Narra Idally:
Los días han pasado volando y sin darme cuenta hemos llegado al día indicado, hoy es la fiesta, todos los vampiros están invitados, los más importantes de todo el mundo.
—¿Estas lista cariño?—cuestiono mi madre con una sonrisa mientras entraba a la habitación.
Sonreí forzadamente—Si madre, ya estoy lista—me acerque a ella y la abrace—Esto es por Jordán, por el reino.
Ella asintió—Ya lo sabes cariño, por el reino se hace posible hasta lo que tú crees imposible.
Si, esa es la frase que juras desde pequeña cuando naces para gobernar el reino.
Exacto—reí—por el reino, por ustedes, por Jordán haré lo que sea, no importa nada.
Si estuvieras aquí sería tan feliz Axel, daría lo que fuera por mirarte.
Lo se cariño—admitió—tú eres única pequeña.
¿Han llegado los invitados?—cuestione en voz baja.
Claro, aunque algunos aún faltan—aclaro—No olvides sonreír.
Reí ante su recordatorio—Jamás lo olvidaría, después de todo, acepte esto.
Mi madre salió de la habitación, termine de arreglarme después de algunos minutos, salí por la puerta y comencé a bajar escaleras.
Todos estaban reunidos en la sala, unos venían sangre, otros conversaban, me miraron mientras bajaba por las escaleras, sus miradas me hacían sentir nerviosa.
Al terminar de bajar las escaleras un aroma exquisito llego a mis fosas nasales tanto como un aroma ya conocido, mi mundo inmediatamente se detuvo.
Ese aroma le conocía muy bien... Era suyo. Era de él... Axel.
No sabía qué hacer, no sabía hacía que aroma dirigirme, ni cómo era posible que sintiese el aroma de Axel, si él ya no estaba vivo.
Camine a paso lento siguiendo el aroma que tan bien conocía, camine a través de varias personas hasta llegar al comedor, ahí estaba él.
Él se encontraba parado sosteniendo la mano de una joven, mi corazón se detuvo.
¿En verdad era Axel?
¿Quién era ella?
¿Por qué estaba con ella?
Tenía muchas preguntas en la mente, la primera tenía respuesta, él, si era Axel y las demás preguntas, no.
Me acerque a ambos con una sonrisa fingida.
—Buenas noches—hable sonriendo—Buenas—murmuro el joven con una sonrisa.
Ella no se dignó a hablar, yo quería saber si era él, entonces le pregunte—¿Cuáles son sus nombres?
Ella es Clarisa—señalo a su acompañante—yo soy Axel y ¿usted cómo se llama?
Es él, tengo frente a mí al hombre que he amado.
—Soy Idally ¿no me recuerdas?—no pude evitar preguntarle
El me miro dudoso, ella le miro desconcertada, como si supiera algo que ni el, ni yo supiéramos e inmediatamente respondió—Él no te conoce—alterada
El negó con la cabeza—No creo—murmuro confundido
Si nos conocemos—yo estaba segura que era Axel—Como pudiste olvidarme, no recuerdas lo que me dijiste.
—No sé de qué hablas—negó, la mujer se apegó a él y hablo—Lo estas confundiendo, él es mi novio, jamás ha estado por aquí.
¿Novio? ¿Qué demonios esta pasado?
No entiendo.
Él debería recordarme.
Estaba a punto de decirle que él y yo éramos pareja, que tenía un hijo pero en ese momento otro problema apareció, un joven llego, me tomo de la mano y me obligo a caminar lejos de ellos, no sin antes decir.
—Disculpen, no volverá a molestarlos—murmuro para luego sacarme de ahí.
No pude verle el rostro sino hasta cuando ya nos encontrábamos en el pateo de la casa, en ese momento su aroma llego a mis fosas nasales. Era el, él era el vampiro destinado a mí, el vampiro que me amaría por la eternidad.
