Hace tantos años que no veo a mi madre que mi mente borro su rostro de mis recuerdos, hace tantos años no la veo que mi boca olvido como pronunciar su nombre. Aun así, todavía soy capaz de recordar su apellido, gracias a que ella me lo heredo a mí.

Mis memorias de antes de aquel incidente son casi nulas y actualmente prefiero no recordarlas sinceramente. Nunca conocí a mi padre, eso es algo que mi madre se llevó a la tumba y a veces hasta me cuestiono si en verdad alguna vez tuve uno.

Mi madre tenía un puesto administrativo de alto rango en la mega empresa conocida como “Royal Company” y por esa razón ambos podíamos vivir cómodamente.

Como cualquier persona normal en esta ciudad mi madre me inscribió a los 5 años en la Iniciativa Estrella Fugaz para que los científicos pudieran determinar si mi cuerpo era apto para poseer una habilidad de las estrellas. Para eso tuvo que quedarme cinco días en la Fundación Starlight, todavía puedo recordar cuando mi madre vino a recogerme al quinto día, no lograba entender con certeza lo que me hicieron allí dentro, pero es algo por lo que todos los niños a esa edad pasan.

Dos semanas después de eso mi madre y yo todavía nos encontrábamos esperando los resultados de la fundación sobre la iniciativa.

Jamás podré olvidar esa noche, es algo que se quedó grabado en mi cabeza para nunca más salir, como un parasito que me atormentara hasta mis últimos días. Recuerdo que mi mamá se encontraba en la cocina preparando la cena, no me dijo que era exactamente, solo que era algo que a mí me encantaría. Mientras ella hacia eso yo estaba en nuestra sala mirando televisión tranquilamente cuando de repente comencé a toser.

Era solo tos así que no le di mucha importancia, pero mientras más avanzaba el programa que veía también lo hacia la tos. Cada vez comenzaba a toser más seguido y con más fuerza como si mi cuerpo estuviera intentando sacar algo de mi organismo.  La situación escalo hasta tal punto que mi madre dejo todo para venir a ver cómo me encontraba.

-No te preocupes Oscar, estarás bien- Me dijo mientras tocaba mi pelo.

Para mi desagracia no pude verla pronunciar esas palabras, apenas podía mantener mis ojos abiertos mirando al suelo. Pero en un segundo la tos paro, quise aprovechar ese momento para levantar mi vista y ver a mi madre, pero también estaba muy asustado y no lograba entender que me sucedía.

Justo antes de llegar a poder ver su sonrisa por última vez mi cabeza se vio encadenada al suelo. Comencé a vomitar y vomitar sin parar, pero lo que más me aterrorizo fue que no era vomito normal, era un extraño liquido pegajoso y completamente negro como el alquitrán.

Era tanto el líquido que salía de mi cuerpo que podía ver como todo el piso comenzaba a inundarse. Desesperadamente intente buscar la mano de mi madre, pero parece que ella ya no se encontraba a mi lado.

Lo siguiente que recuerdo fue abrir los ojos en un lugar desconocido. Me encontraba amarrado a la cama y un montón de agujas atravesaban mis brazos y cabeza. Me era muy difícil simplemente moverme y forcejeaba para intentar salir en vano, hasta que alguien me detuvo.

-Sí que eres especial Oscar- Me dijo un doctor, este tenía varios tatuajes por su cara –Me atrevo a decir que eres el chico más peculiar en toda esta ciudad- Dijo mientras se levantaba de su asiento.

-Mi mamá ¿Dónde está mi mamá?- Pregunte entre lágrimas.

Ese doctor se acercó a secarlas –No tienes que preocuparte. Pero desde hoy tú estarás conmigo. Soy el Dr. Nokushizuke, pero simplemente llámame profesor-

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Cuando llegue a la escena del incidente esta se encontraba hecha un desastre. Miembros de la Fundación S.P y Starlight ya se encontraban en el lugar. Habían colocado carteles de precaución biológica en toda la zona y evacuaron a todo civil en un rango de varias cuadras.

