Capítulo 3
Rebeca
Lo primero que hago al entrar en la que fue por mucho tiempo mi habitación en esta casa, es ver a mi pequeño príncipe durmiendo plácidamente en su cuna. Todavía no me puedo creer como pasa el tiempo y como ha crecido tan rápido.
Siempre que me siento a ver a mi bebé dormir, me acuerdo de todo lo que pase cuando él apenas tenía días de nacido y a mi mente llegan las noches en vela sin poder dormir porque simplemente él lloraba por todo. Oh las veces que no supe como cambiarle el pañal y lo hacía llorar por cualquier cosa. Claramente recuerdo como hasta yo me unía a su llanto sin saber qué hacer y mi madre tenía que calmarnos a los dos con sus grandes conocimientos.
Sin embargo, ya nada de eso importa si la vida me permite verlo crecer sano y fuerte, demostrándome que la vida se vive un paso a la vez. Nadie nunca ha dicho que ser madre es tarea fácil, ya que uno aprende todos los días un poquito más.
Luego de cambiarme y de tomar una ducha, me acuesto en la cama para por fin poder descansar de un día largo. Un día en el que todo ha sido altas y bajas, pero que enfrenté con todas ganas.
Ni siquiera me hace falta el reloj para saber que hora es, ya que mi pequeño siempre se despierta a las 5:30 de la mañana y todo para que le dé de comer. Creo que es un pequeño hábito que tiene desde que nació y yo la verdad ya estaba acostumbrada.
Me levanto de la cama para ir hacia su cuna y tomándolo en mis brazos para luego arrullarlo un poco para que así deje de llorar. Vuelvo a la cama y solamente quito la parte de arriba de mi blusa, dejando expuestos mis pechos y este de inmediato se lanza a devorarlos.
Dicen que la mejor etapa para lactar es hasta los 6 meses, debido a que cuando casi están llegando al año o a los dos años. Se le complementa la nutrición con papillas y cosas así, sin embargo, es muy saludable que sigan alimentándose del pecho por lo menos hasta los dos años. Cosa que en unos meses sucederá y mi niño cumplirá sus dos añitos.
Luego de darle el pecho a mi pequeño, este me deja volver a dormir otro ratito y la verdad lo necesitaba porque en cuanto el sol saliera. Tendría una entrevista de trabajo oficialmente, la cual sería un gran avance para mí debido a que así dejaría los trabajos de medio tiempo y podría darle una mejor vida a mi hijo.
...
Termino de ponerme el vestido formal que llevaría puesto para la entrevista de esta mañana, cuando de repente siento el llanto de mi hijo en la habitación y corro de inmediato para ver que ha pasado.
Veo como mi pequeño Darío está llorando a mares porque se le ha caído su carrito al suelo y de inmediato voy hacia él para volvérselo a dar. No me gustaba para nada verlo así y en cuanto se calma luego de que le devuelva el carrito, este me mira con esos hermosos ojos verdes gigantes. Los cuales heredó de mí afortunadamente y con ellos derrite el corazón de cualquiera.
La puerta de mi habitación se abre y por esta entra mi hermosa madre, la cual me mira de arriba hacia abajo para luego regalarme una sonrisa afirmando que le gusta lo que ve. Ella siempre ha sido una mujer súper elegante y hermosa, la cual con su exótico cabello rojo conquistó nuestro padre.
– Buenos días mis amores ¿Cómo amanecieron? ¿Por qué llorabas príncipe? – pregunto ella tomando a Darío entre sus brazos.
– Estamos bien mamá, muchas gracias y aquí El pequeño príncipe que lloraba porque dejó caer su carrito al suelo.
– Ay cosa preciosa de la abuela, ya verás que hoy la vamos a pasar muy bienvenida tú y yo mientras tu mami consigue ese empleo.
– Ojalá y Dios te oiga mamá. Necesito este trabajo por Darío y por qué quiero darle lo mejor a mi hijo.
– Ya verás como lo consigues, mi amor. Tú eres una mujer muy inteligente y sé que ese puesto es para ti. Además, Estefani me llamo para recordarte que tu cita es en media hora y que no puedes llegar tarde. Tu papá te va a llevar en la camioneta así que corre para que llegues a tiempo.
– Gracias mamá, no sabes cómo los amo y como agradezco que no me hayan dejado sola.
– Tonterías, eres nuestra hija y nuestro deber como padres es apoyarte en los momentos difíciles y no darte la espalda. Estoy segura de que con el tiempo lo entenderás porque ahora tienes a este pequeño príncipe que necesitará de ti toda la vida.
– Bueno, está bien. Ya me voy – digo tramando mi bolso y dejando un beso en el regordete cachete de mi hijo.