—¿Cómo pudiste confundirme hermosa? creo que después de todo aun eres novata—expreso riendo
No lo confundí con nadie, yo iba por Axel, por él, está vivo, no debería perder mi tiempo aquí, debería estar ahí, haciéndole entrar en razón, intentado saber porque no me reconoce.
Él dijo que yo siempre seria su destino aun asi el volviera a la vida, que estábamos destinados desde un inicio.
le mire—No te confundí—negué con la cabeza—Le conozco a él.
El no parece conocerte—hablo riendo.
No es gracioso, no debería reírse, aquel hombre es mi esposo, el padre de mi hijo y esta con vida y con otra mujer que dice ser su novia.
Usted no sabe nada—dije enfada—no tengo tiempo para perder con usted, debo hablar con él.
Me dispuse a pasar de él, dejarle ahí para hablar con Axel, para hacerle recordar, pero el tipo tomo de mi brazo.
—No puedes irte, te encontré, eres mía—reprocho—¿Sabes por cuanto tiempo te he buscado?
¿y tú sabes por cuánto tiempo le he extrañado? ¿por cuánto tiempo anhelé que volviese, que el volviese a la vida? ¿por cuánto tiempo le he llorado?
No tengo porque estar escuchando sus palabras, el amor de mi vida esta con vida de nuevo, lo peor, parece no saber de mí, debo estar ahí, él debe recordarme, debe verlo a él, a su hijo.
No, no lo sé—grite—No me interesa, debo volver—dije histérica.
Dame una razón para dejarte ir—pidió enojado—¿Quién es él? ¿Por qué debes hablar con él?
No la hay—me solté de su agarre bruscamente—El, lo es todo para mí, es simple de comprender.
Corrí como pude hacia la casa pero al llegar, no estaba el, se habían ido, mi corazón dejo de latir, lágrimas bajaron por mis mejías y mi madre me miraba horrorizada.
—¿Qué sucedió cariño?—me pregunto dulcemente, los invitados no notaron nada.
Él estaba aquí—me forcé a hablar con el nudo en la garganta—Axel, le vi, volvió a la vida.
¿Dónde está?—mi madre se interesó inmediatamente en el tema.
Estaba con otra mujer, el parece no recordarme—murmuré, en ese momento aquel hombre apareció junto a nosotras.
y como si nada se metió en la plática que teníamos nosotras.
No sé quién haya sido él—murmuro llamando la atención de ambas—Pero no es lindo ver a mi pareja llorar por un tipo que no soy yo.
Narra Gabriel: La buscado durante años más sin embargo jamás la he encontrado, en el momento que se me invito a la fiesta, creí que talvez fuese a encontrarla ahí y asi fue. Ahí estaba ella, su aroma era exquisito, mientras intentaba buscarla su aroma se alejaba, tal vez no me había reconocido. Seguí el aroma hasta dar con ella, parecía discutir con una pareja, la tome del abrazo alejándola de ellos y me disculpe antes de sacarla al páteo de la mansión. Estaba feliz de haberla encontrado, su aroma me encantaba, me volvía loco más sin embargo ella no parecía feliz por haberme encontrado. Ella estaba desesperada por volver y hablar con aquel tipo, no quería que se
Narradora:Aquel joven entendía el hecho de que su pareja destinada hubiese tenido otra vida más, sin embargo este era el presente, ella debía amarle más que a nadie pero no era así.A veces cuesta entenderlo pero no somos quienes para mandar en el corazón de otras personas, no podemos obligarlas a quedarse sino lo desean, mucho menos forzarlas a amar sino lo quieren asi.Eso fue algo que aquel vampiro no comprendió en ese momento, él solo veía por sí mismo, por su propia felicidad, lo demás quedaba atrás siempre y cuando el fuera feliz, eso era lo que el más anhelaba en ese momento.Camino por el inmenso jardín