-Informe de la situación- Le dije al encargado.

-Buenas noches señor. Claro- Él comenzó a fijarse en el informe en su tablet –Al parecer una habilidad estrella nunca antes vista se manifestó en un niño y al instante esta se salió de control-

-¿Ya llamaron al escuadrón de contención de materiales anómalos?- Pregunte.

-Se encuentran en camino, pero no sé hasta qué punto podrán mantener esto,

-¿A qué te refieres?

-Vera utilizamos distintos escáneres y analizadores para poder identificar la sustancia que el paciente expulsaba de su cuerpo. Pero ninguno de estos dispositivos lograba identificarla, era como si esta materia no existiera-

Me sorprendí al escuchar eso, nunca en toda mi carrera había pasado algo así -¿No lograron identificar aunque sea algún componente?

-No señor, es como si esta materia no existiera en todo el universo.

El escuadrón de contención de materiales anómalos por fin llego a la escena. Ni siquiera podían verse su rostro cuando bajaron del helicóptero, la totalidad de sus cuerpos se encontraban bajo trajes especiales, parecidos a los de un astronauta.

Utilizando unos dispositivos parecidos a aspiradoras ellos comenzaron a limpiar todo ese extraño y peculiar liquido negro que se encontraba por toda la casa.

Vi como unos guardias de Royal Company transportaban una camilla con un cuerpo dentro de un saco de la morgue -¿Quién se encuentra ahí?- Le pregunte al encargado de seguridad de la compañía.

-Los registros indican que es una de nuestras mejores empleadas y la madre del niño-

-Que desgracia- Dije melancólicamente -¿Y quién se quedara con la custodia del niño? Me gustaría que se vuelva mi paciente.

-Al parecer el niño no tiene ninguna otra familia o tutor. La fundación S.P lo está reclamando ya que ellos llegaron primero y contuvieron la escena. Pero a su vez la Fundación Starlight lo pide para poder investigar a profundidad esta nueva habilidad nunca antes vista-

-¿Crees que nosotros los de Royal Company podamos reclamar la custodia?-

-Lo veo muy complicado Dr.

-Este asunto escalara hasta la alta mesa directica- Susurre.

-¿Qué dijo Dr.?

Eso me tomo por sorpresa –Dije que esta será una larga noche.

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3 días después.

Me encontraba leyendo el informe de uno de mis pacientes cuando una enfermera me interrumpió –Dr. Nokushizuke se solicita su presencia inmediatamente- Exigió la chica con una respiración cortada.

 Tranquilamente pregunte -¿Qué sucedió?

-El paciente del incidente volvió a despertar.

Sin perder un segundo me levanté del asiento y me dirigí a la sala de observación donde se encontraba. El solo había despertado una vez hace tres días por unos minutos antes de volverse a dormir.

Abrí la puerta del golpe y lo encontré sentado en la cama del hospital tomando una gaseosa. Me tranquilice y me dirigí a su lado para hablar con él -¿Cómo estas pequeño?- Pregunte mientras me sentaba.

-Usted es el Dr. de ayer Kimi no sé qué.

- Nokushizuke- Dije con una carcajada- Pero te dije que podías llamarme simplemente profesor.

Él se encontraba más calmado de lo que me esperaba para un niño de 5 años que paso por algo como eso -¿Dónde me encuentro?

-En este momento te encuentras en el laboratorio principal de Royal Company-

-¿Y dónde se encuentra mi mami?

Ya no sabía cómo responderle a esa pregunta sin que se sintiera mal. Para mi suerte un par de enfermeras me salvaron el pellejo entrando a la habitación y cambiando el tema.

Le pidieron al chico que necesitaban que las acompañe para hacerle unas pruebas de salud, luego de eso lo bañaron, lo alimentaron y le dieron una bata de laboratorio limpia antes de traerlo devuelta.

El consejo administrativo me encargo el cuidado del niño. Debía educarlo y enseñarle a usar su habilidad estrella. Pero eso sería algo más difícil de lo que me esperaba ya que nunca antes se había visto un poder como el suyo.

