Jack.
Creo que toque un tema sensible con Lidia ya que pude oler su nerviosismo y estos últimos días me ha estado evitando eso realmente me hace sentir mal, mi lobo se siente ansioso y quiere estar junto a ella, quisiera llevarla a mi territorio con mi manada preséntarla a mis padres, mi madre Dios no le he dicho nada debería mandar un mensaje o hacer una llamada, doy un largo suspiro.
-Oye tranquilo la volverás a ver solo dale un poco de tiempo para que se calme.
Max me intenta dar aliento pero en serio me siento bastante deprimido, estaba eufórico el día que la alle en el puente y cada día que pasaba con ella me sentía como niño en navidad pero ahora solo quiero ver que esté bien que tal si vuelve a intentar suicidarse, no podri soportar el perderla.
-Intentare verla hoy saliendo de la universidad me llevaré el auto.
Me levanto y tomo las llaves para salir del cuarto de hotel donde nos estamos quedando ya que la casa de lobos de está cuidad está llena, voy al elevador y presionar último botón para llegar al lobby, saco mi celular y marco a mi madre para informarle de esto, toma la llamada casi de inmediato.
*Jack hijo cómo has estado, Max nos dijo que se quedarían unos días más pero no nos dijo el porqué.
*Estoy bien mamá y te tengo una gran noticia por fin encontrado a mi luna.
*En serio, hay qué emoción por favor traila lo más pronto que puedas aquí a la manada, ya tengo ganas de conocer a la loba.
*Ese es el detalle madre es humana y estamos teniendo problemas.
*Pues que te puedo decir los humanos no sienten la misma atracción que nosotros que es casi al instante y ya le dijistes tu verdadera naturaleza.
*No se lo e dicho aún mamá no e encontrado el momento adecuado para eso.
*Jack dime cómo es ella
*Es un poco más joven que yo, está estudiando la universidad, tiene unos hermosos ojos, una sonrisa que es única me trae totalmente loco y quisiera pedirte más tiempo aquí en la ciudad, crees que papá se moleste.
*No lo creo hijo está justamente sentado enfrente de mí está ollendo la conversación y dice que se alegra mucho por ti y que no te preocupes.
*bueno madre después hablomos.
Cuelgo la llamada y el ascensor llega al lobby del hotel, me voy en el auto a la universidad, me parqueo cerca de la entrada principal y la reconozco desde lejos, viene caminando con su rostro lleno de tristeza y melancolía, viene caminando sola por lo que he visto no tiene amigos siempre está sola, veo que detrás de Lidia vienen 4 chicas y lo que observó solo me molesta, apreto el volante entre mis manos y un gruñido sale de ni boca, una chica rubia la empuja y la hace caer de cara al suelo donde la comienzan a insultar, me bajó rápidamente del auto, cruzo la calle para defenderla no me importa que sean mujeres claro no pienso pegarles pero por lo menos se las quítate de encima, no pienso dejar que la lastimen, una chica se atreve a darle una patada en el suelo eso hace que un gruñido salga de mi pecho y las cuatro mujeres voltean espantadas, por su aroma me doy cuenta que no son humanas son lobas de ciudad, al parecer identifican rápidamente mi aroma a Alfa y me miran con mucha sorpresa pero la chica rubia me mira directamente al rostro.
-Quién eres tú y qué hace un Alfa en nuestra ciudad.
-Tu hermano sabe quién soy niña, estoy aquí con su permiso, no quiero ver que le hagan daño a esta mujer de nuevo o se las verán conmigo.
Las lobas se miran entre ellas, la rubia me da un bufido y se van de allí, dirijo mi atención a Lidia que está en el suelo limpiándose las lágrimas de la cara y juntando los libros que se han salido de su mochila, siento la necesidad de abrazarlo, consolarla pero le debo de dar su espacio así que solo me agacho y la ayudo a juntar sus libros para después extenderle mi mano para que se levante del suelo, su mirada solo refleja tristeza toma de mi mano.
-Te sientes bien Lidia.
-Sí gracias.
Me quedo callado y me rasco la nuca un poco, me pongo un poco nervioso con Lidia y raro ya que por lo general son muy seguro de mí y para cerrar con broche de oro empieza a chispitear.
-Te puedo llevar en el auto hasta tu casa
Lidia mira el auto y asiente, esto me emociona la acompaño al auto y le abro la puerta, el viaje en el auto es tranquilo y silencioso, esta lluvia no parece acabarse pronto, miro de reojo a Lidia y me doy cuenta que está mojada así que me quitó la chaqueta y se la extiendo, Lidia la toma y se la pone para recargarse en la ventanilla y ver la lluvia hasta que puedo escuchar su voz.
-¿Por que?
-Disculpa qué cosa.
-Porque eres tan amable conmigo y atento sí muy apenas me conoces.
-Me da pena admitir esto pero no te quiero andar con rodeos, quiero ser lo más franco que pueda contigo.
