Pero calabacita, ¿por qué lloras? Este es un momento feliz, de risas y alegrías, no es un día para llorar y más con lo preciosa que estás, podrían hacer un anuncio contigo ahora mismo relacionado con historias de caballería y esas cosas que tanto te gusta a ti
-Es que siento que esto era un momento para compartir con mi madre también, siempre me lo imaginé así y más luego de que logramos hacer las paces aquella vez después de su operación, pero ahora todo está descompuesto nuevamente, andamos ella y yo de cabezas y eso me pone muy triste
-Calabacita, yo he hablado mucho con Idun después de que tu padre apareció y ella está realmente arrepentida, eso fue una decisión que tomó hace muchos años siendo más joven, ¿Qué fue una decisión errónea? Sí, es cierto, pero ya la había tomado, no podía hacer nada más, solo tirar para adelante
- Eso no es así Eyra, ella tuvo tiempo suficiente para arrepentirse y contarme la verdad, me tuvo engañada toda mi vida y yo puedo entender
Todo este tema de la boda me tenía mis emociones en contradicción, me sentía histérica de felicidad, pero a la vez alterada por la cantidad de cosas que se debían hacer en tan poco tiempo. Apolo todavía necesitaba tener su traje, pero él había decidido que un sastre se lo confeccionara en la casa, no sabemos de qué manera la prensa se enteró de los acontecimientos y a donde quiera que saliera Apolo le caían detrás, era algo insoportable. Esta misma mañana casi su mal genio lo supera y le propina un golpetazo a uno de ellos que lo estaba hostigando demasiado todo debido a que Apolo le pidió que lo dejara en paz y esto molestó al periodista quien comenzó a decirle los mayores improperios que jamás había escuchado. No entiendo por qué a estas personas les cuesta tanto trabajo comprender que, aunque se trate de una persona públicamente reconocida, n
Tenía una contradicción de ideas en mi cabeza quería ir e interrumpir la hermosa velada que estaban teniendo, que Apolo me mirara a los ojos y se diera cuenta de que yo no era una tonta cualquiera a la que podía engañar a su gusto, sin contar que ya esta era la segunda vez que me hacía algo como esto porque ahora no le podía creer el cuento que se inventó sobre su encuentro pasado con Araya en la oficina; cuánto deseos de acabar con todo esto, pero a la vez quería recomponerme y volver al recibidor del hotel para saber qué me iba a contar él esta vez, hasta dónde iba a llevar sus mentiras. Tengo que tranquilizarme, creo que la última opción será la más beneficiosa para mí, si Apolo no es el hombre que yo he pensado que era todo este tiempo sufriré y mucho, pero podré quitarle su máscara, es preferible darme cuenta del hombre que tengo a mi lado ahora y no después de casados o después de que hayamos formado una familia, el daño que podré sufrir ahora es reparable por lo menos.
Nunca pensé que dormir al lado de Apolo me iba a costar tanto trabajo, ¿cómo algo que antes me resultaba tan agradable, ahora es tan difícil? Me siento tan mal, solo tengo deseos de dormir para no sentir nada, para no tener que lidiar con todo esto, cuando duermo es el único momento en el que me siento en paz. Mi vida estaba tan organizada, después de tantos malos momentos que pasé desde la infancia, pensé que ahora, finalmente, la vida me estaba premiando con algo bueno, me estaba dando una segunda oportunidad, pero resulta que no es más que otro golpe y no creo que pueda recuperarme tan sencillo de este ¿Me estará castigando por ser tan dura con mi madre? Al final, siento que estoy terminando de la misma forma que ella, aunque el camino sea diferente, ahora estoy sola, sin el futuro esposo que creía iba a tener. ¿Cuántas pesadillas más me esperarán? Tengo que llamar a Eyra, tengo que hablar con ella, no puedo quedarme con esto por dentro, de lo contrario voy a explotar, además, el
Llevo aproximadamente quince minutos para a la entrada de la casa de Apolo mirando a la puerta fijamente. No sé de qué forma entrar y hablar con él, convivir con él como de costumbre, es que tenerlo cerca ahora me produce repulsión y un asco increíble, todavía no me creo todo lo que ha pasado en menos de un solo día. De pronto la puerta se abre y sale Apolo-Cielo ¿qué haces aquí, no me dijiste que cuando terminaras ibas a llamarte para irte a buscar?Lo miré bien, detallando cada parte de él que antes me gustaba tanto con la esperanza de encontrar algún indicio de algo que me permitiera hacer toda esta situación más amena. En lo primero que me fijé fue en sus ojos, fue lo que más me llamó la atención, ese color avellano, pero ahora todo lo que me traen es desconfianza, cambian de color según el clima, es algo que descubrí al tiempo de comenzar con él, cambiantes, igual que su personalidad. Su físico sigue siendo parecido al de un dios griego, solo que ahora pienso que n
