NARRADOR:
Se dice que el que persevera alcanza, así fue como Agustín se fue abriendo camino en el mundo del fútbol uruguayo, al recibir un NO en uno de los mejores clubs de la ciudad de Maldonado, no se dio por vencido y lo apuntaron en el club del Barrio Artigas junior, un club en el que estaba desde los 9 años, fue mejorando con arduas horas de entrenamiento, los primeros años en este equipo fue una transición difícil puesto que en el club daban prioridad a la diversión y no a la competencia, Agustín estaba hecho para más, comenzó a sentir frustración por no ganar, sus padres lo apoyaban y trataba de hacerle entender que esto es así incluso para ganar también hay que saber perder. Sin embargo su padre Daniel, al querer ayudarlo pensó en buscar más profesores que lo ayuden a mejorar, entre sus amigos lo recomendaron con un profesor muy bueno llamado Federico S. dueño de una escuela de fútbol llamada Maldonado City Academia, aquí dictaba sus clases, estaba ubicada al otro lado de la ciudad, 20 minutos en auto, pero esto era el menor de los sacrificios que haría por su hijo, lo lleva 3 días a la semana para mejorar su rendimiento. Agustín, un apasionado del fútbol, encontraba que sus actividades de entrenamiento llenaban por completo su agenda diaria. Desde temprano en la mañana, cuando el sol apenas comenzaba a asomar, Agustín ya estaba en el campo, listo para calentar y comenzar su rutina de ejercicios. El entrenamiento incluía una variedad de actividades: ejercicios de resistencia, prácticas de habilidades técnicas, sesiones de estrategia con el equipo y partidos de práctica. Cada sesión estaba diseñada para mejorar su rendimiento, fortalecer su cuerpo y agudizar su mente. Además, Agustín dedicaba tiempo a estudiar jugadas, analizar partidos anteriores y trabajar en su nutrición, asegurándose de mantener una dieta equilibrada que apoyara su rendimiento deportivo. A pesar de lo apretado de su agenda, Agustín encontraba en el fútbol una fuente de alegría y motivación. Cada esfuerzo, cada gota de sudor y cada minuto dedicado al entrenamiento se transformaban en pasos hacia la realización de sus sueños como futbolista. Para él, llenar su día con actividades de fútbol no era una carga, sino una pasión que lo impulsaba a ser mejor cada día. A la edad de 16 años, su meta a corto plazo era ser aceptado en el Deportivo Maldonado, un club que no solo valoraba las habilidades futbolísticas, sino también el rendimiento académico. Sabía que para alcanzar su sueño de jugar en su club favorito, Nacional, en Montevideo, debía destacar en ambos aspectos. Cada día representaba un paso importante hacia la realización de su sueño. Mantenerse enfocado, estudiar con dedicación y entrenar con pasión eran las claves para lograrlo. Con cada esfuerzo, sentía que se acercaba un poco más a ese momento tan anhelado en el que vestiría la camiseta de su equipo favorito y demostraría su talento en el campo. En diciembre de ese año, Agustín enfrentaría su primer gran reto: su club formativo, Artigas Jr, participaría en la Copa OFI de Clubes del Interior. Agustín, a pesar de su corta edad, había sido invitado a jugar con el equipo principal, siendo el único de su generación en tener esta oportunidad. Este era el momento en el que debía demostrar de qué estaba hecho. Los directivos del Club Deportivo Maldonado también estaban atentos a este torneo, buscando nuevos talentos para incorporar a su equipo. Para Agustín, este torneo no solo representaba la posibilidad de ganar un título, sino también una oportunidad para ser reconocido y posiblemente convocado por un club de mayor prestigio. Su plan era claro: aprovechar cada minuto en el campo para mostrar su habilidad, su pasión y su capacidad para jugar al más alto nivel. El inicio de este año marcaba nuevos retos y metas, y más ahora que había encontrado su nueva musa de inspiración: una pequeña niña de ojos negros. Todo a su debido tiempo; paso a paso cumpliría sus metas, de eso estaba seguro. El 28 de enero cumplió 16 años y, después de tanto dudarlo, por fin hoy le enviaría la solicitud de amistad de F******k a Nicole. Ese era su propio regalo de cumpleaños. Apenas despertó, antes de ir a entrenar como de costumbre, lo hizo. Su corazón latía con fuerza mientras presionaba el botón de "Enviar solicitud". ¿La aceptaría? ¿Respondería? No podía dejar de pensar en todas las posibilidades mientras se preparaba para el entrenamiento. Nicole siempre había sido una chica especial para él, desde en momento en que la vio. Esta solicitud de amistad, para él, significaba un gran paso. Mientras corría en la pista y levantaba pesas en el gimnasio, no podía evitar mirar su teléfono de reojo, esperando una notificación. El día pasó lentamente, cada hora sentía que duraba una eternidad. Pero cuando finalmente llegó la notificación de que Nicole había aceptado su