Me estoy poniendo nervioso y la mirada de Lidia me asé cambian de color, tengo que calmarme o me transformar en el auto y sería lo peor que podría pasar, me detengo cerca de su casa y apogo el auto.
-Cuando te rescate en el puente lo hice con muy buenos intenciones, me asusté mucho al ver una persona intenta quitarse la vida pero cuando te tuve entre mis brazos y miré tu hermoso rostro me quedé realmente cautivado, con tu mirada sentí que me robabas el aliento se que apenas me conoces pero en verdad me gustas mucho.
Miro a Lidia y tiene la mejillas rojas se que esto es jugar con mi suerte pero ya no quiero estar lejos de ella y quiero poder tocar esos labios, coloco mi mano en su mejilla de forma delicada me comienzo a inclinar así Lidia, ella solo cierra los ojos y por fin uno nuestros labios en un tierno beso, siento que estoy en las nubes y lobo está extasiado con poder tocarla pero lo bueno de la vida acaba ya que el sonido de un claxon nos asé separarnos.
-Creo que ya me me voy.
Lidia sale del auto disparada no tengo tiempo de decir nada solo se va de mi lado, maldición un gruñido sale de mi pecho y mi lobo enfurece y comienzo a golpear el volante por la frustración para después dar un suspiro y recargarse en el, por lo menos no me rechazo el beso me muerdo el labio inferior al recordar el beso y doy un suspiro, me enderezó en el asiento y me doy cuenta de que Lidia a dejar su mochila.
Lidia.No puedo creer que me beso Jack, esto es lo mejor que me a pasado en mi vida de mierda, llegó a mi casa corriendo y entro sin hacer ruido hasta llegar a mi cuarto donde tomo una almohada me la coloco en la cara y grito por la emoción, dios bendito que acaba de pasar el chico que me gusta me beso, hay sus labios eran suaves me ubiera gustado otro pero ya es mucho pedir, tiro la almohada a la cama y me quitó la ropa mojada para ponerme una camiseta que me queda grande y cerrar la puerta de mi cuarto con candado, me inco sobre la cama y recuerdo ese lindo momento que tuve con Jack maldigo ese auto y doy un suspiro.-Lidia.La voz de Jack me asusta y me asé caer de la cama asia atrás, maldición mi cabeza creo que ya me quedé más tonta.-Lidia estás bien, déjame ayudarte.Jack me extiende su mano y me ayuda a levantarme del suelo, espera como entro a mi cuarto, lo miro con sorpresa.-Como entrastes.Se rasca la nuca y mira asia la ventana abierta, pero como entro tan rápido por allí
Jack.Me enfurece tanto la manera tan grosera y humillante en la que el padrastro de Lidia le hablo, salgo del baño dispuesto a darle la golpiza de su vida y llevarme a Lidia de su lado pero al salir del baño y ver la tristeza en su rostro mi colera desapareció al instante, solo quiero dale un abrazo así lo hago y la hago sentir mejor, se me ocurrió una idea para poder pasar más tiempo que con ella y funcionó miramos una película casi al final Lidia se queda dormida a mi lado, pare un bello ángel, un ángel que cayó del cielo y aterrizó en esta porquería y miseria de vida, como una persona sin escrúpulos puede tratar a una jovencita tan dulce asi, Lidia no le haría daño ni a una mosca, se ve tan tierna la rodeo con los brazos y la pegó a mi cuerpo e inhalo su delicioso aroma, ase que un ronroneo salga de mi pecho, pasó mi mano por su cabello se siente tan suave y sedoso, miro su cuerpo es delgada tiene algunos moretones en sus brazos y otros en las piernas,ya comprendo la razon por qué
Lidia.Después de que Jack se va me quedó recostada en la cama pero al último me levanta el impulso de ir al baño, me doy una ducha y me pongo ropa limpia ya que pienso salir a intentar conseguir un poco de dinero, me como la última revanada de pizza que dejamos anoche y salgo al vecindario, miro algunos céspedes altos eso vuele a dinero para mirar olfato, voy y tocó en las casas diciendo que si no quieren que les poden el césped, todos dicen que sí después voy con la señora Jenkins es la anciana que vive en la esquina de mi calle, le pregunto que si no tiene algo que yo puedo hacer por ella, me dice que si me manda por su medicamento a la farmacia maxco me entrega el dinero y la receta, lo malo que la farmacia maxco me queda en el centro de la ciudad, así que comienzó a caminar ya que me tardaré como una hora en llegar, después de caminar dos cuadras escucho como un auto comienza a seguirme, mirobde reojo y doy una leve sonrisa al reconocer el modelo y la placa es Jack, no puedo cre
Lidia.Ya casi es hora, mi padrastro llegó hace media hora, me asomé ligeramente por el pasillo y cómo lo predije toma los $50 y se largar, espléndido voy a mi cuarto y espero a que Jack, llega faltando 10 minutos, lo miro saltar la cerca, camina rápidamente a mi ventana, se ve tan guapo trae un pantalón de vestir y una camisa roja qué queda justa a su cuerpo trae dos botones desabrochados que dejan ver sus pectorales, me lo estoy devorando con la mirada Jack me da una sonrisa.-Lidia estás preciosa.-Gracias.-Te ayudo a salir por la ventana.Jack me ayuda a salir por la ventana y a brincarme el cerco dónde está su auto, estoy muy nerviosa porque el restaurante donde me trajo Jack es bastante elegante aunque ha pedido una mesa privada esto es demasiado elegante y derrochar demasiado dinero en alguien como yo, doy un pequeño brinco en la silla al sentir la mano de Jack sobre la mía, me da una tierna sonrisa.-Lidia que pasa no es de tu agrado el lugar nos podemos ir a otro si gusta.
