Fane se quedó sin palabras. No había nada que pudiera hacer en ese momento; solo podía encerrarse, tratando de no pensar en eso primero, y esperar tener la oportunidad de explicárselo a Selena pronto.

Después de lavarse, los dos se montaron en el caballo dragón de sangre y se dirigieron hacia la residencia principal de la familia Woods.

No obstante, Fane ya no sintió la sensación de incomodidad cuando esta vez sostuvo la cintura de Daniella por detrás en el caballo. Quizás, era por lo que había sucedido la noche anterior lo que hizo que Fane se sintiera tranquilo.

Por el contrario, él sintió que Daniella estaba rígida e incómoda frente a él. Ella estaba sonrojada, y su rubor se extendió hasta la raíz de sus orejas.

Muy pronto, los dos llegaron al pie de la montaña y ambos saltaron del caballo.

"¡Joven Amo Fane!".

Los dos guardaespaldas de la puerta se sorprendieron ante el regreso temprano de Fane. Se suponía que Fane visitaría a muchas familias filiales de los Woods por sí mismo