Xana… estás completamente loca.

Fueron las palabras mentales que se dijo la humana nada más abrir los ojos al despertar. Y esta vez se lo decía con razón. En qué mundo decías que no querías nada que ver con alguien al minuto siguiente… bueno, no tanto minutos, sino días después terminas toqueteándote con él, por no decir más.

Lo que había faltado para que la tirara en la cama y se la follara había sido… que ella había despegado a la inconciencia, nada más. Sabía que White podía estar necesitado de sexo, per vaya, nunca pensó que tanto… ni ella tampoco.

Su cuerpo había tenido casi vida propia y en algún momento había perdido control de sí misma. Como si lo único que buscara fuera el placer desgarrador que la había invadido.

Se llevó la mano al rostro y suspiró. Ahora no era como si pudiera dar un paso atrás y decir que no había pasado nada… porque si había pasado. Y en caso que lo hiciese estaba segura que el alfa se lo haría recordar en todo momento.

Se sentó lentamente acomodándose l