La bofetada resonó fuerte y clara.

Además, había golpeado deliberadamente el lado de la cara herida de Shirley.

La escena se había desarrollado demasiado repentinamente. Camille y Cathy no lo habían esperado, mientras que la madre de Ada estaba satisfecha con su “hazaña”, y Ada estaba secretamente encantada.

Sin embargo, Ada solo pudo disfrutar el momento brevemente antes de recibir igualmente una fuerte bofetada en su mejilla derecha.

“¡Ay!”, gritó Ada de dolor cuando Carter la abofeteó con tanta fuerza que apenas podía mantenerse de pie. También probó la sangre que goteaba de las comisuras de su boca.

Ada y su madre se quedaron congeladas y con los ojos abiertos. No esperaban que Carter hiciera semejante movimiento.

De hecho, ¡había abofeteado a Ada!

Shirley tampoco lo había previsto.

El dolor ardiente en su mejilla parecía haber disminuido de inmediato. ¿Estaba Carter tratando de protegerla?

“¿Cómo te atreves a abofetear a mi hija, Carter?”, reclamó con nervios la madre