Lauren tranquilizó a Alejandra y le aconsejó que solo le diera un tiempo a Sebastián, ella se marchó de la oficina y cada una siguió en sus roles. Al llegar la hora de salida del trabajo se fueron a sus respectivas casas.— Por cierto cariño — Sebastián puso su saco en la cama — te recuerdo que el fin de semana se va a trabajar en la mansión del señor Iqbal, él está queriendo que todo esté bien rápido y es por nuestro mejor interés que eso salga rápido para así ocuparnos en otros proyectos que están en pausa.— No te preocupes que sacaré el trabajo a tiempo, por cierto quiero hablar de Alejandra — Sebastián volteó los ojos — no me hagas esa mueca, la pobre Ale se encuentra muy arrepentida de lo que pasó y no quiero que seas un exagerado con lo que pasó.— Pero Lauren te puso en peligro a ti y a…— Suficiente — ella levantó la mano y lo interrumpió — ya le aplicaste la ley del hielo por el resto del día, entiendo que lo que pasó pudo haber terminado en un desastre completo pero por sue
Sebastián se arrodilló y Lauren a su pasó le dió una vuelta mientras aún sostenía su mano, luego su esposo se levantó y la diferencia de altura fue notoria ya que ella no podía estar a su altura a pesar que usaba unos tacones bastante altos que no quería él que usará.— Hijo — el señor Rivera se acercó a la pareja — momento de intercambio, ve a bailar con tu madre en lo que yo bailo con mi nuera.Sebastián le dió la mano de Lauren a su papá y él se fue con su padre; ellos bailaron al compás de la música y el señor Rivera se veía contento.— No tienes idea la felicidad que me da verte plena al lado de mi hijo, sabía que ambos se necesitaban el uno con el otro y finalmente puedo decir que moriré en paz al ver que él está al lado de la mujer que siempre quise en su vida.— Señor Rivera, usted sabe muy bien que nuestro matrimonio no comenzó de la mejor de las formas, incluso de vez en cuando me vienen los pensamientos de divorcio ya que ese era el trato.— ¿Sabes una cosa? Dije que estuvi
Mileydis miraba con una satisfacción enferma a Lauren al ver que estaba sufriendo, ella sabía muy bien que a pesar que lo negaba en el fondo sabía que era cierto.— No estoy mintiendo, ¿Acaso ese realmente es tu estilo de prendas? Porque querida si es así déjame decirte que no te creo, eres una mujer demasiado simple como para esa preciosura de diamante que cargas.— Solamente me quieres desestabilizar — ella se recompuso como toda una dama — no te creo en absoluto lo que dices.— Muy bien, entonces pregúntale a Sebastián y míralo a los ojos así como yo te estoy viendo en estos momentos, estoy segura que en algo lo llegaste a conocer durante los meses que llevan de feliz matrimonio y serás capaz de saber si dice la verdad o una vulgar mentira.Lauren no soportó más seguir en la clínica, ella salió de la habitación mientras las lágrimas ponían borrosa su vista y escuchaba la carcajada tétrica de Mileydis. — Señora De Rivera — la enfermera la miró asustada — espere un momento, ¿Se encu
Jake apartó a Sebastián del gimnasio y se lo llevó a la cocina para curarlo, en el momento que él estaba sacando unos hielos miró como el último mencionado se fue al bar y comenzó a beber cuanta cosa tuviera ahí, tomaba el alcohol como si fuera agua.— Si piensas que en el fondo de la botella vas a encontrar la solución a tus problemas déjame decirte que estás muy equivocado, eso solo va a empeorar las cosas.— Esto no tiene solución, metí las patas hasta el fondo y no creo que Lauren me perdone.— Ella aún te ama, eso no es algo que se olvida de la noche a la mañana — Jake puso su mano en la espalda de Sebastián — verás que todo se va a resolver, ahora dime qué benditos fue lo que hiciste para estar tan abatido y Lauren llorando de tal forma.Sebastián le contó a Jake sobre el anillo de compromiso y todos los detalles, el hombre se puso pálido al escuchar la nueva metida de pata de su amigo y le dió un zape en la cabeza.— Definitivamente eres un idiota, el anillo de compromiso signi