Toda esa extraña materia que expulso de su cuerpo aquel día se encontraba siendo investigada en diferentes laboratorios dirigidos por la compañía. No se pudo identificar ninguno de los componentes que la constituyen, pero en el proceso logramos descubrirle varios usos interesantes, aunque no podíamos explicarlos del todo.

-La fundación Starlight nombro a la habilidad como “Stranger Matter”- Me informo un becario.

De mi boca salió un sonido de disgusto –Esos imbéciles no saben ni poner un nombre y querían hacerse cargo del niño.

Mientras tanto Royal Company designo a la materia desconocida como LX2028, porque creían que esta podía llegar a tener aproximadamente dos mil veintiocho usos diferentes y eso solo debido a nuestro desarrollo tecnológico, si la tecnología mejoraba lo más seguro es que se le agregaran más usos.

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2 meses después.

Mi escritorio era un desastre, no había tenido tiempo de ordenarlo en la última semana y solo acumulaba papel tras papel uno arriba del otro <Me pregunto si llegare a terminar a tiempo> Tenia que preparar la clase de biología que le daría mañana a Oscar y todavía no lograba empezar, esta tenía que tratar sobre el caldo primigenio y la teoría celular.

Comencé a buscar los apuntes que había hecho sobre el mismo tema para enseñarle a otro alumno, pero no lograba encontrarlo entre tantos papeles.

Mientras rogaba poder encontrar mis papeles escuche el sonido de mi computadora, era el sonido que hacia al recibir un correo electrónico. El mensaje lo había mandado el consejo administrativo y eso me llamo la atención, la reunión mensual se realizaba dentro de dos semanas, no debía haber comunicación antes de eso.

Abrí el correo y lo leí detenidamente, en este se me informaba que los distintos laboratorios de la compañía estaban comenzando a quedarse sin muestras de la materia LX2028 y necesitaban que yo inmediatamente consiguiera más. Al terminar de leerlo solté un suspiro y me arrojé para atrás con mi silla.

Ya pasaron dos meses desde que comencé a darle clases particulares al paciente Oscar y recién íbamos por biología de tercer año de secundaria. Como su habilidad es una materia desconocida y proviene de su cuerpo le enseñaba de forma avanzada temas sobre biología, química y matemática para ver si por voluntad propia lograba generar más materia, pero todavía no había obtenido ningún resultado y ya me pedían que consiguiera más. Estoy preocupado, no sé cómo cumplir con eso a tiempo y para empeorar la situación seguía preguntando sobre donde estaba su madre y yo seguía sin poder responder, tenía que pensar en una forma de decirle, de contarle a un niño de 5 años que por su culpa su madre murió.

En mi desesperación una luz me ilumino, pero no era la luz que uno esperaría, las alarmas comenzaron a sonar y las luces de emergencia se activaron lo que significaba que un intruso se encontraba infiltrado en las instalaciones.

Un guardia vino corriendo hasta la puerta de mi oficina –Señor vamos.

Rápidamente tomé un arma de un compartimento secreto de mi escritorio y fui junto al guardia de seguridad a la habitación de Oscar. Doblamos en el siguiente pasillo a la izquierda y justo antes de llegar a la puerta esta exploto empujándome contra la pared, del interior del humo de la explosión salieron cuatro chicas.

Al ver salir a la primera inmediatamente le dispare un dardo cargado con un tranquilizante pero a mitad de camino el dardo simplemente se detuvo en el aire y cayó al piso, yo me sorprendí ante eso -¿Una habilidad estrella?

El guardia de seguridad lanzo varios disparos consecutivos sin efecto alguno, todas las balas se detenían a mitad de camino. Parecía que una barrera invisible las paraba.

Luego salió la segunda chica de pelo naranja y un tatuaje de un sol en la mejilla, sus dos manos tenían la figura de una pistola y sus dedos índices tenían chispas de fuego. Acompañándola salió otra con ojos grises, pelo blanco y muy largas uñas; lo que más me molesto fue que entre sus brazos cargaba a -¡Oscar!- Le grite al pequeño chico rubio entre sus brazos.

