Las nubes oscuras llegaban con rapidez por toda la ciudad dejando caer sus fuerte llovizna a la gente, eran como ver los sentimientos negativos de la gente y los expulsaba. Sonia aun se mantenía dormida y Alessia acompañaba, Fiodor había ido a comprarle algo de comida, aun seguía teniendo el mismo vestido… No se quería ir de su lado por nada del mundo, sentía que si llegaba a irse ella ya no estaría. Fiodor tampoco se había ido a la mansión para cambiarse de ropa, no quería dejar sola en este momento a su prometida. El entro por la puerta sosteniendo en una de sus manos un café de infierno y unas galletas, se sienta al lado de su prometida y se lo extiende, ella agarra y prueba la bebida caliente que le había pedido.

— Deberíamos ir a la mansión a cambiarnos… — Alessia no decía nada, dejaba que el el café le quitara el sueño que tenia. Estaba realmente cansada. — Nos damos una ducha,  nos cambiamos y podemos regresar, Alessia. Sera rápido…

— ¿S