solicitud, una gran sonrisa iluminó su rostro. Había dado el primer paso, y ahora, quizás, solo quizás, podrían llegar a ser más que desconocidos. El día mejoró de inmediato cuando una hermosa foto de ella le llegó a través de Messenger. En la imagen, ella sostenía un hermoso letrero que decía "¡Feliz cumpleaños, Agus!". La sonrisa en su rostro y el cariño evidente en el gesto hicieron que Agus sintiera una calidez indescriptible en el pecho. Era como si, con esa simple foto, ella hubiera logrado iluminar su día y hacerlo sentir especial y querido. Así respondió ese mensaje y agradeció el detalle. La conversación fluyó hasta que él le preguntó si aún seguía siendo su color favorito el azul. Ella sonrió al leer esa pregunta; era algo que no había pensado en mucho tiempo. "Sí," respondió, "el azul siempre ha tenido un lugar especial en mi corazón. Me recuerda al cielo despejado,al mar tranquilo, pero en especial me recuerda a tus lindos ojos.” Agustín no podía creer la facilidad con la que hablaba con ella. Se sentía como si ya se conocieran de toda la vida, como si hubiera una conexión invisible que los unía más allá de las palabras. Cada conversación fluía de manera natural, sin esfuerzo, como un río que sigue su curso sin obstáculos. Lo que más le gustaba a Agustín era saber que ella no lo olvidaba. Esa sensación de ser recordado le daba una calidez indescriptible, como un refugio en medio de la tormenta. Cada vez que hablaban, él sentía que el mundo se detenía por un momento, permitiéndoles disfrutar de esa conexión especial. No importaba cuánto tiempo pasara entre una conversación y otra, siempre retomaban exactamente donde lo habían dejado, como si el tiempo no existiera para ellos. Agustín valoraba cada instante compartido, cada risa y cada confidencia, sabiendo que este era el inicio de su historia juntos.En otro país, Nicole recibió una solicitud de amistad de Agustín . Había esperado 27 días para buscarla. Ella, por su parte, ya había visto su perfil desde la cuenta de su madre, pero decidió esperar pacientemente. Nicole sabía que si él buscaba la manera de contactarla después de conocerse a través de una videollamada, sería porque sentía lo mismo que ella. Sin pensarlo, ese día llegó. Era 28 de enero. Ella sabía que era su cumpleaños; ya lo había escuchado de su madre.Así que, con antelación, ella preparó un hermoso letrero de "Feliz Cumpleaños". Se tomó una foto vestida de manera casual, con un vestido de mezclilla corto y de mangas largas. Llevaba el cabello suelto, dejando de lado su flequillo. Y, por supuesto, no podía faltar su hermosa sonrisa. Cuando una adolescente recibe una solicitud de amistad, especialmente de alguien que le interesa o admira, una cascada de emociones se desata en su interior. Inicialmente, puede experimentar una mezcla de sorpres
En el colegio, Nicole tenía una mejor amiga llamada Victoria. Desde el primer día de clases, ambas se dieron cuenta de que compartían muchos intereses en común, como la lectura, el dibujo y los deportes. Nicole y Victoria siempre se apoyaban mutuamente, tanto en los buenos como en los malos momentos. Cuando alguna de las dos se sentía triste o abrumada por las tareas escolares, la otra siempre estaba ahí para ofrecer una palabra de aliento o una mano amiga. Ella le contaba todas sus conversaciones con Agustín. Victoria, siempre atenta a los sentimientos de Nicole, sonríe y le dice: —Es increíble cómo algunas personas pueden entendernos tan bien, incluso a través de una pantalla. La amistad y el amor no conoce límites, ni de tiempo ni de espacio.— Nicole asiente con entusiasmo, recordando todas las veces que Agustín ha estado para ella, ya sea con palabras de aliento o simplemente escuchándola cuando más lo necesitaba. —¿Sabes, Vicky? Siento que Agustín
Pasaron los días, se hicieron semanas y estas meses. El crecimiento de Agustín en el fútbol fue rindiendo frutos, al ser convocado para participar en la Copa OFI de clubes del interior. La noticia llegó como un rayo de esperanza en su vida. Agustín había trabajado incansablemente, entrenando día y noche, perfeccionando cada aspecto de su juego. Desde muy pequeño, había soñado con este momento, y ahora, finalmente, estaba a punto de hacerse realidad. La comunidad local estaba emocionada. Todos conocían a Agustín y todo el talento que tenía. Su familia, por supuesto, estaba llena de orgullo. Ver a Agustín con la camiseta del equipo, listo para representarlo era un sueño hecho realidad también para ellos, era el jugador más joven convocado. Cada entrenamiento, cada partido jugado en terrenos polvorientos, cada sacrificio hecho, valió la pena. La Copa OFI no solo representaba una oportunidad para Agustín, sino también para todos aquellos que lo habían apoyado en su cami
