—Mandy McNeal… Al fin te descubrí… —Lutxi sonrió llena de furia—. Creíste que nadie te descubriría, que todo te salió perfecto, creíste que eras intocable y nadie podría superarte… Eras muy cautelosa al cuidarte de mi padre… pero nunca pensaste que debías cuidarte de mí. —¿De qué se supone que hablas, niñita? —La miró con ira, pero algo de miedo escondido en lo profundo de su mirada. —Hackee tu computadora, tu celular y tus redes sociales, principalmente. Y sé que has estado experimentando con el espionaje, la violación y la intervención en redes sociales desde hace más de siete años. —Mandy la miró boquiabierta—. ¿Qué? ¿Creíste que eras la única que sabía hackear? Te protegiste de las computadoras de mi padre, pero no de las mías. ¿Por eso estabas tan confiada? —Yo… Yo… —tartamudeó, pareciendo acorralada. —Ja. —Lutxi extendió una mano hacia Miranda, que le dio su bajo con pesar—. Ahora será mejor que confieses que tú te metiste en la conversación de mis padres cuando mi mamá desa
Después de una hora de vuelo, finalmente Zack y Moira llegaron a ciudad Lion y bajaron del avión con Zoe dormida en brazos de su madre.—¿Me dejas cargarla? —Zack le extendió los brazos mientras esperaban a que llegara el chófer de Gael para llevarlos rápidamente al laboratorio donde sospechaban que Lutxi estaba.—Zack, ya la cargaste todo el viaje, yo también quiero unos minutos con ella. —Lo miró resignada, aunque en el fondo le daba algo de ternura sus ansias de estar cerca de Zoe todo el tiempo. —Solo mientras estemos en el auto, luego tú la llevas todo lo que quieras. Es un trato bastante justo en mi opinión… y tú ya la tuviste cuatro años —insistió.Moira rodó los ojos, pero accedió a darle a la pequeña cuando el auto llegó.Llegaron al laboratorio y lo encontraron vacío ya que era bastante tarde, solo estaba un científico que les indicó que había adolescentes en la oficina personal de Zack, y al entrar allí encontraron a Teddy, Miranda, Henry y Chary.—¡Tíos, al fin llegan! —T
Amina era una anfitriona muy amable, no dudó en ofrecer todo tipo de bocadillos a Moira mientras esta le contaba parte de lo que había pasado para regresar a ciudad Lion, confiando en que su intuición le decía que sus niñas estaban bien.Tenía ciertos destellos de memoria de Amina, recordaba haberla visto un par de veces en sus memorias antes de estar embarazada de su primera hija.Luego de que acabara de hacerle un resumen, ella les sirvió té y la miró con sorpresa.—¿Pero entonces apenas has recordado tan poco de tu vida? ¡Eso es terrible! ¿Y no te han mostrado fotos y esas cosas? ¡Oh! —De repente se le ocurrió algo—. Puedo mostrarte videos y fotografías, ¡siempre tenía a mi cámara conmigo en todos los eventos importantes! Y… ¡ah, yo grabé su boda! ¡Tengo una copia del video! ¿Quieres verlo?Los ojos de Moira se iluminaron con curiosidad y anhelo.Una parte de ella quería negarse, pero… no pudo resistir la tentación.—Quiero…—¡Excelente! —Amina corrió a buscar su computadora, regre
Entraron a la casa y él empezó a cocinar algo rápido mientras ella ponía la mesa.Para cuando tuvieron todo listo y se sentaron a comer, ninguno sabía bien qué decir.Finalmente, Zack decidió que todo este silencio y tensión eran absurdos y decidió ir al grano, directo y sincero:—Moira… quiero volver a intentarlo —le dijo decidido, aunque no por eso menos temeroso. Ella abrió mucho los ojos y se quedó en silencio. —Lo estuve pensando mucho… y creo que finalmente entiendo todo. O la mayoría, al menos. —Rio sin ganas—. Definitivamente esto es lo más absurdo e inconveniente que nos ha pasado, pero estás aquí… estás viva, y sigues siendo la misma mujer con la que me casé, la misma a la que siempre amé. —Tomó aire. —Después de pensar que estabas muerta o que eras alguien horrible, en vez de enfadarme por toda la situación debería estar agradecido, y lo estoy, de poder estar aquí contigo… y estaría mucho más agradecido si me das la oportunidad de recuperar todo el tiempo que perdimos. —
