Me guste o no ya tengo que decirle la verdad, un momento que deseaba no vivir pero que lamentablemente es mi culpa por meterme donde no me llaman con un hombre que solo conozco a medias, bueno, si contamos el cuerpo… Lo conozco en profundidad como él a mí.

No es fácil decirle a un humano mi vida, nadie sabe lo que soy y confesarlo me dejaría vulnerable a movimientos inesperados por parte de alguien a quien desconozco y que para colmo es un jodido mafioso.

Nada es favorable, viendo desde otras perspectivas él me tendrá en sus manos si sabe que también es mi debilidad, sacando en limpio el hecho de que al ser mi mate posiblemente se aproveche de eso para tener a una licántropo en sus manos y hacerme cometer actos que muy seguramente no serán de mi gusto.

Estupidez mía por no guardar el puto libro que estaba delante de su linda y varonil cara. No luché porque ya lo habría asesinado al no controlar mi fuerza con un simple humano.

Me vería tremendamente afectada si sale herido, mi loba