Pensé que no pasaría nada, pero este se dio vuelta al oírme –Profesor Kimi no sé qué- Dijo el niño de 5 años al verme, por la forma de su hablar y la roja hinchazón de sus ojos supuse que estaba drogado.

La chica de pelo naranja apunto la figura de pistola en su mano al suelo y de esta salió un fuerte rayo de fuego como si se tratara de un láser. Haciendo esto creo un círculo en el suelo a la par que la cuarta chica salía.

-Dispara o haz algo- Le ordene al guardia.

Este continúo disparando inútilmente a la pared invisible creada por la primera chica. La cuarta chica comenzó a hacer flotar el círculo cortado del piso con ella y sus compañeras arriba, la chica de pelo naranja hizo explotar el techo con una bola de fuego creando una salida a la superficie.

La chica de pelo gris tomo la pequeña mano de Oscar y lo obligo a hacer una señal de despedida mientras me miraba –Dile bye bye al doctor chiquito-

-Bye bye doctor- Repitió el pequeño Oscar.

-Se están escapando doctor ¿Qué hacemos?- Grito desesperado el guardia –Se lo están llevando en frente nuestro.

La presión del ambiente me dificultaba pensar en algo, pero un buen doctor siempre mantiene la calma sin importar las circunstancias. Me levanté del suelo y fui dirección al ascensor más cercano mientras el guardia me seguía por detrás.

-Nos encontramos 38 niveles bajo tierra así que tenemos tiempo hasta que lleguen a la superficie- Informe llamando al ascensor bala –Una de las chicas tiene el poder del elemento fuego así que dile a los de seguridad que activen el sistema anti incendios- El guardia ordeno por su radio lo que acababa de decirle, el elevador llego y ambos entramos en él, mientras este subía yo continúe –Haz que preparen un escuadrón y que los esperen en el subnivel 28 y activa los canalizadores-

-Señor me informan que el sistema anti HE fue hackeado, tomara 30 minutos reiniciarlo-

-¡Pues no pierdan más tiempo!

Mientras subíamos por el elevador podían sentirse varios temblores en las instalaciones, cada uno más fuerte que el anterior -¿Qué fue eso?- Hizo la tonta pregunta el guardia.

-Seguramente son ellas atravesando las capas de seguridad.

El ascensor se detuvo en el subnivel 28, me salí de él y fui corriendo hacia un panel ubicado en la pared, ingrese el código de seguridad para que este se abriera; de su interior saque dos armas y le entregue una al guardia a mi lado –Fusiona un canalizador y una pistola. Son experimentales así que ten cuidado- Le dije al guardia para que borrara esa estúpida cara de confusión –Llama a otro escuadrón aquí de inmediato-

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-Apresúrate Hor- Me ordeno la líder.

-Lo siento mucho, pero esta barrera de metal es muy densa, a mi fuego le cuesta derretirlo- Excuse aumentando la potencia del fuego que salía de mi dedo índice.

Por fin logre derretirla por completo para que Sir pudiera hacer levitar el circulo hasta el siguiente nivel.

-¿Todavía puedes mantener la ilusión sobre ese pequeño?- Pregunto la líder a su compañera.

-No te preocupes, mientras él siga respirando las partículas que expulso de mis uñas seguirá sin entender nada-

Mientras subíamos escuche los pasos de botas de goma –Líder- Dije para informarle.

-Lo sé- Respondió ella levantando otra barrera de aire –Ya sabes que hacer.

Los de seguridad no podrían lastimarnos dentro de la barrera y por un segundo la líder haría desaparecer esas defensas para que yo incinere a todos. Mientras Sir nos elevaba al siguiente nivel el sonido de las balas comenzó a sonar.

