El celular de Matt no dejó de sonar, y lo más seguro es que no dejara de hacerlo a menos de que la llamada fuera contestada o, que Matt apagara o rompiera el aparato. Aunque solo estarían retrasando, y empeorando mucho más, la situación. Por lo que...—Atiende— Le dijo James, aun sin meterse en la camioneta, puesto que primero necesitaban saber lo que Troy quería, sobre todo saber en donde estaba ahora, porque existía la posibilidad de que estuviera en la cafetería.Matt respiró hondo y puso su mejor cara, cosa innecesaria ya que no estaba realizando una video llamada, pero en fin, él incluso puso hasta una sonrisa en su rostro, una muy forzada. Sería gracioso si no se encontraran en tremendo lío.—Ponlo en altavoz...— Murmuro James una vez la llamada comenzó. Escuchó.Matt lo hizo, fue el primero en hablar, soltando un incomodo:—Hey...— Su sonrisa se transformó en una mueca. James también hizo una mueca.—¿Dónde están?— Bueno, Troy no se fue por las ramas, agregando:—Estoy en la cafe
Unos cuantos días habían pasado desde lo sucedido, ya era sábado y nada parecía fuera de lugar, es decir; No hubieron nuevos problemas o amenazas, ni nada parecido. Tampoco hubieron sospechas de parte de nadie, todo estaba volviendo nuevamente a la "normalidad", a su normalidad. Fue algo sumamente aliviador tanto para James como para Matt, ahora ambos esperaban que situaciones así no volvieran a suceder, al menos no en un futuro cercano, ni con tal peligrosidad y brutalidad. Porque obviamente hubieron personas que perdieron la vida, y tal vez era lo que merecían, pero no de esa manera, por más horribles personas que fueran.Matt en estos últimos días estuvo pensando mucho en ello, pero no se desvelaba, siendo protegido por brazos de Oliver, siendo consolado de una manera silenciosa. Matt también decidió no darle muchas vueltas al asunto de las fotografías encontradas, pues no había porque hacerlo realmente. Todo aquello era pasado, un pasado que Oliver no iba a volver a pisar. Matt l
A decir verdad, James no se sentía muy cómodo, observándose en el espejo de una tienda de ropa (muy cara, así como demasiado). Probándose traje tras taje y no llegando a nada, no le agradaba en lo absoluto volver a usar este tipo de ropa, y mucho menos le era de su agrado el fin de esto. No quería volver a estar entre multitudes de personas millonarios y de negocios, no quería volver a este tipo de eventos, donde seguramente, se toparía con personas del pasado. En el mundo de loe negocios, de las finanzas multimillonarias, todo el mundo se conocía, por diferentes razones.Lo que justamente James había querido evitar todo este tiempo, pero eso no era todo, el tema de las personas conocidas era algo casi secundario a la verdadera incomodidad de James. Él simplemente no quería volver a lo que su... a lo que Harrison hacia, arrastrándolo consigo a todo tipo de reuniones y eventos aburridos donde él era manejado como si fuera un títere sin alma. Los malos recuerdos era el problema. Y James
James no estaba babeando, no, él solo se comía a su apuesto y atractivo novio con la mirada, eso era todo.—Deja de babear— Le codeó Matt con una sonrisita ladina, siendo molesto y un burlón desvergonzado por completo, puesto que hace nada, y aun lo seguía haciendo, miraba con hambre al hombre a su lado.—No lo hago...— La voz de James salió baja, casi inaudible, y él se alejó, yendo hacia donde su novio quien llevaba puesto un traje negro abrazando su figura musculosa, y James quería tantas cosas ahora. Una de ellas era:—Me gustaría estar sobre ti ahora mismo— Dijo sin vergüenza alguna, porque vamos, su mirada lo dejaba muy en evidencia, ¿no es así? —Y no precisamente para dormir o por mimos...— Fue un acto de pura necesitad el que se relamiera los labios, los sintió tan secos. Muy, muy secos. Sonriendo, Ryan observó de pies a cabeza a su chico, sin duda se veía bien, el traje resaltando su delgada figura bien trabajada y su trasero respingón. Pero Ryan no pudo maximizar su lujuria
