Shen Mofei entró en la habitación, y cuando el Abuelo Shen escuchó un movimiento, pensó que Wenjing había regresado, así que volteó la cabeza. "Wenjing, tú...". A mitad de camino, él se detuvo abruptamente.

En el momento en que vio a Shen Mofei, había un evidente rastro de alegría en los ojos del anciano, pero enderezó su expresión y preguntó fríamente: "¿Qué estás haciendo aquí?".

"Estoy aquí para verte".

Shen Mofei caminó hasta el final de la cama y se encontró cara a cara con el Abuelo Shen.

"Aquí para ver si estoy muerto, ¿verdad?". Cuando el anciano recordó que el mocoso apestoso no lo había visitado durante los últimos días, él se enfadó.

Estaba mal que él fingiera su enfermedad, pero este mocoso también era muy tenso, tanto que se negó directamente a verlo. Él estaba enojado y entristecido al mismo tiempo.

Shen Mofei frunció el ceño. "Abuelo, ¿realmente necesitas hablar con púas en tus palabras?".

El Abuelo Shen dejó escapar un gruñido pesado. "¿Quién crees que me obl