Sigilo

Erin se desnudó y se miró al espejo, su torso estaba entre amoratado y amarillento, allí donde Ethan la había golpeadno y tocado quedaba la sensación de dolor si se movía con brusquedad o si tocaba las heridas directamente, pero por suerte para ella, había empezado a sanar, se aplicó un poco de crema para los golpes antes de retirarse el sostén.

Pero una vez que acabó, miró la puerta con la intensión de salir de la habitación, ir a la biblioteca y... ¿Luego qué? se preguntó, realmente no estaba segura de si su mente le había hecho una jugarreta o si en algún lugar de esa casa se encontraba su única oportunidad de escapar.

Tomando una respiración porfunda y calculando que tenía alrededor de una o dos horas antes de que Ethan pasara a la habitación a verla, tomó su bata y la ató alrededor de su cuerpo, manteniendo las bragas, en caso de que necesitara volver y actuar como si nada.

Giró el pomo de la puerta con cuidado y miró alrededor, Ethan tenía al sevicio en el primer piso, principal
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