Aunque se lo había prometido, todavía se quedó en su sitio sin moverse. Aparentemente, estaba muy reticente. Después de un buen rato, finalmente se convenció y se acercó.—¿Cómo va? —preguntó.—Ya casi termino. No tengas tanta prisa. No solo tienes que pensar en la mía, sino también en la tuya —respondió Noa.—¿La mía? —dijo Alex sin entender.—Claro. Tienes que colaborar conmigo, ¿no? Después de mi publicación, también tendrás que publicar la tuya —dijo Noa apoyando el mentón con la mano, como si estuviera sumida en profundos pensamientos.Sin embargo, viendo lo seria que estaba Noa, Alex no se sentía bien… No solo tenía que ayudarla editando la aclaración para negar su relación, sino que también tenía que publicar una suya… No pudo evitar decir quejumbrosamente:—Estás tan seria con el asunto...Noa casi estaba a punto de reírse, pero se contuvo y añadió:—Por supuesto, siempre hago mi trabajo con seriedad.Luego siguió editando durante un buen tiempo. Alex se quedó a su lado aunque
Alex se negó a soltarla. Tenía muchas ganas de pegarse a su cuerpo. Aunque hacía tiempo que ella había dicho que lo había perdonado, solo en este momento finalmente sintió que la había logrado recuperar.No solo no la dejó ir, sino que la abrazó con más fuerza y no pudo evitar darle un beso en el cuello. Noa sintió la suavidad de sus labios, quiso apartarlo, pero no pudo. Alex puso las manos en su cintura y le dio más besitos en el cuello, luego hacia arriba, en su oreja, en su mejilla e iba a besarla en los labios…De manera instintiva, Noa lo evitó y dijo:—Vamos a publicar el post primero.—No hay prisa —contestó Alex y besó sus labios. “Ahora, obviamente lo más urgente es disfrutar del beso.”Él la besaba profundamente sin importarle nada más. El que por fin la hubiera recuperado hizo que solo tuviera ganas de abrazarla, besarla y hacerla suya.Noa se esforzó en intentar apartarlo, pero no lo logró. Podía sentir muy de cerca el aliento caliente de Alex y su excitación sexual. Se ha
Los internautas se apresuraron a revisar el post recién publicado de Noa en el que esta había admitido su relación romántica y había adjuntado una selfie.En realidad, la selfie se había tomado hacía un rato. Al principio Noa solo había querido hacer un post de puro texto. Pero Alex, después de haberla recuperado, tenía muchas ganas de que toda la gente supiera sobre su relación e insistió en publicar una selfie de los dos juntos.En aquel momento, Alex había parecido como un loco enamorado. No solo le había pedido a ella que publicara el post junto con la selfie, sino que también lo compartió y agregó dos palabras: «ES MÍA.» Luego, volvió a pedir que se tomaran una selfie los dos, donde él le tomaba la mano a Noa y presionaba sus dedos en sus propios labios, mirando a la cámara y mostrando su amor por Noa. Alex no era una celebridad ni un ídolo público y no tenía que preocuparse por la decepción de los fans que se consideraban como su novia o su esposa. Estaba extremadamente feliz de
—¿Prosopagnosia? ¿Por qué pensaste eso?Sergio suspiró y respondió:—Papá, es el exmarido de Noa.El hombre al que Sergio llamó papá era Jacob Fernández, el padre de Sergio y Noa y de sus otros hermanos.Al escuchar esto, Jacob se sorprendió y comentó:—Así que resulta que es el exmarido de Noa. Uff, no lo había reconocido. Será porque solo lo vi unas pocas veces.—¿Algo más? —preguntó Sergio, pensando que su padre regañaría a Alex.—¿Eh? ¿Por qué la pregunta?Sergio negó con la cabeza y suspiró. Su padre tenía muy buen carácter y era muy amable, y no le importaban las opiniones ajenas. Sin embargo, tenía la dificultad para recordar el rostro de las personas, excepto el de los miembros de su familia.—¿No te opones? —preguntó Sergio.Por el contrario, Jacob, de buen humor, respondió con otra pregunta:—¿A qué me puedo oponer? Ella ya publicó la relación, así que definitivamente está lista para recibir mi oposición. Ya le caigo mal, si esta vez me opongo a su decisión, me odiará aún más