Y estaba pasando lo que James recodaba muy vívidamente, nada había cambiado; Las sonrisas y risas ajenas escuchando en su mayor parte falsas y casi fuera de lugar. Habían habido veces en las que James se preguntaba si aquellas personas se daban cuenta de ello, si al menos percibían la falsedad ajena, o al menos sospechaban de algo así, aunque sea mínimo. James muchas veces llegó a la conclusión de que si, ciertamente si se habían dado cuenta de los gestos falsos, forzados, y de la hipocresía abierta.Era increíble para James ya no permanecer a esa multitud, aquello le dio un gran alivio.Tomando dos copas de vino que uno de los meceros ofrecía, James le entregó una a Ryan, —Un brindis por lo afortunado que somos de no permanecer a este tipo de vida, ya no más— Sonrió, siendo genuino y sintiéndose orgulloso por los dos. Entonces las copas chocaron, y le dio un pequeño sorbo.Por dentro, Ryan agradeció esto, el que James no estuviera viendo incomodo o algo más, parecía solo estar bien,
Sin importarle nada, James apartó a Oliver, haciéndole a un lado para luego darle una muy mala mirada, claramente culpándolo por lo que sea que le haya hecho a su amigo. Hace tan solo unos minutos atrás Matt había estado viéndose ridículamente nervioso y feliz, ¿cómo aquello pudo cambiar en tan poco tiempo? ¡Que diablos!Pero James no iba a perder tiempo con Oliver, de todas formas dudaba mucho que consiguiera algo, una respuesta. Además, Matt era primero, debía de ir a consolarlo, si es que lo necesitaba. James pensó que si, pues al salir y caminar un poco más hacia la entrada lo encontró, caminando lento hacia el portón, con la intensión de irse. Cuando lo alcanzó, James observó su rostro lloroso y, Matt no era un chico que llorase seguido, él casi nunca lo hacia.—Hey, ¿Qué sucedió?— James fue rápido en preguntar una vez sus brazos atraparon el cuerpo de su amigo. Mirándole directamente hacia sus ojos rojos y brillosos. —Matt...-Matt retrocedió un poco, sacándose el saco negro, qu
Luego de pensarlo mejor, Matt decidió no ir a casa de Chris, él solo tomaría una de las habitaciones de huéspedes. Y así sucedió, también sucedió el que Matt no pudiera dormir a gusto; Demasiado acostumbrado a ya no dormir solo y mucho menos sin unos brazos rodeándole, apegándolo a un cuerpo cálido y fuerte. Por ello, Matt se percató de que alguien quiso ingresar a la habitación a muy altas horas de la madrugada. Fácilmente podría haber sido Oliver, queriendo de alguna forma terminar con la discusión, queriendo que las cosas entre ellos volvieran a estar bien, pero Matt estaba seguro de que Oliver aun no se percataba de su error, de sus errores. Y lo peor era que Matt estaba seguro de que Oliver siquiera veía algun problema.De modo que, Matt no se movió de la cama a quitarle el seguro de la puerta, dejando a Oliver del otro lado sin permitirle ingresar. Había querido verlo, pero si lo hacia él solo iba a terminar perdonándolo y las cosas iban a seguir como estaban, y no, Matt no iba
Matt no estaba siendo paranoico, simplemente quería asegurase de que estuviera solo, sin nadie vigilándole a lo lejos o siguiéndole. Por ello estaba, no tan disimuladamente, observando todo a su alrededor, llevando su cabeza y mirada de un lado a otro. Y él no estaba seguro de nada, pues cualquier persona podría ser un guardaespaldas, ¿no es así? Pero Matt terminó negando, no creyendo posible que Oliver actuara de esa loca manera: Mandándole guardaespaldas camuflados, por así decirles.Ahora mismo, Matt no estaba solo, caminando junto a Steve hacia su nuevo departamento. No había sido la idea, pero Matt tampoco había estado seguro de que hacer luego de salir de la universidad, y lo único que tenía en claro era no pisar la casa de Oliver por ahora, aunque él sabía que este no iba a estar ahí hasta muy tarde. Matt solo quería evitar aquel ambiente por algunas horas.Steve no era y no es un chico entrometido, es más, él hacia todo lo posible para no serlo, evitando los problemas de los d