Hugo asintió despreocupadamente, su mirada peligrosa buscaba entre la multitud, y finalmente encontró a Noa sentada en un rincón, mientras él lanzaba una mirada hacia Alex, quien estaba detrás de él.

Alex recibió el signo y empezó a acercarse a ella, pero después de dos pasos Hugo tiró de su brazo y bajó la voz, diciendo:

—La he invitado con la excusa de invitar a toda le equipo de producción, ¿cómo puedes ser tan agresivo?—Hugo respiró profundamente e hizo un gesto —Contrólate un poco, toma asiento primero, y espera un momentito.

Alex frunció sus finos labios con una expresión claramente descontenta.

Hugo continuó consolando, dijo:

—Ya que está aquí, no se escapará.

Probablemente fue la última frase la que convenció a Alex, quien fijó una mirada directamente en Noa en la esquina antes de retirar la mirada.

Los otros sentados alrededor de Noa hirvieron.

—¿Habéis visto eso? El señor Alex acaba de mirar hacia aquí.

—Ah, ¡Sí! El Sr. Alex es aún más guapo que las celebridades jóvenes, ¿po