Emma
Ya pasaron ocho horas desde que Daniel me dejó en la gran puerta de la casa de Mike y Michael, y siento que algo me falta, me siento triste y más al saber que Daniel ni siquiera me ha llamado para decirme que ya está en casa, ¿algo malo le pasaría? ¿Algo pasó que ya no me quiere más? Siento un hueco en el vientre, debo de dejar de pensar en tonterías, pero, ¿y si ya se dio cuenta de que no soy tan linda como las otras chicas con las que ha salido?
Mike me da un empujó tan fuerte que me lanza directo al sillón más cercano, me siento en él a sumirme en mi desgracia, mi desgracia tiene nombre, apellido y se llama Daniel Clark.
—Tienes cara de perro abandonado —se burla Mike— Querida, no ha pasado ni un día desde que ese tipo de fue, me pone mal verte así, me das pereza.
—Ya te pareces a Julieta, ¿no entiendes que es mi mate? Hanna me pide a gritos estar cerca de él, es algo que no se controla, aunque quisiera dejar de pensar en él no
Miro de lejos la casa de juego que mis papás construyeron para mí, esta casa significa el amor que me tienen, la paciencia y sobre todo la preferencia entre hijos, aunque últimamente no soy el mejor de los hijos, sé que me aman. La casa fue hecha de madera por mi papá y por mí, la pedí con ansias, no recuerdo de donde saqué la idea o por que la quería. Mamá cocinaba y nos daba de desayunar mientras mi padre cortaba la madera, así fue por varios dias hasta que las piezas empezaron a encajar, yo me sentaba a ver la manera en que trabaja en mi pequeño gran capricho. La ubicación también la elegí, aunque al principio fue un gran no, está a solo cuatro metros de la orilla del río, significa un gran peligro para mí, para un niño que no pensaba en las consecuencias. En los buenos tiempos papá, Ben y yo jugábamos dentro y fuera de ella, hasta que
Aunque me hubiera gustado seguir durmiendo, mis deberes y responsabilidades me lo impiden. Tal y como estaba acordado, el preceso de construcción está en marcha, pero con un pequeño cambio, la casita se preservará y se cuidará. Bostezo ampliamente tanto que mi mandíbula truena, ayer después de hablar con Anthony y con Emma preferí quedarme en el bosque por lo menos dos horas más, pensé y pensé cada palabra de Antho, busqué lo bueno de quedarme con él hasta que me tenga que ir a la universidad, desde que decidí ir a estudiar mi tío se portó muy abierto al hecho de que estaré fuera de casa por más de 3 años, no se comportó negativo, pero ahora que sabe que es definitiva mis ganas de salirme del negocio no le ha gustado nada.Mi padre apoyará mi decisión y buscará alguna manera para que mi tío acepte mi decepción.Salgo de la cama con decisión, quiero supervisar de cerca el protecto, además no tengo mucho que hacer. Zack y Ethan no contestan mis mensajes, tampoco quieren sal
Conduzco hasta la casa de Zack, han pasado dos días desde que mi hermana cometió el error de decir que salía con él. No me ha contestado los mensajes ni tampoco las llamadas, no creo que estén enfadados conmigo como amigos, lo más seguro es que Anthony ya les haya dicho que quiero dejar de trabajar con él el tiempo que esté en la ciudad.Al llegar a su casa toco la bocina de la camioneta dos veces seguidas para que él salga y yo no tenga que bajar del automóvil, además no podemos hablar dentro de la casa porque está su hermana y su mamá y ellas no pueden saber ciertas cosas. Espero cinco minutos para volver a tocar la bocina, está vez la dejo presionada haciendo que esta emita un sonido largo y escandaloso. La puerta de la casa de dos niveles se abre y para mi mala suerte no es Zack, si no mi propia hermana.—¿Qué diablos haces aquí, Daniel— grita mientras camina hacia a mí —Por Dios Daniel, vienes aquí en un momento muy inoportuno. Te quiero pero arruinaste algo m
Tal y como el arquitecto Emir lo había dicho, la casa está casi lista, solo les llevó una semana con tres días, hoy, solo están haciendo unos cuantos detalles estéticos. Lo mejor de todo es que aún tengo tiempo para que todo esté listo para cuando Emma regrese, ayer en la noche me llamó y me aseguro que en dos días llega, Julieta, mi peor enemiga la convenció de que era justo quedarse más días, aún y cuando ella ya no aguanta estar lejos de mí. A decir verdad me conviene que ella esté fuera por más días, así puedo pensar en los detalles que faltan, por ejemplo los muebles, la decoración y la pintura. Emir me ofreció un diseño completo, donde incluye la decoración, me gustó, pero ésta sale de mis gustos minimalistas y sutiles, aún estoy pensando en ello, porque algo me dice que a Emma le encantará.
