Capítulo 83
Ava
A Harry le subió la fiebre mucho antes de que le tocara la siguiente dosis de analgésico, se despertó llorando y no lograba calmarlo de ninguna manera. Jacob entró en ese momento y le pedí que buscara el termómetro en el bolso. Lo consiguió y le medimos la temperatura, el termómetro marcó cuarenta grados. Estaba ardiendo.
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Capítulo 84 Ava Mi instinto protector se puso en alerta en el instante que supe que la mujer que había entrado era Leah, no conocía sus intenciones y no iba a correr el riesgo de que se acercara a Harry. Lo saqué de la cuna y lo sostuve en mis brazos, él se quejó un momento, pero siguió durmiendo. —¿Qué haces aquí, Leah? —pregunté con desdén y ella alzó las cejas como si le sorprendiera que la hubiera reconocido. —Quería jugar un poco contigo, pero que más da —frunció los hombros con una sonrisa maliciosa dibujada en los labios—. ¿Cómo está mi bebé?, ¿lo has cuidado bien? —inquirió acercándose. —No finjas que te importa, para ti Harry solo es un medio para un fin. Dime a qué has venido, porque sé que no ha sido para saber cómo está él —enfaticé furiosa, era una leona dispuesta a proteger a costa de lo que sea a mi cachorro. —No sabes el placer que será para mí ver tu cara cuando un juez
Capítulo 85JacobMe resultaba increíble lo que estaba sucediendo, la posibilidad de que Leah estuviera embarazada de mí me estaba enloqueciendo. No podía ser verdad, no quería que lo fuera, pero si era cierto, si ella estaba esperando un hijo mío, no iba a desentenderme, era mi sangre tanto como Harry. Dudaba de si había sucedido algo entre nosotros aquella noche, por más que intentaba recordar si me acosté con ella, todo lo que venía a mi mente era beberme ese trago y despertar al día siguiente con Leah recostada en mi pecho. Si sucedió algo, no fue consciente.Maldije en voz baja levantándome de la cama, eran casi las tres de la mañana y no había conseguido conciliar el sueño. ¿Cómo mierda iba a dormir si Leah había desatado el infierno entre
Capítulo 86—¡Jacob! —grité corriendo hasta él cuando lo vi caer al suelo. Me arrodillé a su lado, puse su cabeza sobre mis muslos y lo llamé dándole golpecitos en la cara intentando hacerlo reaccionar, pero él no me respondía. Grité pidiendo ayuda y Carlo llegó un momento después desde algún lugar de la casa.—Estaba bebiendo agua cuando lo vi sostenerse del refrigerador, le pregunté qué pasaba y cayó al suelo antes de poder decirme algo —relaté cuando él preguntó qué había pasado. Carlo le tomó el pulso y verificó su respiración.—Sus signos vitales son estables, ¿ha estado enfermo? —preguntó volviendo a tomarle el pulso. —No estoy segura, lo vi tomarse unas aspirinas un moment
Capítulo 87JacobEsperaba que Leah no se presentara en la cita, pero llegó antes que yo al consultorio de Sara. Se puso en pie cuando me vio e intentó saludarme con un beso, pero retrocedí antes que pudiera hacerlo.—Esto no cambia nada entre nosotros —siseé con una mirada fría.—Cuando descubras que no miento, no dirás lo mismo —aseguró dando media vuelta y entrando al consultorio de mi hermana. La seguí con el ceño fruncido y las manos empuñadas, no quería estar ahí, odiaba que existiera la posibilidad de que Leah estuviera embarazada. Amaba a Harry a pesar de llevar su sangre, pero él no había nacido de ella, él tenía a Ava y ella lo haría un hombre de bien, en cambio Leah no estaba hecha para ser madre, todo lo que buscaba era meterse entr
Capítulo 88AvaNuestra cita sería en un crucero en un lujoso yate que navegaría las aguas del lago Míchigan bordeando las costas de Chicago. Me sentía escéptica de subir a un crucero porque quería estar disponible por si Harry me necesitaba, pero Jacob me convenció diciendo que nuestro hijo estaría bien, que Sara sabía atenderlo y que no iríamos lejos. Y la verdad era que lo merecíamos, no habíamos tenido muchas citas desde que iniciamos nuestra relación y estaba muy ilusionada de pasar tiempo a solas con mi guapísimo esposo. Usaba un saco gris oscuro sobre una camisa blanca sin corbata, un pantalón de vestir del mismo color y zapatos casuales.Subimos a la embarcación y nos dirigimos al salón de la terraza, el atardecer comenzaba a caer pintando el ci
Capítulo 89JacobEl juez Smith autorizó que se realizaran las pruebas de ADN que determinarían el vínculo biológico entre Leah y Harry en la audiencia de la demanda por paternidad que se celebró unos días después de nuestra cita. Sabíamos cuál sería el resultado y nos estábamos preparando para el juicio que vendría después, porque ella no se detendría hasta lograr lo que quería: pedir su custodia. Pero haría todo lo posible para evitar que ella tuviera algún derecho sobre él.La prensa de nuevo estaba detrás de nosotros, rodeaban nuestra casa y nos abordaban en cualquier lugar haciéndonos preguntas que nos negábamos a contestar, era un tema sensible que preferíamos mantener en privado. En cambio, Leah no tenía ningún problema
Capítulo 90AvaTodo pasó tan de prisa que no lo había asimilado cuando Sara llegó y me preguntó por Jacob. Las palabras no me salían, estaba aturdida, todo lo que hacía era llorar como una magdalena. Ella me pidió que respirara hondo y exhalara en un intento desesperado por calmarme, había asumido lo peor, pensaba que Jacob… no puedo ni repetirlo. Inhalé y exhalé varias veces hasta que pude salir de aquel estado de shock que me imposibilitaba hablar. —Hiciste bien en traerlo, Ava, llegaron a tiempo, estoy segura de que se pondrá bien —dijo Sara pareciendo confiada cuando al fin pude decirle que Jacob estaba en cirugía por un aneurisma cerebral, pero yo no estaría tranquila hasta verlo de nuevo sano y salvo.Paul y Jake llegar
Capítulo 91 Jacob Volví a casa luego de tres días en el hospital, Ava pasaba el día conmigo y Sara se quedaba en las noches porque ella debía atender a Harry. La operación había sido un éxito, pero mi recuperación tomaría de tres a seis semanas, dependiendo de mi evolución. Me sentía agradecido por seguir vivo, pero era frustrante pasar los días y las noches en cama o en el sofá, caminando solo lo necesario porque no podría hacer ningún esfuerzo físico hasta que el médico lo autorizara. Hablé con Ava para que buscáramos una empleada doméstica para que la ayudara porque tenía mucha cargar conmigo y Harry y decidimos contratar a una mujer recomendada por Tom, él era de las pocas personas en la que podíamos confiar. Era una mujer joven de procedencia árabe, llegó a Estados Unidos como estudiante de intercambio, pero contrajo matrimonio con un americano para obtener la nacionalidad y se divorciaron dos años después por diferencias irreconciliables. Todo eso me contó Tom sobre ella antes