Mientras bajo las escaleras de la casa, reviso que toda mi documentación esté en regla y cuando llego a la entrada de la casa, veo a mi padre jugando con las llaves de la camioneta mientras está recostado a ella. Debo admitir que me da gusto que él sea el encargado de llevarme mi entrevista de trabajo, pero como los piropos no faltan en esta familia me atrevo a soltar uno.
– Buenos días, apuesto señor, me habían dicho que mi padre me esperaba afuera de la casa. Sin embargo, en su lugar me encuentro con semejante bombón ¿Dónde está mi papá? ¿Qué acaso usted quiere robarme?
– Bueno, para mí sería un placer secuestrar a tan bella señorita, pero será en otra ocasión porque ya llegamos tarde ¿Cómo dormiste amor? – me pregunta mientras abre la puerta de la camioneta para mí y deja un beso en mi mejilla
– Dormí muy bien, papá. Muchas gracias – ahora mejor vamos y platicamos por el camino.
El camino hacia la nueva oportunidad de mi vida se me hizo bastante largo, pero cuando estuve frente al gran edificio en donde se llevaría a cabo la entrevista. Me sorprendí por la imponente y glamoroso de este, ya que estaba frente a un gran edificio donde prácticamente todo era de cristal. No obstante, se veía muy sólido con sus paredes de concreto pintado de un color blanco y gris.
– No te asustes, es solo una entrevista – dice mi padre al ver mi cara de susto y de puros nervios – Ya verás como al final te quedas con el puesto, pero si en algún momento alguien te hace sentir mal quiero que te defiendas como toda una guerrera ¿Entendiste?
– Fuerte y claro papá – digo con una sonrisa llena de confianza.
Capítulo 4Rebeca¿Qué cómo me fue en la entrevista? Pues me fue bien, demasiado bien diría yo como para que me dieran dos semanas de prueba. Sin embargo, algo que me desencajó mucho, fue el hecho de que la persona que me entrevisto no era mi jefe. Más bien era alguien al que habían dejado encargado para esta tarea y esa misma persona me estaba explicando minuciosamente todo lo que tenía que hacer.– Bien, entonces. Lo que harás es bastante sencillo, pues tus funciones básicamente son contestar las llamadas llevar su agenda, revisar y ordenar documentos para tener a la mano todo lo que el jefe te pida. Debes tener listo su café mucho antes de que él llegue y lo hace todas las mañanas a las 8:30, por lo que tu responsabilidad es tenerlo listo. En esa puerta de ahí hay un mini bar donde puedes calentar tu almuerzo y puedes hacer el café. Además, la otra puerta es el baño y el jefe tiene uno personal en su oficina ¿Alguna duda?– Pues no, hasta el momento no. He ido anotando mentalmente
Capítulo 5Esta mañana me había levantado mucho más temprano de lo habitual, ya que era uno de esos días en los que solamente me despertaba y daba vueltas en la cama sin parar. Por lo que debido a esto, decidí ir a la empresa aun cuando esta estaba completamente vacía Y el personal no llegaría hasta las 7:30.Al llegar como siempre solamente estaba el hombre de vigilancia, el cual me dejó pasar y luego de pedirle que no le dijese a nadie de mi presencia en la empresa. Me decidí a subir a mi oficina para ponerme a trabajar, necesitaba mantener mi mente ocupada en algo para no pensar en las desgracias que tiene mi vida o en como esta cambio en un abrir y cerrar de ojos luego de descubrir la traición de mi ex prometida con mi padre.La verdad era que tenía demasiado trabajo atrasado y todo es por culpa de las anteriores asistentes que he tenido. Ninguna ha sabido llevar mi ritmo de trabajo, ni ha sabido organizar bien el manejo de la empresa. Esta solamente vienen para dejarme meterme en
Capítulo 6DamonAyer había sido un día, que después de la desagradable visita de Daniela a mi oficina, me había pasado el resto del día de mal humor. Tanto que terminé tomándola con Rebeca, hablándole de manera grosera y aunque esta se defendió de mi actitud. Sé perfectamente que me pasé con ella, tal vez debería de pedirle disculpas una vez llegue a la oficina. Sin embargo, desgraciadamente me cuesta dar mi brazo a torcer cuando soy yo el que tengo las de perder.Como cada mañana, me adentro a la empresa y como siempre, la gente me saluda aun cuando yo ni siquiera volteo a verlos. No es que sea maleducado, pero a ciencia cierta no me importa quién me saluda o quién no porque no estoy para personas hipócritas desde las primeras horas de la mañana.Cuando por fin salgo del ascensor, lo primero que veo es a mi secretaria, la cual tiene su semblante bastante serio y creo que en verdad me pasé ayer con ella. No obstante, cuando camino dos pasos y pretendo hablar con ella, esta ni siquier
Capítulo 7RebecaEl día de hoy acabo de firmar mi contrato oficial de trabajo, ya que he pasado las dos semanas de prueba. Sin embargo, a diferencia de otras veces en el día de hoy voy a salir más tarde del trabajo. Tenía que entregar un informe demasiado largo que me pidieron y es por eso que a las nueve de la noche estoy apagando la computadora de mi escritorio.Afortunadamente para mí, había llamado a casa para decir que iba a llegar un poco tarde y mi madre se estaba haciendo cargo de mi pequeño bebé. Por lo que estaba más tranquila al saber eso.Una vez me monto en el ascensor y bajo hasta el primer piso, me asombro a ver una oficina encendida todavía. Se supone que ya a esta hora nadie quedaba por aquí, pero al acercarme para ver quién estaba trabajando, un cuerpo grande y fuerte me hace tropezar al chocar con él.Otra vez al igual que el primer día que empecé a trabajar aquí, me encuentro en el piso, pero a diferencia de la primera vez en esta ocasión me he torcido el tobillo.