EMMA—Tú tú mamá iba de salida cuando llegué, deberíamos de vestirnos, me da un poco de miedo que venga y nos descubra—susurro mientras acaricio su abdomen marcado con la mano.—No te preocupes, tengo privacidad, si ella viene lo primero que hará es tocar la puerta, así que te pongas nerviosa— responde quitado de la pena, acepto sus palabras y sigo acariciandolo, su piel es suave y tersa, mejor que la mía.—¿No tienes tatuajes?— pregunto, lo único que le falta a este hombre es eso, tatuajes, su estilo es único, hay algo que te atrapa, sólo tenemos 19 años, pero sé que cuando tenga 25 o más será muy apuesto.—No— responde secamente —Me gustaría hacerlo, pero no ahora, aún no tengo algo en mente.—¿Te enseño los míos?— digo ingenuamente —Que idiota, ya los has visto— Daniel a recorrido cada centímetro de mi piel, es obvio que sabe que tengo tatuajes.—Los conozco, pero no sé cuál es su significado —comenta— el que más me gusta es é
El ruido que hace la puerta al ser golpeada, me molesta tanto que interrumpe mi sueño. A lado mío yace la mujer más hermosa del mundo, Emma. Me levanto con cuidado para no despertarla, se ve relajada y cansada, yo también lo estoy, las emociones que vivimos hace unos momentos nos agotaron metal y físicamente. Del suelo tomo mis calzoncillos y los sacudo un poco para después ponermelos, al igual que mi camiseta. Me observo en el espejo, tengo el cabello desordenado, arreglo un poco y abro la puerta con cuidado, Emma aún está desnuda, así que con mi cuerpo cubro el umbral de la puerta. La persona quien tocaba es nada más y nada menos que Zack y Ethan, muy mal momento para venir de visita.—¿Qué hacen aquí?— pregunto a la defensiva, los amigos que por días no me habían hablado ni contestado las llamadas están aquí, enfrente de mí sin pena alguna y sin intenciones de disculparse.—Nos mandó Anthony, Daniel— avisa Zack en voz baja,— así que andando.—No iré a n
—Claro que no le haremos nada, ¿en serio me crees capaz? Solo responde a mi pregunta, ¿Eres parte de esto sí o no?— No, pero, ¿tengo otra opción?—Sí —contesto desanimado, perdóname Emma, estoy tratando de ser mejor, pero no puedo— Recuerda que en unas semanas me voy a la universidad, no entiendo tu afán de tenerme contigo, sabiendo que no estaré por varios años.—Como te lo explico —camina hacia el bar, toma una costosa botella de tequila y se sirve —Mi reputación está en juego, nadie puede salir de este trabajo tan fácil, ni siquiera uno de los Clark, ¿sabes que haría si Zack o Ethan me dijeran que ya no quieren trabajar, que quieren dejar el negocio?— niego con la cabeza.— Iría por la hermana y por la mamá de Zack y las invitaría a comer, una rica cena antes de traerlas aquí y jugar con ellas, ¿sabes que haría después? ¡Obviamente —grita— las mataría! Y con Ethan sería igual, solo que para mi desgracia no tiene lazos sentimentales con nadie, si yo buscar
Llevo casi todo el día en la cama, no tengo ganas de levantarme ni de comer. El ánimo lo tengo por los suelos, ayer fue un día lleno de emociones, malas y buenas. Pasaron tantas cosas en solo unas horas, casi me vuelvo loco, por un lado Emma, pasamos un buen rato, descubrimos cosas nuevas uno del otro todo perfecto, hasta que Ethan y Zack llegaron a interrumpir la buena suerte y por el otro, Anthony, ese hijo de... fue el culpable de que ayer mi día se arruinara. Ni siquiera pude ver el cuerpo de Renata, sé que mi tío no se tienta el corazón en cosas como éstas, sé que la mató, así como yo he matado a las esposas de los enemigos de Anthony, hacerlo era algo normal para mí o al menos hasta que empecé a tener miedo, miedo a que la persona que estoy empezando a amar se entere de las cosas que hice y hago, algo me dice que no me lo perdonaría.Mi teléfono que está en la mesita de noche vibra, por la manera en la que lo hizo estoy seguro de que es un mensaje, reviso de quien