Jack.Me voy de la casa de Lidia en contra de mi voluntad pero sé que debo de darle su espacio ya que esta noche ha sido bastante agitada y tiene muchas cosas que procesar, mi lobo me pide a gritos qué la saqué de ese lugar la lleve a mi territorio, que mate a ese infeliz malnacido que se hace llamar padre, no puede ser que una persona le haga daño a una chica tan dulce como Lidia que no dañaría ni a una mosca, el camino al hotel Max no dice ni una sola palabra se mantiene en silencio pero puedo escuchar como rechina los dientes ligeramente enseña de que tiene mucha molestia y al llegar a la habitación del hotel explota.-No puedo creerlo, cómo diablos se te ocurrió mostrar tu forma animal en frente de ella sí apenas la conoces y peor aún se te ocurrió matar humanos, qué no tienes miedo de que vaya a las autoridades o que la manada residente vaya en tu búsqueda.-No fue mi culpa yo no me busque los problemas, ellos nos agredieron primero y además Lidia lo a tomado muy bien.-Por ahora
Lidia.Después de mí aburrido fin de semana es lunes y debo de ir a la escuela, me miro al espejo me doy cuenta que mi mejilla está realmente morada y mi labio sigue un poco hinchado, busco entre la poca ropa que tengo una sudadera que tenga bastante gorro para que cubra bien mi cara, salgo sin hacer ruido de mi casa y me dirijo a la universidad mis clases pasan aburridas, algunas personas han visto las marcas en mi cara, me ven con pena, tristeza y otro con indiferencia, tengo suerte de no haberme encontrado a Tamara y a su trio de arpías que siempre la siguen como si fueran una bola de perros caminando detrás de una perra en celo, a la hora del descanso tomo mi mochila y camino a la parte de atrás de los edificios donde normalmente me encuentro con Jack, me siento bajo la sombra de un árbol esperando que llegue para darle la noticia que sí me ire con él pero quiero esperar a la graduación para tener mi título y no haber desperdiciado tantos años, Jack no a llegado y hace que me pre
Lidia.Durante la noche recibo mensajes de Jack que dice que me aliste temprano como si fuera a la escuela y a dos calles de mi casa estará esperando en el auto, me siento nerviosa pero emocionada de que alguien por fin se fije en mí, me levanto temprano en la mañana desayuno una manzana y me alisto como si fuera a la escuela, tomo mi mochila y me voy sigilosamente sin que mi padrastro se dé cuenta, como Jack lo dijo está esperandome a dos cálles, al verlo me siento feliz y me subo al auto sin pensarlo Jack me mira con una gran sonrisa y me saluda.-Hola Lidia cómo estás, no tuviste problemas en salir.-Claro que no mi padrastro estaba dormido todavía y dime qué haremos en el centro comercial.-Pues lo que tú quieras.Jack pone en marcha el auto y me lleva el mejor centro comercial de la ciudad, me pone nerviosa ya que este lugar es demasiado caro no quiero que Jack gaste tanto dinero en mi.-Jack estás seguro de que quieres pasar el resto del día aquí.-Sí porque.-No creo que este s
Lidia.Me despierto con mucho ánimo hoy ya que será mi segundo día que pasaré en la compañía de Jack, tomo mi mochila y salgo de mi cuarto pero está mañana me topo a mi padrastro en la sala que me detiene.-A donde vas.El miedo me invade al pensar que tal vez ya sepa que estoy suspendida pero debo de calmarme e intentar disimular lo mejor que puedo.-A la escuela papá.Me hace una seña con la mano de que me valla y salgo disparada como bala, siento que el corazón se me va a salir por la boca y las tiernas me tiemblan pero me calmo al ver el auto de Jack camino así el y al abrir la puerta veo un roma de rosas rojas, las tomo para sentarme y se me ilumina la vida al ver a Jack con una gran sonrisa.-Jack por qué siempre me sonríes.-Por que al verte me siento completo Lidia.Siempre me encantan las palabras de Jack me hacen sentir muy bien conmigo misma, me recargo en su brazo y le doy un beso en la mejilla.-Gracias Jack no solo por las flores sino por aparecer en mi vida.-Yo debía