—Emilia, asistiré esta noche a una fiesta de gala que se efectuará en un hotel, ¿no me quieres acompañar? —preguntó Bruce a su hermana si tenía un interés en ir, a lo cual ella se negó. —Ve tú, yo estaré bien en casa, hoy no podré acompañar… —guardó silencio cuando recordó que la fiesta sería en un hotel—. ¿En qué hotel será la fiesta? —inquirió. —El en Gran Continental, irán empresarios importantes y políticos, lo habitual de siempre. —¡Claro que iré! —expresó ella al saber que allí se encontraría su príncipe azul, el hotel era de Matt y estaban celebrando el aniversario de su Instalación. —¿Qué te hizo cambiar de parecer?. —Bruce preguntó con curiosidad de saber que era aquello que emocionaba a su hermana de asistir. —Sally también irá, me dejó un mensaje que iba a asistir y preguntando si yo también. Así que debo ir. —mintió, solo iba para ver a Matthew. —Supongo que Brent también asistirá. —Emilia se levantó de su cama y fue a abrazarlo para consolarlo en medio de su desamor.
—¡Matthew! —Oliver gritó su nombre al momento de entrar en la sala donde Matt estaba entrenando con rudeza para mantener su cuerpo en perfectas condiciones. Cuando Matt terminó de levantar pesas, fue por agua y bebió lo suficiente, cuando terminó de relajarse, se centró ahora en su primo y preguntó.—¿Todo bien? —Oliver lo miró con fastidio.—A veces no soporto cuando te crees muy importante. —Dijo Oliver.—Lo soy, primo, y lo sabes muy bien. Ahora dime lo que has venido a decirme, estoy entrenando y no me gusta que me interrumpan cuando estoy metido en el gimnasio. Habla. —Le exigió casi que entre dientes.—Vale, ya están comenzando a preguntar por ti, y saben también que existe una linda joven detrás de ti. Para ellos la chica lo representa todo en tu vida y bueno, ya sabes el resto. ¿Qué vas a hacer al respecto? —Oliver abrió sus brazos mientras que Matt negó inquieto. —Asistiré esta noche al antro para que estén felices todos, y aclararé el motivo de mi ausencia para que no impl
—¿En serio te atreviste a besarlo en dos oportunidades? ¡Tú sí que te has vuelto loca!, aunque me enorgulleces, por primera vez te has atrevido a hacer algo que nunca antes no. ¿Ves?, no es tan complicado cuando nosotras somos las que damos el siguiente paso. Aunque, esperaba que lo dieras con otro y no con ese extraño hombre. —Emi movió sus hombros restándole importancia a lo que opinaba su amiga, para ella Matt, era un buen hombre, pero para su amiga, era misterio y dejaba que pensar en lo demás. Emi aseguraba que solo usaba un disfraz de hombre rudo y malo para ahuyentar a las personas, pero que en realidad él era bueno, un encantador magnate con un corazón enorme que no le cabía tan siquiera en el corazón. —Deja de insinuar que Matthew Duperly es malo, de serlo ya hace mucho, me hubiera alejado, y no lo ha hecho. Es un hombre complicado y hay que saber cómo llegarle para hablar, también es bastante cascarrabias, todo le molesta en la vida. En mi opinión lo considero un hombre so
Matthew llegó a su Pen-House luego de haber cenado con Emilia durante más de cuatro horas. Nunca creyó que podía haber Sido tan interesante conocerla, está algo sorprendido porque Emilia por más que lo hacía enojar con sus burlas, también lograba calmarlo cuando sus labios buscaban los de él.Matt no entendía por qué razón una joven como ella podía causar fuertes efectos en él, ni tampoco entendía como era que podía lograrlo. No vio actuación en ella, ni mentiras ni ningún interés que no fuera por él y conocerlo a él, ella se había convertido la primera mujer en interesarse por su vida y por conocer aquello que lo atormentaba, aun cuando eso implicara peligro, le asombró saber que ella no tenía miedo de lo que descubriera en él, aunque Matt por supuesto no mencionó nada de su vida, solo escuchaba era sobre la vida de Emilia muy atento. —¡Matthew! —Oliver gritó su nombre mientras aparecía en la sala—. ¡Desgraciado, sabía que ibas a ir a la cena, y lo peor de todo es que me dijiste y m