Durante dos años, compartieron sus sueños, sus miedos y sobre todo, muchas risas a través de la pantalla de su celular, en ocasiones de su computador. Nicole, que vivía en Ecuador, siempre había soñado con conocer a su amigo uruguayo en persona. Cuando se acercaba su cumpleaños número 15, pensó que no habría mejor regalo que ese encuentro tan anhelado. Así que, armada de valor, le pidió a sus padres que le permitieran viajar a Uruguay como su regalo de cumpleaños. Andrea, la madre de Nicole, no tardó en recordar aa Liliana, una amiga virtual, quien vivía en Uruguay. Ella que era la madre de Agustín. Fue entonces cuando la idea de Nicole cobró sentido: ambas familias estarían encantadas de que las madres y los hijos se conocieran en persona. Los preparativos del viaje fueron emocionantes. Nicole y Andrea hicieron las maletas con entusiasmo, sabiendo que este viaje sería especial. Andrea contactó a su gran amiga comentándole de su viaje, ambas felices de que por fin se conocerí
Los días pasaron volando y, antes de que se dieran cuenta, ya había pasado un mes, uno lleno de alegrías, momentos inolvidables tanto para Andrea como para Nicole.Al día siguiente, Nicole y su madre regresarían a su país, lo que llenaba de tristeza a Agustín. No quería que se fueran sin pasar un último día especial junto a Nicky, así que decidió pedirle permiso a Andrea para llevarla a pasear. Andrea, comprensiva y queriendo que su hija tuviera un bonito recuerdo antes de partir, aceptó de buena gana. Agustín planeó una salida memorable, llena de risas y momentos que ambos atesorarían para siempre. Con gran alegría, la llevó a dar un paseo en su motoneta, eligiendo como destino el Puente de la Barra, un lugar especial para el ya que su padre en momentos de desánimo al ser niño lo llevaba en su auto y lo cruzaba a toda velocidad al ser un puente compuesto por diversas ondas simulando las olas del mar, la adrenalina que lo hacía sentir, vivir en cada vibración ondulante en ese mo
NICOLE: El viaje a Uruguay fue una de las experiencias más memorables de mis cortos 15 años; mi primer beso y ahora ser novia de Agustín se siente como un sueño hecho realidad. Han transcurrido casi 11 meses, sin duda los mejores de mi vida, y nuestra relación a distancia ha progresado de manera positiva. Cada día me esfuerzo más en mis estudios con el objetivo de obtener una beca en la universidad CLAEH de Punta del Este en Uruguay, una institución de gran prestigio y alto costo. Sin embargo, ofrecen excelentes planes de becas, especialmente para estudiantes extranjeros como yo. Este deseo ha sido un secreto que comparto con mi madre y Liliana, la madre de Agustín. Esta universidad es la misma a la que Ashley asiste, ella ha puesto mucha dedicación en sus estudios, está a punto de convertirse en médico. Su experiencia me ha inspirado, y al escucharla hablar sobre el proceso de admisión, me llenó de ilusión; no solo porque me permitirá formarme como una excelente doctora, s
Por otro lado, Agustín aún no estaba al tanto de los logros de Nicole. Liliana se convirtió en cómplice de Nicole al ayudarla con toda la documentación requerida por la universidad. Liliana y Daniel estaban llenos de entusiasmo mientras esperaban en el aeropuerto Carrasco. Habían llegado temprano, queriendo asegurarse de que todo estuviera perfecto para recibir a Nicole, la hija de su amiga virtual de Ecuador y novia de su hijo Agustín. Los dos se miraban de vez en cuando, compartiendo sonrisas nerviosas preguntándose sobre cómo sería tener a Nicole viviendo con ellos. Para Andrea, apoyar a su hija en esta decisión no fue fácil, pero confiaba en los designios de Dios y en que su amiga Liliana cuidaría de ella como una verdadera madre. Estaba profundamente agradecida con Liliana, ya que le inspiraba una gran confianza, especialmente porque había sido recibida en su hogar años atrás. El vuelo de Nicole aterrizó puntualmente y, después de lo que les pareció una eternidad,
NICOLE: Es asombroso reflexionar sobre lo rápido que transcurre el tiempo; ya llevo casi dos años viviendo en este país. Esta experiencia ha sido extraordinaria. No puedo negar que extraño a mis padres, pero también reconozco el esfuerzo que realiza la familia de Agustín para hacer mi vida más placentera. Liliana ha asumido un papel maternal y Daniel, uno paternal; no puedo dejar de mencionar a Wendy junto a su familia, quienes son un verdadero encanto, así como sus dos pequeños hijos. Ashley ha sido una mentora invaluable para mí. A pesar de estar en su primer año de residencia en la especialidad y de su apretada agenda, ha encontrado tiempo para guiarme en esta travesía de convertirme en doctora. Estoy profundamente enamorada de la universidad, que realmente ofrece programas de excelencia. Desde el inicio, hemos tenido la oportunidad de realizar rotaciones en hospitales, lo cual es una experiencia enriquecedora. Una ventaja significativa es que me han permitido avanzar