Estaba emocionada al saber que Dylan regreso por mí, pensé que solo quería jugar conmigo pero negativo, él realmente me ama, eso es suficientemente para mi. Por otro lado fue meramente una pesadilla lo que sucedió con Duncan, ahora tenía que alejarme cuanto antes o iba salía muerta de su lado ya que Duncan era un hombre miserable que nunca le importaba lastimarme sin piedad alguna, no me cabe duda que él, es de esos hombres prepotente que siempre quiere dominar y manipular a los débiles.—No pienses mucho, te harás daño— Expreso Dylan sacándome del trance en la que estuve metida hace unos minutos. —Bueno aún estoy asimilando esta realidad—respondo a lo que sonríe levemente— Por otro lado, lamento a ver desconfiado de tu palabra. Dylan negó acariciando mi mano. —Amor, olvida esa pesadilla y céntrate en nosotros, okey.—Okey.En el proceso del viaje ninguno dijo absolutamente nada, Dylan parecía ido y yo seguía torturando mi cerebro en cuanto a Duncan. Dylan rara vez se me quedaba
Dylan Había pasado más de dos semanas en la que decidí vivir con Melanie sin importarme absolutamente nada más que mi amor por ella. Me valía verga lo que pensaba Katrina respecto a eso. Dejarle dicho que quería el divorcio la enfureció como una demente, quizás no lo espero, por lo que ya era hora en que tenía que dejar las cosas más que claras. Amar a otra mujer y estar atado sin amor era torturante. —¿¡Estas con esa mujer, me estas engañando desde cuando!? —Grito furiosa, negando sigo en lo mío, ella ojea una vez más la demanda de divorcio, ríe a carcajadas mientras empieza a romper las copias, por si fuera poco grita como una loca llamando la atención de mis empleados. —Pareces esas locas salida de las clínicas psiquiátricas, no estas en tu casa para que vengas hacer el berrinche. ¡Piensa, te ves ridícula! Katrina enojada se acercó enfrente de mi, empezó a golpearme en mi pecho, ni siquiera quise moverme, deje que se desquitara, al cansarse exclamó palabras soeces, sinvergüenz
Melanie. —Hola— respondí nerviosa. —Melanie, puedo saber porque no coges mis llamadas, en fin ¿Qué tal va todo por ahí? –Pregunta Duncan, ahora yo me preguntó ¿Cómo decirle que ya no estaré más con él? Seguramente no lo sabe aún. —Duncan, necesito que hablemos – Mi voz suena con temor, miro a Dylan, él me mira sin pestañar. —¿Hablar sobre qué Melanie? Si es de tus quejas de siempre, es mejor que te lo ahorres me cansa escuchar tus comentarios sin sentidos — Mientras el habla mis lágrimas no dudan en salir, Dylan me quita el móvil, me asusta pero rápidamente me calmo al ver que activa el alta voz y me lo regresa nuevamente, por un momento pensé que él haría una locura. —Duncan quiero separarme de ti, en cuanto vengas debes firmar el divorcio —Replicó sin ninguna pisca de temor, puedo oír su respiración acelerada al otro lado de la línea. Dylan me sonríe y me dice en un susurro que siga y claro que lo haré de eso no hay duda.—La vida que me estás dando no me gusta y...—No me deja t
El olor a café hace que me levanté de golpe y corra hasta el cuarto de baño, sin más arrojó lo poco que tengo en el estómago, las manos de Dylan me ayudan a recoger mi cabello. Corro la llave de inodoro, me lavo la boca y el rostro. —¿Te sientes mal amor?— Pregunta Dylan preocupado. —No, sólo es que me moví tanto en la cama hasta marearme nada más. —¿Segura que es eso? —Si es eso ¿Que más podría ser?— Digo suspirando, sonríe y respira aliviado. —¿No te duele algo? —Bueno la cabeza me punza un poco desde ya rato, pero es algo normal no te preocupes.—Claro que me preocupo, como no hacerlo, ahora date un baño para que desayunes lo que te prepare y luego te tomas un analgésico ¿Vale?— Abro los ojos como platos él me preparo el desayuno, Wau me he ganado a un increíble hombre. ******** Al terminar el baño me seco el cuerpo y el cabello, aplico crema hidratante en mi cuerpo, luego me visto un conjunto de ropa interior color celeste, me aplico desodorante en gel y loción, buscó entr
Dylan. Manejo como un demente hacia el hospital central de Managua mientras voy procesando lo que me acaba de decir la madre de Katrina, esto es una locura, ella embarazada de mí, no y no lo creo, según ella una noche llegué y tuvimos sexo sin protección hace aproximadamente un mes, pienso y descartó ¿Será posible que sea mío? —No Maldita sea—Grito enojado golpeando el volante. Sé que el bebé no tiene la culpa, pero no podría dejar a Melanie y no la voy a dejar para nada aunque me cueste ser el enemigo de medio mundo, me haré cargo de mi hijo de eso no hay duda, pero no pienso estar atado a una mujer a la cual no amo, jamás caeré en esa red de mentira, si katrina piensa que me va manipular y chantajearme, para su desgracia se equivoco conmigo.Llegó al hospital furioso, estaciono mi auto, al bajar camino a toda prisa, busco a Karina con la mirada, ella está sentada en los bancos de la sala de espera, rápidamente sus ojos se posan en los míos se levanta y camina muy seria hacia mí.
