Los dos, Nat y yo nos quedamos estupefactos, nos han descubierto hablando de un tema que hasta hace unas horas era un secreto, mi madre nos mira atenta, con su típica expresión de advertencia, estamos en problemas. 

—Niños— insiste— ¿ME PUEDES EXPLICAR LO QUE DIJO TU HERMANA?— Grita desesperada —Daniel, no puedo creerlo, no puedo enteder como es que te relacionaste con Hania, por Dios— abro los ojos como platos, no creí que hubiera escuchado toda la conversación, pensé que solo había escuchado lo último. 

—Mamá — susurro con miedo, me temo que esto lo sabrá mi papá y quizá toda la familia. —Por favor no hagas una tormenta en un vaso de agua.

—Daniel no seas ridículo, esto es algo muy serio, ¿cuántos años crees que tienes 30? Ella es mayor que tú, sumando el hecho de que está con tu tío. —Deja el plato de comida que tenía en las manos en mi escritorio, justo encima de unos papeles muy importantes, corro a quitar el plato con miedo de que se hayan logrado m