Lauren colocó el sobre de su renuncia en el escritorio del señor Rivera y todos la miraban sorprendidos, Sebastián por su parte se miraba que no había dormido nada en absoluto y al ver a su esposa pudo darse cuenta que a ella poco le importaba ese detalle.— No puedo estar trabajando en un sitio donde se encuentra mi esposo o mejor dicho el hombre que fue capaz de darme un anillo de compromiso de su ex novia y nunca tuvo el valor de decirlo, yo pensando que simplemente no me conocía y por eso había escogido una prenda tan grande, que en absoluto era mi estilo; jamás imaginé que lo tenía destinado para alguien más.En el momento que el señor Rivera escuchó esto llevó su mano a su rostro, él se sentó en la silla del presidente y respiró profundamente.— Es por eso que me quiero ir, esto que Sebastián me hizo quizás para muchos es una exageración pero no lo es en mi caso, es algo que va más allá del anillo que reutilizo — ella lloró y Sebastián la miró con dolor — tal vez las cosas hubie
A pesar que Sol pensó que no iba a obtener respuesta por parte de Sebastián se equivocó por completo, el hombre respiró profundamente para hablar con la mayor claridad posible.— Le gusta con leche, nada de azúcar y debes llevar todo por separado porque si lo llevas revuelto le va a hacer daño por un motivo que desconozco por completo. También ve a comprar mentas, tienen que ser del paquete negro y no de sabor porque esas son las que le ayudan a descongestionarse en la mañana además que le ayudan con las náuseas, también lleva algo de agua mineral para que tomé porque generalmente le da sed después de su café.— Muy bien, se lo agradezco joven amo Rivera. Trate de no tomar mucho y me disculpo si estoy siendo muy entrometida.— No te preocupes por mí, trata de cuidar a Lauren que es lo que más me importa. Te agradezco de igual forma y deja las informalidades conmigo, dime Sebastián.Él colgó y Sol fue a traer todo lo que Sebastián le había ordenado, se alivió cuando miró que Lauren beb
Sebastián intentó recuperarse lo más pronto posible, cuando Jake llegó al penthouse se alegró al ver que él no estaba bebiendo sino bañándose e incluso arreglándose como lo hacía antes.— ¿Y ese milagro? Pensé que ya habías empezado a desayunar algo de ron o vodka, pero me he equivocado al parecer.— Lauren tiene control con el ginecólogo, tengo que estar listo para las dos de la tarde y ya van a ser las once de la mañana. Sinceramente no lo recordaba pero tanto mi celular como Alejandra me lo dijeron casi al mismo tiempo.— Si Lauren no te pidió que la acompañaras creo que lo mejor es que dejes de prepararte para eso, no vas a mejorar las cosas si estás presionando.— No, no pienses que estoy yendo solo porque el celular me lo recordó — sus ojos brillaron — Alejandra me pidió que Lauren me dijera eso, al parecer tienes razón después de todo y las cosas no están del todo perdidas.— Es bueno saber eso, bueno arréglate lo mejor que puedas en lo que yo voy a la farmacia para comprarte u
— No puedes tirarte a la calle del medio y simplemente morir porque te mandó al infierno en esta ocasión, mira que de una u otra forma te dijo que iba a ir a control prenatal el día de hoy, eso es un avance.— Lo hizo porque quiere que forme parte de la vida de los niños y no porque me quiera en su vida, esa fue una de las tantas cosas que me dijo minutos atrás — él bebió de la botella — la perdí para siempre, fui tan idiota que no pude decirle nada del anillo porque lo olvide, ¿Qué clase de esposo soy?— Un esposo preocupado por ella y por sus hijos, no somos perfectos Sebastián y cometemos errores pero lo que importa es que nos damos cuenta y los queremos enmendar porque sabemos bien que metimos la pata hasta el fondo.— Pero hay cosas que no se pueden enmendar por mucho que nos arrepintamos, Lauren es frágil como un vaso de cristal, arroja un objeto así y pide disculpas para ver si se puede arreglar.— Pero podemos tomar esos pedazos y pegarlos uno a uno, el vaso va a regresar a es