Justo un segundo antes de que la líder bajara la barrera el sistema de regadores se activó apagando las flamas de mis dedos –Maldición- Se quejó la líder -¿Puedes crear suficientes partículas para llenar todo el lugar?

-Eso creo, pero necesito un poco de tiempo.

-Ellos no penetraran esta barrera, tomate el tiempo que necesites.

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Camine por los pasillos en dirección hacia el origen del sonido de las balas. Al llegar me encontré a todo el escuadrón disparando sin sentido a la barrera invisible que protegía a las chicas –Estúpidos- Susurré.

Observando más detenidamente me percaté de que Oscar ya no se encontraba drogado y en su lugar la chica que lo sostenía parecía concentrada en otra cosa. Claramente, aunque la barrera esa desapareciera los guardias no les dispararían a ellas ya que Oscar se encontraba cerca, pero una buena idea se me ocurrió para contrarrestar eso.

-Ordénales a todos que se retiren.

-Pero señor, el paciente- Refuto el guardia que me seguía.

-Solo hazlo maldita sea- Exigí.

Todos los de seguridad bajaron sus armas al escuchar la orden. Las caras de las chicas mostraban un poco de sorpresa y mientras todos se alejaban del lugar yo me les acerque y les apunte con mi pistola.

Al ver mi arma las cuatro comenzaron a reírse, yo las ignore y dispare. Como consecuencia sentí a la barrera quebrarse al chocar con las ondas del canalizador, la cara de ingenuidad de las cuatro me alegro el día -¡Oscar!- llame la atención del niño –Ellas mataron a tu madre y ahora van por ti.

Los regadores se desactivaron y aprovechando el momento la chica con el tatuaje de sol creo una explosión tan fuerte que de seguro derribo el techo de varios niveles y rápidamente comenzaron a subir nuevamente.

-Señor están escapando ¿Qué hacemos?- Pregunto el guardia desesperado.

-Esperar- Conteste, antes de que siguieran subiendo vi como los ojos del pequeño Oscar se pusieron completamente negros –Esperar- Volví a repetir.

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-¿Te encuentras bien líder?- Pregunto al verme como todo su cuerpo temblaba como gelatina.

-No, no, no- Repetía ella –No entiendo como logro destruir mi barrera-

-No te preocupes- Intento calmarla Sir –Nos sacare de aquí en poco tiempo, el trabajo ya casi está hecho y el jefe nos pagara bien.

-Los estúpidos nos tuvieron contra las cuerdas por un segundo, pero son tan tontos que soltaron la soga- Comencé a reírme ante la metáfora que se me acababa de ocurrir.

-Ehm…chicas. Algo le pasa al niño.

Las tres nos giramos a verlo y sus ojos se encontraban completamente negros. De repente un extraño líquido negro comenzó a salir de sus manos y boca. Tor, quien lo estaba sosteniendo, lo dejo caer al piso del miedo.

Aun confundida la líder se agacho para levantarlo –Ten más cuidado estúpida- Al tenerlo entre sus manos el chico le metió la mano dentro de la boca y de un segundo a otro el cuerpo de la líder comenzó a llenarse de ese extraño liquido negro, su cuerpo se llenó tanto que el líquido comenzó a correrse por sus fosas nasales, sus oídos y hasta sus ojos mientras esta solo intentaba gritar inútilmente por desesperación con una cara de terror absoluto.

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Al día siguiente.

-No sé cómo lo logro doctor, pero es un genio sin duda.

Después del incidente estuve recibiendo varios elogios parecidos.

-Se podría decir que se matar tres pájaros de un tiro. Solo tienes que crear tu propia oportunidad- Respondí.

-Pensé que el dicho era dos pájaros de un tiro.

-Pues para mi fueron tres- Conteste más serio.

Ingrese el código de seguridad de la puerta y ambos entramos a la habitación -¿Te estas acomodando bien en tu nuevo cuarto Oscar?

-Me gustaba más el anterior profesor- Contesto él.

-No te preocupes, cuando terminen las reparaciones podrás volver. Ahora saca tus apuntes que la clase de Biología esta por empezar.