Decido irme, no puedo estar más nerviosa. Sin darme cuenta choco con una mesita que estaba en el balcón y el búcaro que tenía encima se cae al suelo-¿Qué fue eso? –escucho preguntar a Apolo mientras cruzo de un balcón hacia el otro a toda velocidad, si me encuentra todo se echa a perder y el sacrificio que he hecho aquí es por gusto, casi se me cae el móvil de las manos, pero logro agarrarlo en el último momento y justo antes de que Apolo saliera a su balcón entré al mío y me escondí detrás de las cortinas con el corazón latiendo a su mayor velocidad, hasta las manos me estaban temblando, nunca antes había sentido esto, ni cuando Arya me perseguía intentando asesinarme, por lo menos sabía qué esperar de ella, sabía que iba con todas a por mí y no se escondía, no pretendía ser quien no eraVolví a escuchar la voz de Apolo y desde que me enteré de su infidelidad sus palabras lograron calmarme por primera vez-Parece que fue algún animal que tumbó el búcaro este, seg
No puede ser que cuando mejor estoy con Freya, estas mujeres vienen a amargarme la existencia, no lo puedo creer. Estoy seleccionando el menú para la boda con Freya y a mi móvil ya me han entrado cuatro mensajes de texto entre Araya y Valquiria, ya por mucho que quiera concentrarme no puedo hacerlo, me es imposible, solo estoy pensando en que ellas sabían en el lugar en que iba a estar a esta hora y quieren verme*Estamos en el mismo restaurante que tú, antes de irte sube hasta la azotea, vamos a estar esperando por ti, A.*Apolo, no respondiste el mensaje de Araya, supongo que sea porque estás bastante atareado seleccionando tu buffet, aquí vamos a estar, no faltes. ValquiriaNo sé cuál de las dos me disgustaba más en estos momentos, la tarea más difícil, era hacer esto y tener que mirar a Freya a la cara, es tan inocente, no se merece nada de esto, ya ha pasado por demasiados tragos amargos en su vida, pero ya tengo un plan en marcha y no puedo detenerlo, no si q
Me está mirando fijamente y juraría que puedo ver un brillo particular en sus ojos, sé que me lo quiere contar todo, lo sé, solo que está teniendo una lucha interna en su cabeza, no sabe si hacerlo o no. Por favor Apolo, sácame de esta incertidumbre, acaba de decirme que todo tiene una explicación que no me estás siendo infiel, por favor. No puedo dejar de suplicarle internamente, pero sé que como mismo yo puedo saber lo que está pensando con fijarme en su mirada, él puede hacer lo mismo y sabe que prácticamente se lo estoy rogando-Amor, me he dado cuenta que en estos últimos días has estado muy raro, en un inicio pensé que era por todo esto de la boda, pero ahora viendo como estás me doy cuenta que no es por eso, algo más está sucediendo, cuéntame por favor, déjame ser partícipe de todo –no sé de qué otra forma pedírselo, le acabo de suplicar en voz alta, es extraño, pero siento que esta vez no está interpretando su papel, puedo sentir que en realidad está muy dolido, algo l
Si un productor de cine llegaba a este local en estos momentos, podía tomar esta historia y convertirla en una telenovela de seguro. No podía dejar de mirar la cara de Apolo, no podía creer que estuviera ahí, ni que lo hubiera descubierto, ni siquiera que le esté hablando de esta forma, nunca antes me había visto así de alterada, para los ojos de alguien que no conociera la historia, yo fácilmente podía ser la mala en todo esto, pero no es así, soy la víctima, solo que en vez de estar llorando por los rincones y lamentándome de todo lo que estaba sucediendo, decidí tomar las riendas por mi cuento. Si Apolo me trata de esa manera, no se merece que yo le tenga compasión.Ayer, incluso después de haberlo atrapado en esa habitación de hotel, de haber escuchado las cosas tan crueles que tenía para decir sobre mí, de haber presenciado y visto besándose con estas dos, le di la oportunidad de que se arrepintiera, de que me dijera la verdad, por qué estaba haciendo todo eso, aunque fue