Capítulo XL

El sueño. Parte VIII

El joven mago se sentó junto al cadáver de su amigo, sus lágrimas se deslizaban por sus cachetes, cada una de ellas caían al suelo, el aura que rodeaba al mago era realmente poderosa y muy fuerte, pero claramente denotaba tristeza, pero también rabia, cada una de las personas que se encontraban en el lugar, estaba clara, todos empezaron a alejarse poco a poco, cada ser vivo cerca empezaba a temer, los árboles que no podían irse de su lugar, solo observaban la escena con tristeza.

- Él solo había salido a estirarse un poco, o a tomar el sol, no lo sé, solo sé que estaba teniendo mucho cuidado con lo que estaba sucediendo, desde el castillo se sentía un aura extraña, y sin muchas personas que puedan defender esta tierra de un aura tan poderosa, creo que Medivir quería ver lo que sucedía, pero no pudo terminar de salir, solo basto un rayo de luz blanca para acabarlo. Hasta ahora no existía nadie tan fuerte para acabar con una criatu