¿Qué tal la historia?
LUCIAN.Después de ver a mi hija, Jack llego con información, me dirigí rápidamente a mi estudio. En el video de seguridad de la mansión de los James, se captó a un hombre sospechoso, quien ahora se encuentra bajo nuestra custodia. Algo me decía que de esta persona obtendría información del paradero de Catherine. Sin perder tiempo tomé las llaves del auto y salí en dirección a donde lo tenían mis hombres. Jack y Daniel venían tras de mí.Cuando entre al oscuro pasillo que conducía al sótano insonorizado, mi cuerpo se tensó. El aire a mi alrededor era rancio y mis pasos eran firmes contra el silencio, mientras me preparaba para lo peor. Abrí la puerta, vi a un hombre ensangrentado atado a una silla. La sala del sótano estaba vacía, excepto por la silla en el medio y una mesa en la parte de atrás, cuatro de mis hombres estaban parados a su alrededor. Eran mis hombres de confianza. En el momento, no reconocí al prisionero, pero cuando me miro, sus ojos estaban llenos de terror. Me acerqué
Mis ojos se abrieron de golpe cuando sentí un dedo sondear mi entrada. ---¡No! --- Grite, mi voz llena de horror. ---Hmm… ¿Esto es para mí, amor? ¿Estás mojada para mí? Horrorizada, me congelé, y el entumecimiento se apoderó de mí. Víctor me acuno bruscamente contra mis piernas, su palma presionando con fuerza contra mí. Me estremecí de miedo y asco. La sonrisa en su rostro hizo que mi estómago se revolviera tanto que pensé que me iba a enfermar. Todos los días eran dolorosos. Todos los días mi cuerpo era abusado. Todos los días mi alma se rompía un poco más. Todos los días deseé estar de vuelta en los brazos de Lucían y junto a mi hija. Y todos los días esperaba que él me encontrara. Pero no había venido por mí. Todavía esperaba que lo hiciera. Pero prendí que pelear solo empeoraba las cosas. Las lágrimas cayeron sobre mis mejillas, y no me moleste en limpiarlas. Víctor sonrió al verlas, y me dolió el corazón. Débil. Era muy débil. Estaba avergonzada de mí misma. Estaba sucia
Lucían. Cuando el auto se detuvo salí rápidamente. Esta vez Jack e Igor tomaron la delantera, mientras que yo me quedaba en la parte trasera. Jack abrió la puerta y entramos en cuestión de segundos, tan pronto como lo hicimos, las armas comenzaron a disparar y las balas volaban. ¡El cabron, estaba listo y no estaba solo! Los hombres de él rodeaban la casa, y me agaché rápidamente, esquivando una bala que podría haberme perforado la cabeza. Gruñí de frustración y disparé al hombre frente a mí, mi bala atravesó su corazón. No tenía tiempo para juego de niños. Me di la vuelta y disparé a cualquier hombre que se cruzara en el camino, balas en sus piernas, algunas en el cuello y otras en sus cabezas. A pesar de todo, Víctor no se encontraba en ninguna parte. Un cobarde. Por supuesto, no estaría en ningún lado. Cuando la mayoría de sus hombres estaban acabados, asentí a Jack e Igor. Buscaron en la casa mientras yo continuaba disparando al resto de los hombres. Vi a uno de ellos para
Jack Landong.Él se rompió.Vi a Lucían romperse justo frente mis ojos.Hemos estado juntos toda la vida, y muy pocas veces lo había visto en su momento más débil.Desde la muerte de nuestro padre, nunca lo había visto derramar lágrimas. Por supuesto no. Era el jefe de la familia. El hijo mayor. Era frío y despiadado.Lucían Landong no lloro.Pero en este momento se estaba rompiendo.No le importaba que sus hombres estuvieran mirando. Todo su enfoque estaba en Catherine.Lo vi llorar. Mientras mecía a Catherine de un lado a otro, abrazándola con fuerza, vi a mi hermano, el hombre que he conocido que era frío y sin sentimientos, llorar por su mujer.Me quedé congelado, solo a unos metros de ellos. Mis ojos se movieron hacia Catherine y mi pecho se apretó.Igor estaba a mi lado. ---Está en muy mal estado --- murmuro.Entendí lo que quería decir. Estaba mal, muy mal. Igor se dio la vuelta y lo vi quitarse la chaqueta.---Lucían, tenemos que irnos. --- dijo, colocando la chaqueta sobre el
