¡Hoy se ha llegado el día! Espero sus comentarios para el siguiente fin de semana hacer otro pequeño maratón. Muchas gracias por leerme. Hoy y mañana se subirán mas capítulos, además de que son mas largos.
Punto de vista de Aria Aunque llamé a mi madre demasiadas veces, nunca respondió. Aunque busqué a mi tía Estela, jamás la encontré. Como si se los hubiese comido la Tierra. Al bajar del auto, la puerta es abierta por Douglas, al tomar su mano para bajar vuelvo a sentir esa corriente que en cualquier momento piensa consumirme. — Gracias —digo al bajar Douglas no me responde, desde hace dos días no hemos podido borrar esta barrera. No sé de que puede estar molesto el, la única molesta debería ser yo, pero ninguno va a ceder. Me siento sofocada. Cuando alzo la mirada, en la entrada del avión que es propiedad de Douglas, se encuentra la sonriente cara de el doctor MonteCarlo y la seriedad que caracteriza al doctor Fitz. Me siento un poco mas en confianza con ellos presentes. — ¿Cómo te sientes? —pregunta el doctor Fitz — Me siento bien. Creo que si servirá alejarme de todo el estrés de la ciudad —me acerco a ellos lo suficiente para susurrar— Sería mejor si mi esposo no viniera, es
NarradorEl viaje fue demasiado relajante a comparación de su anterior viaje a Suiza. Ahora Aria está bien de salud, dentro de lo posible, así que ambos doctores van relajados, tan relajados que están haciendo mucha platica a Aria.Desde que vieron que eso parece molestar a Douglas, lo hacen a propósito. Al menos el doctor Fitz, el doctor MonteCarlo siempre ha sido así con ella.Después de un largo viaje, logran llegar a Leknes, Noruega.— Wow, es un lugar impresionante —es lo que dice Aria cuando puede apreciar el lugar donde han llegado.— Cuando obtuve mi primer negocio millonario, compré una hermosa casa aquí. Suelo venir cuando necesito relajarme, además de que no hay señal aquí, así que suelo pensar en demasiadas cosas —Douglas se pone a su lado y toma su mano.Aria en ese momento se sonroja, pues no esperaba que hiciera eso. Por detrás, ambos doctores miran la unión de sus manos. Ambos saben que el matrimonio de ellos es una farsa, así que ven esos actos muy innecesarios.— Es
Punto de vista de Aria. Nuestro primer día en este nuevo lugar fue acogedor. El lugar donde nos quedaremos es un paraíso total. El día realmente pasó volando por diferentes razones, como conocer los alrededores de la gran casa de Douglas. No pude hablar con nadie, pues no tuve cerebro para pensar en algo razonable. Mi mente vagaba en los sentimientos que tengo con Douglas. En todo lo que hemos pasado hasta ahora, en como literalmente le debo mi vida. Por la tarde noche, intenté llamar a mi madre demasiadas veces, pero no resultó. No respondió. Eso en si es extraño, pero no podía hacer más, aunque quisiera. — ¿Cómo te sientes? Esa pregunta la he escuchado demasiadas veces, que ahora es muy cansado responderla, puedo apreciar que me tengan cuidado, pero no quiero que siempre que me vean eso se le venga a mente. — Bien, doctor MonteCarlo —respondí con una falsa sonrisa— ¿Dónde está? — ¿El señor Fraser? —me pregunta de regreso— Escuché que dijo que estaría en la oficina, tomaría un
Punto de vistaSeñora Green. Por años mi miedo mas grande ha sido perder a mi hija. Desde muy pequeña, aunque todos me decían y recordaban siempre que miraban a Aria lo linda que era, lo afortunada que soy por tener una hija bella, yo… a escondidas maldecía su belleza, pues prefería verla bien de salud a físicamente.Todo este tiempo siempre estuve para ella, no me arrepiento. Pero si me arrepiento del tiempo perdido con mi esposo. El siempre ha estado para mí, a pesar de la forma en las que nos enamorados, a pesar de que fuimos padres muy jóvenes, el siempre ha hecho cosas imposibles por nosotras.Ahora… verlo de esta forma, me duele mucho.No puedo describir lo que siento, con Aria fue diferente, porque no me arrepiento de nada con ella, con ella puedo decir que siempre di mi máximo esfuerzo. Pero con mi amor, no. No hice lo máximo posible. No lo hice y por eso no quiero perderlo.— Lo hemos recuperado —informa el doctor — Ha sido un paro respiratorio, su cuerpo se está negando a l
