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Es Solo Un Contrato, No Hables De Amor
Es Solo Un Contrato, No Hables De Amor
Por: Isa González
Capítulo 1: Contra Viento Y Marea

Miami ( Estados Unidos)

La lluvia caí torrencialmente sobre la bella ciudad de Miami, la familia Mclaren bajaban de sus lujosos autos vestidos de luto y entran a su mansión, ellos habían despedido minutos antes al patriarca de la familia, al CEO más importante del país, Gerard Mclaren, quien fue en vida el dueño de un imperio hotelero y el Patriarca de una de las familias más poderosas del país.

_Abuela ¿Quieres subir a descansar?_ Pregunta Christopher Mclaren, el primer nieto del matrimonio Mclaren, y principal candidato para ser el reemplazo de su abuelo.

_No, quiero hablar con todos ustedes en la sala_ Contesta ella con un tono calmado, pero triste al mismo tiempo.

_Esta bien abuela_ Responden todos al tiempo, extrañados por la respuesta de la mayor mujer.

Todos pasan a la sala y cada uno de ellos ocupa su lugar, estaban a la expectativa de lo que ahora la nueva patriarca de la familia diría.

_Se que todos ustedes están disimulando, pero estoy segura que quieren saber quién se quedará a cargo de la compañía y de todos los negocios que Gerard aún manejaba.

_ Claro que no mamá, acabamos apenas de enterrar a papá_ Le responde Annys Mclaren, La hija menor del matrimonio Mclaren.

_Hija, no me interrumpas por favor_ Responde la mujer con voz sería.

_Abuela mi tía tiene razón, aún no es el momento, podemos ir a descansar y mañana hablamos de todo lo relacionado con la compañía_ Interviene Christopher.

_¡Dejen de interrumpir! La compañía no puede quedar a la deriva, así que mañana mismo se abrirá el testamento de Gerard, lo único que les voy a dejar bien claro, es que sea quien sea que mi esposo haya escogido, seré yo quien dará la órdenes en la familia.

_Mamá, yo creo que es más que obvio que yo seré el próximo CEO, soy el hijo mayor, estoy totalmente capacitado para eso_ Dice con seguridad Franco.

Todos se miran y sonríen, los presentes tenían bien claro que estaba equivocado, ya que Franco y su padre nunca se llevaron bien por su adicción al juego y a las mujeres, también por su irresponsabilidad.

_¿Qué? ¿Porque se ríen?_ Pregunta un poco enfadado.

_No vamos a sacar conclusiones, mañana lo sabremos_ Interviene doña Carlota_ Con tono ese tono cansado que dejan los años.

La mujer se apoya de su bastón y en compañía de su empleado de confianza, se va a su habitación.

_¡Eres increíble tío! ¿En verdad piensas que mi abuelo te escogió a ti?_Pregunta Christopher_ Con un pequeño tono de burla_ Mientras mete las manos en sus bolsillos.

_¿porque no? Yo soy el primogénito, soy quien tiene más derecho.

_A mi abuelo nunca le gustaron tus adicciones tío.

_¿Qué me quieres decir? ¿Crees que seras el nuevo Ceo?_ Pregunta enojado Franco.

_ No lo sé tío, pero.... Quizás si, yo soy el que estuvo todos estos últimos años al lado de mi abuelo en la compañía, además soy su primer nieto, y además, soy lo único que tenía de su hijo favorito, mi padre, el que él muchas veces dijo que sería su reemplazo, y hubiera sido así si mi padre no hubiera muerto en ese terrible accidente.

_Jajaja, que ambicioso eres sobrino, eres idéntico a tu padre.

Los demás solo se miran y sonríen, Luego cada uno se levanta y se va.

Tijuana (México)

_¿Cuánto me vas a cobrar por pasarme del otro de la frontera?_ Pregunta Sofía_Con tono fatigado.

_$2000 y te paso al otro lado_ Le responde él hombre seriamente.

_¿Qué? Yo no tengo ese dinero_ Le responde ella con angustia.

_¿Como que no? Aquí cobramos eso, si no tienes esa lana entonces no pasas.

_Tengo solo $800 no tengo más, por favor, necesito llegar al otro lado_ Le suplica ella, abriendo sus bellos ojos cafés claros_ Y acomodando su largo pelo negro que movía la brisa.

El hombre la mira de pie a cabeza y se queda pensando por unos minutos, Luego le dice.

_Esta bien, dame los $800 y súbete al auto.

Sofía emocionada le entrega el dinero y se sube al auto junto con los demás, unos minutos después, empieza el viaje.

La noche cae y solo la oscuridad se ve a cada lado, ellos van tapados con unas cobijas, el frío es tan fuerte que llega a sus huesos, todo iba según el plan, hasta que de un momento a otro todo cambio.

El auto se detiene de repente, y el hombre que manejaba baja de el.

_¡Hasta aquí llego el viaje!_ Dice en voz alta_ Mientras les apunta a todos con un arma.

_¡¿Qué?! ¡Usted no puede dejarnos aquí! Le pagamos para que nos llevara al otro lado de la frontera_ Le reclama Sofía.

_¡Mira reinita! Ya escuchaste, llegamos aquí ¿En verdad pensaron que yo iba a arriesgar mi vida pasandolos del otro lado? No mi vida, este es mi negocio.

Todos los que iban en el auto bajan a asustados, eran más de 10 personas que le habían dado todo lo que tenían a ese hombre, incluyendo a Sofía.

Después de dejarlos allí en la mitad del desierto, el hombre se va muy tranquilo.

"¡¿Y ahora que vamos a hacer?! " Gritaban todos desesperados.

_ Tenemos que seguir, no sé ustedes, pero yo sí tengo que pasar la frontera_ Les dice Sofía muy segura de lo que iba a hacer.

Por varias horas caminaron por el cruel desierto, soportando un frío que parecía desgarrar su piel, y se llevaba todas sus fuerzas.

Pero Sofía no se rendía, aunque viera quedarse uno a uno de sus compañeros en el desierto, ella tenía que pasar esa frontera, al otro lado estaba la oportunidad de salvar a su familia, no iba a dejarla ir.

Sofía venía de una familia muy humilde, su padre era un buen hombre que lamentablemente había quedado como un vegetal después de un trágico accidente, había caído de el séptimo piso del edificio en construcción donde trabajaba, y para completar la situación, su madre había sido diagnosticada con cáncer, ella prácticamente había perdido a su padre y no estaba dispuesta a perder también a su madre, así que en contra de la opinión de su madre, quien le había suplicado que no se fuera, Sofía tomó la decisión de irse a los Estados Unidos.

Y Ahora que estaba tan cerca no se iba a rendir por nada ni por nadie, ella tenía que llegar al otro lado.

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