Su húmeda frente quemaba como si alguien estuviera haciendo una fogata ahí, se sentía arder en demasía y lo único que quería hacer era prenderse fuego la cabeza. Sentía sus ojos picar en extremo y lagrimear a cada instante en que intentaba abrirlos para poder observar a su alrededor. Su miembro se encontraba dolido y latente, su trasero continuaba húmedo, maldito celo.Se retorció en la cama y pudo ver algo borroso a un chico rubio colocando un paño mojado con agua fría sobre su frente mientras se acomodaba en una silla. Se mordió el labio inferior con tanta intensidad que comenzó a sentir el gusto metálico de la sangre en su cavidad bucal. Ya no aguantaba.Todo era culpa de Connor. Se había negado a calmar su celo acostándose con él, ya no creía poder aguantar más sin el olor que el Alfa desprendía, lo necesitaba más que nunca.Connor había tenido un momento de debilidad el primer día del celo de Ethan, Connor casi se deja llevar por los impulsos del Omega y casi cede ante la tentaci
Se estiró mientras tanteaba con su mano el costado de la cama sintiendo un vacío en ella y las sábanas algo arrugadas como si alguien acabara de estar ahí, acostado a su lado.Abrió los ojos lentamente mientras bostezaba. Connor no se encontraba a su lado, frunció el ceño y su Omega lloriqueó un poco. De repente, la puerta del baño se abrió y vio salir al castaño de ahí con una toalla envuelta en su cintura y el torso algo mojado.El Omega de Ethan se retorció un poco en su interior al tener aquella vista ante él.—Ya te encuentras lloriqueando, pequeño insolente.El castaño sonrió de lado mientras se dirigía al ropero para poder buscar ropa para vestirse y poder empezar su día.—Es que no te vi, Alfa.Hizo un puchero mientras lo observaba desde la cama con algo de tristeza exagerada en su angelical rostro.—Debo ir a encargarme de cosas del consejo, Ethan.Se colocó una camiseta negra algo apretada que lograba ceñirse perfectamente a su torso.—¿Vas a dejarme solo?—No puedo estar to
Silencio.El peor castigo de todos.Bueno, Ethan acababa de aprenderlo. Desde que Connor y Harold los habían visto a Isaac y a él entrando en aquel calabozo oculto, nada muy interesante había pasado.[...]Flashback.—Isaac no tuvo nada que ver en esto.En cuanto estuvieron fuera del calabozo, Connor se limitó a observarlo de brazos cruzados y con la mirada seria y algo inexpresiva.—Si vas a enojarte con alguien, que sea conmigo, yo lo arrastré hasta aquí.El castaño suspiró y comenzó a caminar hacia la mansión dejando a todos los presentes algo sorprendidos y boquiabiertos.—Iré a hablar con él.El rizado dejó al moreno y al ojiazul solos y siguió los pasos de su amigo con algo de preocupación.Ethan y Isaac se miraron, uno entendiendo menos que el otro. Era extraño.Fin del flashback.[...]Era consciente de que Connor lo había estado evitando, desde que se habían visto luego de aquel incidente en el calabozo oculto, no lo había visto en ningún lado, salvo una vez al entrar en la c
—Buenos días, Alfa.El moreno sonrió mientras observaba al chico a su lado y se apoyó en su pecho ya que éste se encontraba boca arriba.—¿Despierto desde tan temprano?—Bueno, no podía seguir durmiendo así que solo desperté un poco antes y aproveché un poco la mañana.—¿La mañana? ¿Qué hora es?Connor giró un poco la cabeza para buscar con sus ojos el reloj que se encontraba en la mesita de noche. Alzó una ceja y se reincorporó para poder verlo vertical y entender qué decía. Sus ojos casi se salen de sus cuencas de tanto abrirlos, era demasiado tarde.—Son las once.Se paró rápidamente listo para comenzar a cambiarse pero una mano lo detuvo al agarrar con delicadeza su muñeca, aquel toque se sentía demasiado suave y real.—Pero es domingo y Harold me dijo que te dijera que te tomaras el día, Connor.—Dios, mi padre va a matarme.—Según Harold tu padre está en uno de los territorios vecinos estableciendo un acuerdo con una de las razas, la verdad es que no le entendí del todo bien per