Lucían. Una hora después, una mujer de aspecto inteligente entro en la habitación. ---Señor Landong --- dijo en un saludo. --- Soy obstetra. Con su permiso quiero revisar a la paciente — la mujer asintió hacia Catherine. ---¿Quién te envió? --- gruñí cuando ella comenzó a acercarse a la cama. Mis brazos rodearon a la mujer que por mi culpa había padecido lo que ninguna mujer debería. ---Lucían, debes tranquilizarte. Solo quiere ayudar a Cat, ella necesita atención --- Dijo Gianna con un suspiro. La simplemente me miró. Finalmente, lo permití, la mujer se acercó a la cama y se sentó junto a Catherine, y comenzó a examinar su cuerpo. Por favor que esté bien. Era todo lo que podía repetir en mi mente. No me perdonaría que algo malo le sucediera por mi culpa. ¿Cómo podría mirar a Bella? Unos minutos después, mis ojos se abrieron al escuchar la voz de la doctora. —Escucho latidos. No me di cuenta de que estaba esperando su afirmación. Tan pronto como escuche sus palabras, una sen
Lucían. Ya era el segundo día, mamá vino con la comida, pero yo no comí. Me quedé al lado de Catherine, abrazándola, acariciándola y esperando que despertara pronto. La gente iba y venía. Jack intento que me diera una ducha, pero me negué. Mama la cuidaría, mientras yo descansaba, pero empuje lejos a todos. Hable hasta que mi garganta estaba completamente seca y dolorida. Pensé que tal vez ella escucharía mi voz y se despertaría. Tal vez… tal vez … Tantos quizás y todavía esperaba. Incluso cuando todo parecía tan desesperado, todavía esperaba. Incluso cuando sentía que me estaba rompiendo y cortando lentamente desde el interior, todavía esperaba. Porque mientras tuviera a Catherine en mis brazos, podría esperar. Sería su esclavo por siempre. Me ardía el pecho y me froté el corazón con la mano, frustrado. El sentimiento, las emociones, el corazón, era una debilidad. Eso fue lo que alguna vez creí. Lo que alguna vez determine. Incluso cuando Franchesca se fue, no llore. Me reí
Catherine.Lo detesto.Aquel hombre con esos hermosos ojos grises lo odiaba.Odiaba que me hiciera sentir. Odiaba que su toque me hiciera sentir. No quería.Quería volver a estar insensible, pero él fue persistente, nunca me dejo sola.Lucían.Ese era su nombre. Mi salvador. Pero yo no quería que lo fuera.Quería que se fuera. Quería volver a no sentir nada.Había luchado por tanto tiempo. Luche contra él por mucho tiempo. Su voz, su toque, sus suaves besos, sus suaves ojos grises. Luche para mantenerme insensible.Pero cada día lo hizo más difícil.Sin embargo, todavía me preguntaba. ¿Es todo un sueño?Nada tiene sentido.Todo estaba borroso. Todo duele.El diablo ya no estaba aquí. Él ya no me estaba haciendo daño. Sin embargo, estaba en mi cabeza, aún continuaba dañándome, hiriéndome.Por fuera solo estaba él, Lucían.Si mis ojos estaban abiertos o cerrados, él estaba allí. Simplemente, no se alejaba, nunca me dejaba sola.A veces, no sabía cómo sentirme.Cuando lo escuchaba en mi c
Catherine. Estoy de vuelta en el sótano de Víctor, atada a la pared que le encanta usar. Él está detrás de mí, exprimiéndome la vida con sus propias manos mientras ataca mi cuerpo. Grito y le suplico que se detenga, las lágrimas caen rápidamente y mi suministro de aire se corta. Saca un cuchillo y lo apunta directamente sobre mi estómago. ¡Por favor, no lo hagas! --- grito. ---¡Catherine! ¡Catherine! Me despierto bruscamente, el sudor me empapa el cuerpo. Gris. Los ojos grises me miran con preocupación. Me está agarrando. Hay un silencio mientras nos miramos. Mi respiración sale en jadeos mientras me ahogo. ---¡Mi bebe! --- grito sin siquiera darme cuenta de que lo estoy haciendo. Toco rápidamente mi vientre para comprobar que aún sigue ahí. Fue una pesadilla, pero fue tan real… yo estaba allí… estaba de vuelta con él… Lentamente, envuelvo mis brazos alrededor de mí. ¡Tranquila Catherine! ¡Respira! No puede hacerte daño, ya no está. Él no volverá a lastimarte… Es lo que todos m