‘Ji Yinfeng, ¿qué estás haciendo?’

Tang Ruochu estaba asustada por su expresión y luchó desesperadamente.

Ji Yinfeng la miró con una expresión retorcida, haciéndolo ver amenazante. “Tang Ruochu, no voy a permitir que estés con otro hombre.”

Tang Ruochu también se enojó mientras usó todas sus fuerzas para escapar de la fuerza de Ji Yinfeng. Al mismo tiempo, ella lo abofeteó. "Ji Yinfeng, ¿quién te crees que eres? Sal, no quiero verte".

Una clara marca de la palma de la mano emergió en la cara de Ji Yinfeng. Ese dolor ardiente lo tranquilizó.

Él abrió su boca para decir algo, pero Tang Ruochu continuó antes de que pudiera decir algo, “Ji Yinfeng, fui ciega por haberte amado estos últimos años. Tu amor es tan barato y sin valor que me repugna".

Luego de terminar, Tang Ruochu lo empujó a un lado y salió del cuarto.

Cuando cerró la puerta, Tang Ruochu de repente comenzó a temblar incontrolablemente, el miedo estaba escrito en sus ojos.

De no ser por la fuerte bofetada que le dio a Ji Yinfen