Capítulo 8RebecaLa noche de ayer luego de que mi jefe me dejara en mi casa, digamos que fue bastante dura no solo porque mi bebé se despertó llorando y apenas si durmió. Si no también porque mi hermano no la estaba pasando nada bien, ya que los últimos resultados que le practicaron a mi cuñada, arrojaron que Estefani desafortunadamente tiene un tumor envuelto en sus ovarios. Así que dicho tumor es el que le está causando todos esos dolores tan terribles y mi pobre hermano no sabe qué hacer. Además, toda la familia está devastada porque ella es una mujer demasiado buena y no se merece estar pasando por una situación como esa.Bien dicen que Dios le da barba a quien lo tiene quijada y habiendo tantas personas malas en el mundo no puedo creer como a ella que es un cielo le esté pasando algo como esto. Aun así, nosotros no nos vamos a dejarla sola y siempre vamos a estar con ella apoyándola y queriéndola. Más aúnporque el proceso puede ser duro y tal vez su sueño de ser madre se puede
Capítulo 9DamonDecir que quiero despedir a media empresa en este momento es decir poco, ya que luego de que el jefe de recursos humanos llegar a mi oficina. De inmediato le reclamé por el hecho de que Daniela se autonombró trabajadora de esta empresa solo por tener algunas acciones. A lo que este me dijo que no tuvo otra opción más que cumplir su capricho, ya que esta lo había amenazado con despedirlo a él también y entiendo al hombre. Nadie se jugaría el puesto y mucho menos por llevarle la contraria a alguien que tiene acciones de la empresa, como fue el caso de Rebeca que también tuvo que hacer lo que le dijo.Sin embargo, aunque yo traté de echarla de aquí en cuanto esta llegó a mitad de mañana. Aunque tuvimos una fuerte discusión se me hizo imposible sacarla, ya que alegando que tenía acciones, ella podría ocupar una oficina sin ningún tipo de problema. Algo que obviamente yo traté de impedir, pero esta dijo que convocaría una junta. Lo que obviamente llevaría a más problemas y
Capítulo 10RebecaEl día de hoy había llegado algo tarde al trabajo y solamente esperaba que el gruñón de mi jefe también lo hubiese hecho para que así no me echara una bronca por los minutos de retraso.Pues resulta ser que mi pequeño bebé se enfermó anoche, debido a que sus dientes estaban comenzando a salir y esto le produjo algo de fiebre. Afortunadamente para mí el médico me dijo que era algo que se le pasaba fácilmente, pero que tenía que vigilarlo y darle un jarabe para la fiebre. Luego de salir de la consulta a la que fui bien temprano, vine de inmediato a la empresa, en donde desde hace un mes. Dejo a mi hijo en la guardería al cuidado de una chica muy responsable, la cual me cae bien y se ha hecho muy buena amiga de Darío.Como iba tan deprisa, ni siquiera tuve tiempo de saludar a los que pasaban por mi lado y en cuanto llegué a la guardería que quise dejar a mi pequeño. Este no quería soltarme, desde anoche estaba más ñoño y llorón de lo normal, algo que era entendible po
Capítulo 11DamonEstaba en mi oficina hablando con Mateo, el cual acababa casi de llegar para traerme más hojas de candidatas y creo que esta vez escogeré una de entre las tantas que me trajo. No puedo seguir haciendo que este hombre siga buscando mujeres de esta manera porque en algún momento se volverá loco.Sin embargo, ambos comenzamos a escuchar como una discusión se desarrollaba en la parte de afuera de mi oficina y claramente se entendía que las que estaban discutiendo eran Daniela y Rebeca. Las cuales parecían dos fieras a punto de sacarse los ojos, pero aun así mi secretaria se defendió como gata boca arriba al igual que siempre lo hace conmigo cada.No obstante, la discusión entre ambas mujeres estaba tornando bastante intensa y temí que en cualquier momento Rebeca le saltara encima a Daniela y terminara pegándole por todos los insultos que ha recibido por ella. Además, si mal no entendí y escuché bien, la insensata de Daniela le había puesto la mano encima. Algo que obviam