Melanie. No sabía que palabra articular al oír la noticia, un hijo de su esposa y de él, Dios mío. Encima esa mujer se quería suicidarse en su estado, todo por hacer sentir culpable a Dylan, bueno tal vez ella no sabía que estaba embarazada ¿O sí? Ahora que pasará entre él y yo ¿Qué? —Melanie mi amor—La voz de Dylan me saca de mis pensamientos. Amor que pasa estas ida, sé que es una noticia que ninguno espero pero quiero que sepas que eso no será impedimento para estar contigo, me haré cargo como se debe por mi hijo, pero no pienso aferrarme a Katrina por el hecho que este embarazada no significa que tenga que seguir con ella. Sumergida nuevamente en mis pensamientos y procesando lo que Dylan me decía trato de respirar y no sentir culpa por una criatura indefensa que se adentró en el vientre de una mujer loca y en el que pronto conocerá el mundo, sería penoso que sus padres no estén juntos y me sentiré culpable de ser la responsable de su separación. —Melanie no se en que tanto pi
Melanie.El taxista me deja en la entrada de la colonia, retuerzo mis dedos por los nervios, no sé qué coños me pasa, el corazón me palpita como una locomotora, vaya es increíble la manera en que me pone nerviosa la actitud altanera de él, ahora su cambio me sorprende. Decido caminar rápidamente para terminar esto de una vez por todas, resoplo por varios veces y me digo a mi misma que todo saldrá bien, quedaremos en buenos términos, seguramente él va querer saber porque motivo lo he dejado, no sé si omitirle lo de mi infidelidad quizás él no se lo merecía… que estoy pensando, claro que se lo merecía, no me trataba como se debía entonces porque tendría que tener culpa, Uy que frustración, a veces soy tan tonta. —Bien Melanie ya esta, termina de una vez y fin de la historia, aun que no lo creo, es difícil de olvidar todo los golpes, maltratos emocional y físico por parte de Duncan. Suelto el aire que esta estancado en mis pulmones, al llegar a la cuadra camino con lentitud, algo en mi
Melanie.—Melanie, eres tan boba, estas loca, de donde sacas tanta imaginación, deberías de ser autora de telenovelas— Niego horrorizada de su forma de hablar— Dime, que le vas a ofrecer a un hombre si eres una simplona, en la cama no sirves para nada y además estas seca nunca podrás ser madre, él se va aburrir de ti y luego te va a botar como la basura que eres. —¡Cállate, Cállate! Tú no sabes nada él, es más hombre que tú, eres un miserable que no sabe tratar a una mujer ¡La m*****a basuras eres tú!— No logró entender de donde he sacado tantas fuerzas para gritarle sus verdades, mi corazón late con fuerzas, mi cuerpo está temblando sólo espero que recapacite, miro como está caminado de una lado para otro.Voy a marcar a Dylan... Bajo la cabeza en busca de mi móvil que esta dentro de mí cartera, no percato a Duncan el cual esta frente a mí. —¡Eres una perra mal nacidaaa!—. Grita enojado, antes de que pueda levantarme siento como me golpea en el rostro con fuerzas. —Duncan, basta m