—¡Debes entender, que no puedes seguir buscándome, no soy bueno, todo a mi alrededor es un peligro y tú lo que haces es hacerme, meter en problemas y hacer que gaste mi dine…! —Matt se calló antes de decir que había gastado una enorme suma de dinero para protegerla.Emilia estaba perpleja por la reacción de Matthew, quería comprender lo que había sucedido, pero preguntarle en ese estado en el que estaba no era lo más correcto. Él parecía estar fuera de control y sin posibilidad de calmarse por un momento. —Será mejor que me vaya. —¡No, no vas a ir a ningún lado sola, te vas a quedar aquí hasta que sea seguro de irte mañana por la mañana! —Volvió a gritar.—Matt, tienes que calmarte…—¡¿Calmarme?!, ¡no tienes ni put2 idea del peligro que buscas al querer perseguirme y conocerme! ¡Tú me das problemas…! —Emilia lo abofeteó con mucha fuerza, luego de darse cuenta lo que había hecho, pegó su mano a su pecho y se quedó observando a Matt como en espera de su reacción. Por suerte la ab
Emi volvió temprano a su casa después de que Matt la mandara con su chófer, subió en silencio las escaleras cuidando de no hacer ruido y de que Bruce no escuchará los pasos para evitar tener que dar explicaciones. Emilia no es de dormir en la calle, y cuando lo hace es donde Tessa y por supuesto le avisa a su hermano, anoche solo le dijo que iba a salir, más nunca le aviso a Bruce que estaba bien y que se iba a quedar fuera de la casa, hasta bien temprano que le escribió diciéndole que había pasado la noche bien y que se disculpaba por no haber escrito. Al ver que no le respondió el mensaje ya daba por hecho que estaba molesto.Cuando Emi entró a su habitación, pegó un brinco seguido de su grito, Bruce estaba en su habitación sentado en su cama y con los brazos cruzados, aquella expresión molesta la hizo sentir pequeña y algo mal porque hizo que pasará la noche sin dormir y preocupado.—Lo siento mucho, sé que debí decirte que me iba a quedar en dónde Tessa y…—No estabas con ella, f
—Guao, ¿entonces Bruce vino a imponerte que te alejes de Emi?, no es justo, ella me agrada mucho. —Matthew jugaba con un adorno que poseía sobre su escritorio.—Tiene razón, ni siquiera sabía en qué estaba pensando cuando acepté salir con ella. —dijo Matt.—¿Y desde cuándo le haces caso a Bruce?. Él ya no es tu amigo, te culpó a ti por la desgracia de su familia cuando no fuiste responsable. El egoísta es él. —Oliver tenía resentimientos con Bruce, Matthew era su primo y nunca le perdonó a Bruce que culpará a Matt por las muertes de sus padres.—Tampoco me interesa. Bruce… solo intenta seguir manteniendo a Emilia a salvo.—¿A salvo, Matt?, le ha mentido durante años sobre la muerte de sus padres, sobre la guerra que se armó tras descubrir que su prima iba a ser subastada por mi tío, y que a raíz de eso todo se volvió un problema. Fue su problema no haberle contado la verdad, ahora que no intente interferir en medio de lo que están viviendo ustedes dos. —Matt sostuvo el puente de su na
Matthew volvió a su Pen-House junto con su primo, pero antes de encerrarse en el su propio bar privado con él, subió a su habitación a mirar si Emilia estaba bien y dormida.Se acercó a la cama y con sus dedos movió de su rostro un mechón de su cabello, verla allí dormida era como ver un tierno ángel, Emilia ante sus ojos se veía vulnerable, hermosa y delicada. Matt se arrodilló en el suelo y allí miró de cerca el rostro de Emilia, preguntándose si algún día en realidad podía tener una familia. Ver esa ternura en Emi, sentir su forma cariñosa de ser con él y ese carisma divertido que daba sentido a todo aquello que la rodeaba, lo llenaba de ilusión. El Magnate llenaba su Pen-house de mujeres, pero ninguna se atrevió a dormir en su cama, a utilizar su ropa ni mucho menos su perfume, en cambio, Emi lo había hecho todo y en poco tiempo. Ella era atrevida, delicada y divertida, era todo aquello que Matt ignoraba de una mujer, y como si eso no fuera suficiente, era quien le llevaba la c