sus antebrazos, y sin yo darme cuenta, estaba mirándome los senos y los pezones se me habían puesto duros y se notaba.⸻¿Qué te ocurre que tienes los pezones tan duros? ⸻Yo me quedé muda, la verdad es que no sabía por qué se me habían puesto los pezones así, hoy supongo que fue porque me los roces. Es una de las partes de mi cuerpo más débil.Yo a lo único que atiné fue a tapármelos con ambas manos, con un poco de vergüenza, lo confieso. A todo esto tomé conciencia de que estaba sentada en su pubis, prácticamente mi sexo estaba casi incrustado en su hueso pélvico. Con voz de estar dándome una orden me dijo que el sostén me quedaba chico, y que así no podía estar trabajando bien, que me debía sentir incómoda, por lo cual me levantó la camiseta por detrás, me lo desabrochó y me lo quitó. Me llamó la atención cómo había empezad
Clara acepto, pero con una condición: Que sea su esclava sexual por un rato. Supuestamente tenía una fantasía en mente. Que me deje llevar y toda la cosa.Bueno, es la última que queda, vamos a ver en que termina esto.Cerré mis ojos y me relajé sintiéndome completamente cómoda y estando firmemente atada de manos y pies a aquella cama. Me sentía muy excitada sintiéndome totalmente abandonada y con la serenidad de no tener responsabilidad alguna durante este tiempo.En realidad, al intentar desatarme de las cuerdas pensé que era la que realmente llevaba el control desde que le pedí a Clara que me atara a la cama cuando me mostró unas cuerdas. Después de unos minutos de estar atada y pensando, abrí los ojos y le pedí que me desatara. ⸻¿Estás segura? ⸻Me preguntó Clara arqueando una ceja. ⸻Sí, estoy segura de que quiero que me desates, gracias por enseñarme cómo se siente una al estar atada.Clara me miraba fijamente y en ese momento comprendí que yo no tenía ningún control sobre la si
Era una noche oscura tranquila bajo la luz de la luna, sintiendo un calor inmenso y cercas de ahí el ruido de las olas del mar, hoy era una noche muy especial me lo presentía, envolviéndome en mis pensamientos lujuriosos aquellos ojos se me iluminaban del gran deseo con verdaderas ansias, de lo que tramaba Salvador el amigo de papá.Recorriendo por toda la terraza dándole vueltas a mi cabeza soñando despierta, gozando, esperando cada minuto, segundo de que mi fantasía se hiciera realidad entregándole todo mi cuerpo. En la orilla de la terraza se ubica un jacuzzi dándole la vista al mar, trasladándome hacia el jacuzzi entre, me senté bajo las aguas burbujeantes ya no aguantaba el calor también queriendo relajar la tensión acumulada y de olvidarme por lo que me estaba sucediendo en ese momento.Disfrutando de la tranquilidad salí dirigiéndome a un mini bar que estaba casi un lado, tome una botella de vodka y un vaso me serví y otra vez me metí al jacuzzi empecé a beber en leves tragos,