Capítulo 0558
—Entonces, ¿me puedes llevar un trecho?

Los ojos de Diego ardían con intensidad y concentración, lo que hizo que Irene no pudiera evitar desviar la mirada.

—¿A dónde vas?

—A donde sea. —Diego, emocionado, se sintió un poco avergonzado al hablar—. Naturalmente, a... tu departamento.

—¿De verdad estás viviendo allí? —Irene le preguntó.

—¿Por qué no?

—¿Pero allí las condiciones... no son muy buenas?

Aunque Diego había mandado a traer algunas cosas, sabía que, habiendo crecido en la comodidad, sería bastante incómodo.

—No hay nada malo, si tú puedes vivir allí, yo también. De hecho, saber que estás al lado me gusta bastante. —Diego sacudió la cabeza.

—Eso es bueno. —Irene se levantó.

—Claro, no quiero vivir al lado para siempre... —Diego se dio cuenta de que sus palabras podían malinterpretarse y se apresuró a aclarar.

Irene no dijo nada y fue la primera en salir. Diego la siguió obedientemente, robándole miradas a su espalda recta y su cuello largo...

Hacía mucho que no la abrazaba. Y ni
Sigue leyendo en Buenovela
Escanea el código para descargar la APP

Capítulos relacionados

Último capítulo

Escanea el código para leer en la APP