Sin embargo, solo miró fijamente la pantalla sin atender la llamada.Alex la examinó perplejo.—¿Qué pasa? —preguntó y pensó: “Al parecer, ella no quiere responder a la llamada. ¿Acaso tiene una mala relación con su hermano mayor?”—Él me está llamando justo en este momento. Debe ser por esa persona.—¿Por quién?Como había tomado la decisión de estar con él, Noa no quería ocultárselo.—Mi padre.Al escuchar esto, Alex se quedó callado.—No me gusta él —agregó Noa y dejó el celular a un lado. Se metió en los brazos de Alex y pidió—: Contesta la llamada por mí, por favor. Y dile que estoy dormida.Alex apretó los labios y luego hizo como ella había dicho.Después de que Sergio colgara, Jacob preguntó animado:—¿Qué te dijo? ¿Dónde está ahora?Sergio entendió que Noa no quería hablar de su padre, y respondió:—No fue ella quien atendió la llamada. Está dormida.Al escuchar esto, Jacob también adivinó la verdadera razón. Apretó los labios, luego dio un suspiro y dijo:—Ella de verdad me o
Jacob se quedó sorprendido. No esperaba que ella pensara que tenía cáncer. Pero al notar que estaba nerviosa por él, sintió que el malentendido no era algo malo, en cambio, le era muy agradable. Cruzó una mirada con Sergio, y este inmediatamente entendió lo qué quería hacer su padre. Sacudió levemente la cabeza, negando.Jacob entendió que Sergio no quería que hiciera eso, que igualaba a mentirle a Sara. Pensó por un momento y susurró:—¿Puedes dejarme verla? Solo una vez, por favor.Él de verdad no había estado cerca de su hija durante muchos años y esta tampoco lo había vuelto a llamar papá desde entonces. Se sentía muy frustrado.Sara, sin entender el porqué, lo miró por un buen momento y al final asintió, como si se diera por vencida.—Está bien. Deja que haga una llamada.…Noa realmente se había quedado dormida poco después. Cuando se despertó, descubrió que estaba acostada en una cama muy grande. Abrió los ojos para ver al hombre que estaba sentado en el sofá y trabajaba con el
Justo en este momento, alguien llamó a la puerta:—Señor, su madre ha vuelto.Alex sintió que el cuerpo de Noa se ponía rígido al instante. Ella parecía nerviosa y él le susurró:—Tranquila, estoy aquí contigo.—Su madre se enteró que la señorita García había venido. Quiere verla.“¿Quiere verme? ¿Por qué de repente quiere verme? ¿Volverá a humillarme?”, se preguntó Noa y se mordió el labio inferior ligeramente.—Ella todavía no ha comido nada. Dejen que terminemos el almuerzo primero —respondió Alex en su lugar.La persona de afuera pensó un rato y se alejó.—Si tardo en ir a verla, la ofenderé, ¿no? —preguntó Noa preocupada.Alex la miró y, después de un momento de silencio, dijo:—Sé que te ha tratado mal en el pasado —Noa se sorprendió un poco—. Perdóname, cariño —Alex se inclinó para dejarle unos besitos en la frente—, por no haberte protegido.Noa parpadeó levemente.—Venga. Almorzamos primero. Luego te acompaño a verla —dijo Alex.Aunque Noa todavía estaba un poco inquieta, ya n
Al final, Noa decidió quedarse.La declaración de Claudia le pareció sincera y esta vez su sonrisa no se veía falsa. Además, como ella no era su madre biológica, Noa tenía pocas esperanzas de que ella la tratara bien. “Si no nos peleamos, para mí ya estará bien. Después de todo, será Alex con el que pasaré el resto de mi vida, y no con ella”, le dijo su conciencia.Al saber que Noa estaba dispuesta a quedarse, Claudia estaba muy alegre y se sintió muy orgullosa de tener un hijo exitoso.Como ya sabía que Noa no era una cazafortunas, la actitud de Claudia hacia ella cambió totalmente.En el pasado, no le había dado ninguna cosa buena ni regalos. Pero ahora, mandó llevar a su habitación todas las cosas que creía que eran buenas. Luego, cuando participaba en las subastas, compraba las mejores cosas para darle a Noa. Y cada vez que hacía compras, le elegía unos regalos para ella como si fuera su propia hija. Pero, claro, todo eso ocurriría más adelante.En el presente, Noa recibió una llamad