Las cosas estaban en cierta forma algo extrañas. No entendía muy bien pero desde que había despertado cierto olor inundaba la habitación y no lograba percibir de qué se trataba. Se sentó en la cama mientras miraba a su alrededor y soltaba un bostezo.—¿Connor? Hay un olor extraño en la habitación.Se giró y se encontró con el castaño a su lado apretando los ojos con fuerza y estrangulando las sábanas con sus manos y empleando mucha fuerza en ello.—Ethan, ve a buscar a Harold.El moreno con preocupación se levantó de la cama y corrió fuera de la habitación para poder dirigirse al pasillo extenso que tenía la mansión. No sabía dónde se encontraba el rizado, pero sabía que debía buscarlo y que necesitaba encontrarlo, Connor se veía mal, muy mal.Comenzó a sentir su corazón palpitar con demasiada fuerza en su pecho y le dolía, no mucho, pero era un dolor bastante molesto.Miró hacia todos lados buscando una puerta o un número clave a dónde ir para encontrar al amigo de su Alfa, pero esta
El día estaba algo gris, no solo por las nubes tapando el cielo, también por el hecho de que en la mansión las cosas se sentían tensas, como si algo se encontrara ocurriendo y todos estuvieran al tanto a excepción de Ethan.Desde aquel día del celo de Connor, por alguna razón, las cosas entre él y el castaño se encontraban extrañas. Connor estaba algo serio y alejado de él, como si Ethan hubiera hecho algo malo y eso lo hubiera alejado. Estaba preocupado, el castaño no solía comportarse de aquella forma con él. Connor solía ser más atento y cariñoso, pero esta vez ya no, Connor casi no pasaba tiempo con él, solo lo veía por la noche cuando iba a la habitación para poder dormir, por las mañanas el castaño no se encontraba en la habitación, siempre estaba solo y con la cama vacía.Había pasado una semana pero se sentía como un mes, más si se trataba de Connor siendo indiferente con él.—Hola.—Hola, Ethan, ¿sucede algo?El moreno entró en la habitación que compartía su mejor amigo con e
Un día.Solo eso quedaba, un día. Un día más y Connor debería enfrentarse a la persona que su padre hubiera elegido. Había estado entrenando intensamente y había estado dando su mayor esfuerzo. Debía ganar, además de que lo quería, debía hacerlo.Ethan continuaba anonadado desde el día anterior. Connor le había dicho que lo amaba, no se lo esperaba para nada, realmente no, no le creía, o bueno, quería hacerlo pero no estaba del todo seguro.La vida era injusta, el amor lo era también. El amor así como florece, se marchita y desaparece con el pasar del tiempo. El moreno lo había aprendido por las malas. Quizá Connor ahora lo amaba, quizá estaba hasta ilusionado o confundido. Pero no estaba del todo seguro de si realmente podía llegar a sentir algo por él, claro que no, se trataba de Ethan, ¿realmente alguien podría amarlo? Era un egoísta y caprichoso, nada más que eso, solo pensaba en sí mismo y no le interesaba nada más en lo absoluto, no hacía más que pensar en su propia persona, nad
Era el día, aunque el moreno debía aceptar que de encontraba algo exhausto, la noche anterior había estado con Connor, teniendo sexo sin parar, supuestamente el castaño se encontraba estresado y Ethan estaba dispuesto a ayudarlo a quitarse ese estrés, era más que obvio.—Tranquilo, Alfa, verás que todo saldrá bien, no deberías de preocuparte, sé que eres muy fuerte.—Lo sé, pequeño ángel, no es eso lo que me preocupa.Se acercó al más pequeño y posó un beso en su frente mientras se dirigía al baño y C.M miraba a E.C fijamente para después oírlo temblar un poco, algo extraño sucedía y Ethan no estaba al tanto de ello, ahora sí estaba más que molesto.—¿Sucede algo? Parece ser que soy el único que no sabe al respecto.—No sucede nada, Ethan, si no te tranquilizas voy a obligarte a estar aquí y no podrás ir a ver el enfrentamiento.—Bien.Se sentó en la cama y se cruzó de brazos con molestia. Detestaba no saber lo que sucedía a su alrededor, se sentía como un idiota.—Ven, E.C, a ver si