***NARRA LU FABIANO***

Ciudad de México

A la mañana siguiente cuando me desperté, estaba aún en los brazos de Nick, habíamos pasado una noche llena de amor, de besos y caricias, como cuando éramos novios, como cuando recién habíamos comenzado. Habían sido recuerdos mezclados con lo que habíamos vivido la noche anterior.

–Hola, Lu, gracias por ponerme las cosas en claro. – Me agradeció, Nicolás.

Me gustaba que lo haya tomado de esa manera, eso lo iba a dar una ventaja sobre los asuntos del juicio, que se arrepintiera de sus actos, que se presentara ante los familiares de Diana, que les pidiera perdón, por el daño causado

–Era lo justo, Nicolás. – Lo hice reflexionar.

Mis intenciones eran que él se pusiera en mi papel, era de suma importancia que él fuera con la firme convicción, que no fuera forzado y esto me decía que había hecho lo mejor, que no íbamos a tener ninguna resistencia de su parte.

–Sí, porque yo tengo una hija y lo estoy viendo desde el punto de los familiares. – Reflexi