PUNTO DE VISTA DE ARIA. No entendí porque el doctor Fitz está usando ese tono de voz con nosotros. Parecía estar usando el sarcasmo, pero de forma hiriente. — ¿Seguiremos con qué? —pregunté No puedo permitir que esto pase, aunque tengamos una amistad, no se puede justificar que por eso piense que se puede meter en mi vida personal. — Con la farsa de un matrimonio perfecto. Se han paseado por todo este lugar presumiendo como si eso fueran. Ahora… estás hablando de tener hijos. ¿Qué m****a está pasando con ustedes? Miré al doctor Fitz sin entenderlo de todo, el doctor MonteCarlo supongo que no supo como reaccionar, porque está básicamente sin saber que hacer. Me mira a mi de reojo y vuelve su mirada al doctor Fitz. — No creo que usted deba opinar sobre mi matrimonio, doctor Fitz. — No tenemos derecho a opinar sobre lo que Aria quiera hacer, Fitz —dijo MonteCarlo — Ella se ve feliz y es lo que importa ahora mismo. No hay nada que podamos hacer. — ¿Cuánto dinero le debes? —me pregu
PUNTO DE VISTA DE ARIA.Douglas no miente, su seriedad puede confirmarme que definitivamente el si dejó morir a su madre. Cuando intento levantarme, el me detiene, obligándome a quedarme sentada.— Mi madre enfermó de cáncer —me suelta— En un principio, cuando apareció en mi vida, fue una total extraña para mí.— ¿No las conocías? ¿Trabajaba demasiado?— No, mi madre fue una mujer pobre que mi padre usó para divertirse. Al saber que estaba embarazado, le fui arrebatado, inventaron una historia al publico donde la dejaban como una mala madre, yo al principio la odiaba, pero cuando descubrí las mentiras de mi padre, comprendí todo. Fue cuando ella regresó a mi vida, siendo una sirvienta, pero yo ya había visto fotos de ella, por eso pude reconocerla.— Eso es impactante.—Aunque sabía que no era su culpa no estar conmigo, yo… no pude quererla como todos quieren a sus madres. Para mi esa mujer era mi madre, pero no había sentimiento alguno. Un sentimiento verdadero.— …— Cuando me enter
PUNTO DE VISTA DE ARIA Tres meses después — ¿Mamá? — Hola, bella —me responde mi madre— ¿Cómo has estado? Me levanto de la cama para no despertar a Douglas, que ayer ha llegado demasiado tarde del trabajo. Así que, con cuidado, me voy al baño. — Bien, mamá. ¿Ustedes que tal la están pasando? ¿Disfrutan esas vacaciones? ¿Cuándo piensan volver? Lo extraño demasiado. — Es la primera vez que podemos visitar a los familiares de tu padre. El está… emocionado, Ari. — ¿No está allí? Siento que tiene demasiado tiempo que no escucho su voz. He llegado a pensar que está enojado conmigo. — Ya sabes como es —la voz de mi madre se corta— Está emocionado por visitar a todos, hace años que no los veía. Pero yo siempre le cuento sobre tu vida, cada noche que nos acostamos. Siempre hablamos sobre ti, amor. — Suenas triste. ¿Han peleado? Puedo escuchar como pequeños sollozos. — Es que… yo ya quiero ir a verte, pero el… está cómodo aquí. Le he insistido mucho para irnos, visitarte, pero no se
PUNTO DE VISTA DE ARIAEl accidente en la carretera no dejó pensando en demasiadas cosas. El día, el tiempo, todo me está dejando en la boca un mal sabor. Un cuerpo en el suelo tapado con una sábana blanca me obligó a voltear a otro lado.— Que terrible —murmuré— Siempre que el clima nos sorprende, suele pasar un accidente —dice Douglas— ¿No puedes rodear, Antonio?— No señor, todos los caminos tienen tráfico. Por el tamaño de las filas, parece que este accidente ocurrió hace un buen rato.Douglas maldice en voz baja, yo solo lo ignoro. Algo que pone de mal humor a Douglas con facilidad, es que las cosas no salgan como el lo desea. Parece un obsesionado a que todo le salga perfecto. — Avisaré que llegaremos tarde —dice Douglas sacando su teléfono.— ¿Por qué no cambiamos la cita a otro día?— No podemos volver, estamos atorados. Ya hay demasiados autos detrás de nosotros, Aria.NarradorBlanca Fraser viuda de Fraser y madre de Dylan Fraser, avanza furiosa a la habitación de su tan