CAPITULO 43

La muerte de Santiago había sido uno de los sucesos más importantes en los últimos días en la vida de Amelia.

Había cambiado por completo la vida de Carolina que se sentía deprimida con todo lo que estaba sucediendo, ella estaba viviendo uno de los peores golpes de su vida al perder al gran amor de su vida.

Saber que la misma enfermedad había acabado con los dos seres más importantes de su mundo, solo hacía que se sintiera mal consigo mismo y sobre todo que pensar en lo que podía suceder en el futuro.

Amelia le prometió que la apoyaría en cada uno de sus pasos — yo te juro que voy a estar aquí para ti, que te voy a proteger como si fueras mi madre —.

La joven se sentía agradecida por todo lo que ellos habían hecho por ella durante todo este tiempo y sentía que era lo mínimo que podía hacer para poder ayudar.

Carolina la abrazó porque en ese momento se dio cuenta que no estaría sola, la soledad era el miedo más recurrente después de la muerte de su hija porque no sabía cómo