Brandon no se sorprendió ni en lo más mínimo de que la llamada de Zack para llevar a sus hijas a su casa nunca le llegará.Y por la mueca de asco y resignación de Lutxi mientras Lilliana le explicaba a Zoe que podrían ir con sus padres mañana, sabía que ella tampoco estaba sorprendida. Ya imaginaban perfectamente porque Zack no los había llamado. Y, la verdad, en el fondo los alegraba muchísimo.¡Esperaban que esta noche fuera suficiente para que esos dos finalmente se reconciliaran y retomaran su amor!Zoe nunca había pasado una noche lejos de su madre, pero estaba contenta de recibir toda la atención de sus abuelos y tíos, y hasta su hermana mayor quería jugar con ella, cosa que la ponía muy feliz.No hubo lágrimas por no poder ir con su madre, solo se puso un poquito triste cuando Ray tuvo que irse.—Lo siento, pero yo vivo en otro lugar. —El adolescente se inclinó para revolverle el cabello—. Te veré luego, me alegra que te haya gustado mi comida.—Fue delichocha. —Siguió haciendo
Moira estaba indecisa respecto a qué hacer. Recordaba todas las cosas que la separaron de Zack y todas las cosas que la unieron a él, pero apenas y sí recordaba poco más que eso. A comparación de todos los años que pasaron juntos, unos pocos momentos clave parecían insuficientes para hacerla sentir que lo conocía del todo, a pesar de que sí sentía amor y confianza hacia él, no podía ignorar el hecho de que apenas recordaba pocos eventos a lo largo de unos cuantos años en los que estuvieron juntos, cuando llevaban mucho más tiempo conociéndose.Así que, como era tan poco su conocimiento sobre su esposo, Moira no estaba segura de sí era su amor lo que la quería hacer creer en él, o si de verdad era sensato creer en él.Los recuerdos de antes del accidente eran borrosos y difusos, pero los recuerdos de hace solo pocas semanas atrás eran muy claros y aún muy dolorosos. Recuerdos de todos los gritos, insultos y lágrimas eran mucho más vividos que los recuerdos de él pidiéndole perdón, pi
Después de presenciar el cursi espectáculo de sus padres abrazándose y besuqueándose en el pasillo como si ellos fueran los adolescentes en la casa, Lutxi decidió dejar su manía de espiar y se escabulló silenciosamente lejos de ellos, subiéndose al techo y mirando la noche estrellada.Esa escena le había confirmado lo que ya sabía: que era una locura que esos dos se divorciaran o estuvieran separados. No sabía ni lo primero ni lo último respecto a cuestiones amorosas, pero había cosas obvias en el universo, como que si mezclas azul y rojo obtienes morado, y que mezclando ácido fluorosulfónico y pentafluoruro de antimonio de la forma correcta podías obtener el llamado "ácido mágico", y que Zack y Moira debían quedarse juntos. Eran cosas obvias para cualquiera… menos lo de los ácidos, quizás.No quería presionar a su madre de ningún modo… ¡pero iba a caer!Rio maliciosamente, pensando en todos los trucos que podría usar para lograr lo que quería. Aunque no le gustaba ser considerada un
Los teleféricos se elevaron en el aire, llevándolos al otro lado del parque, y Zack decidió hacer un movimiento, confiando en la noche maravillosa que pasaron ayer y las sonrisas de complicidad que compartieron en la mañana.—¿Recuerdas la primera vez que estuvimos juntos en este parque de atracciones? —le preguntó sin mirarla, ambos mirando el paisaje a través de la ventanilla, pero ella volteó a verlo de inmediato ante esa pregunta, confundida.—No…—La primera vez que me besaste, fue en una de estas cosas. —Sonrió divertido ante el recuerdo, dejándola con la mandíbula desencajada.—¡¿De verdad?! —Él asintió—. Vaya… no puedo recordarlo… —Su gesto entristeció.—Quizás esto te ayude a recordar. —Se acercó a ella.—¿A qué te refie…? —Calló cuando él la besó de pronto, haciéndola abrir muchísimo sus ojos azules.Pareció a punto de apartarlo, pero él acarició su cuello, frotando su pulgar en esa zona sensible bajo su oído, que hizo a sus piernas debilitarse y casi caer encima de él, rind