Narra Axel: ¿Quién ella? ¿Por quédeseo mirarla de nuevo? Desde aquella fiesta en la cual esa chica que parecía desesperada al saber que no le reconocía me hablo, no he podido sacarla de mi mente, el recordar su mirada de tristeza al preguntarme si la conocía me duele el pecho. Siento que es importante para mí, pero no la recuerdo para nada, no recuerdo grandes cosas, solo recuerdo haber luchado con algún propósito y ese era cuidar de una mujer. ¿pero quién era ella? ¿Por quéno la recuerdo? Hay recuerdos borrosos en mi mente, recuerdos nublados que no puedo admirar con claridad, en ellos solo veo a una joven llorando mientras me inte
Narra Idally: Te necesito ahora más que nunca. Vuelve, Recuérdame Nuevamente... Recostada sobre mi cama, asi me encuentro, estoy vagando por todos mis recuerdos, sé que son falsos algunos, que mi vida no es esta pero aun asi estoy viviéndola a gusto. —¿Te casaras?—cuestiono con voz dudosa mi pequeño. Volví a mirarle y negué con la cabeza—No podría, aun amo a tu padre. En ese momento mi madre se adentró a la habitación, murmurando y maldiciendo. ¿Cómo puedes ser tan irracional?—grito histérica—Tu naciste para cuidar del pueblo, el reino lo es todo, por él se hará hasta lo imposible. No puedes dejar a t
Los recuerdos vuelven forzadamente y con ello consecuencias inesperadas. Narradora: La joven pasea en su habitación debatiéndose en lo que hará, sabe que es por el bien de su reino, pero por primera vez quiere ser egoísta, quiere ser feliz. Ella ha leído libros acerca de los humanos, se ha dado cuenta de que ellos por naturaleza son egoístas y son asi porque quieren ser feliz, incluso su pequeño le ha dicho que renuncie a la idea de casarse sin amor. Está considerando no hacerlo, buscar a aquel hombre que ama y ayudarle a recordarla a ella y a su pequeño. [...] La noche cayo de prisa
Consecuencias inesperadas. Narra Jordán: Me desperté por gritos de mi madre, ahí estaba mi padre pero ella estaba aterrada, con solo mirarla pude saber lo sucedido. Él había recordado todo pero había cometido un error y ese error tenía consecuencias. Se metió a su cabeza por la fuerza y las ideas de mi madre cambiaron por completo, movió todo y desordeno sus pensamientos. La consecuencia es la eliminación de varias cosas, ella no está asustada, asustada porque lo que ve que está desapareciendo, se está esfumando como humo dentro de su mente. Él no pensó y le hizo dañ
Narradora: Nadie sabe lo que sucede realmente, pero las cosas están empeorando, Idally no recuerda muchas cosas, solo sabe que tiene un hijo al que adora y que aquel hombre que la cuida es su pareja eterna, conforme los recuerdos se van, la conexión entre Gabriel y ella comienza a existir. Jordán sabe que la situación podría empeorar pero ha asumido la responsabilidad de todo, él ha estado buscando la solución para regresarle sus recuerdos a su madre. En este momento el pequeño niño se encuentra en una inmensa biblioteca estudiando. —Deberías descansar—le recomendó Ethan—su madre no empeorara porque usted deje un rato esto. El chico le miro serio—Lo sé, pero tam
Narra la madre de Idally: El plan marcha a la perfección, nada podría ir mejor que esto. Camine por el pasillo, al llegar al final me encontré Liliana, ella sonrió al verme, le devolví el gesto. —¿Qué ha pasado con Jordán?—cuestione apenas me acerque a ella. El sigue investigando como resolver lo que le pasa a la señorita Idally—aviso seriamente—Ethan a estado a su lado, me ha costado pero le he vigilado muy bien. Sigue buscando, por mi pierde el tiempo que quieras. No ha encontrado nada ¿verdad?—pregunte interesadamente—ella negó con la cabeza—El joven no encontró nada, le mire y no había na