— El está caminando con la cabeza muy arriba... La mujer que me saludó en la entrada esta hablando con él. Y de repente el me está mirando; Con sus ojos azules, sus grandes cejas, su rostro tan bello y tan serio, como que nunca ha reído o ha sonreído en su vida. Me está mirando con un reflejo de desprecio, como si yo fuera una especie rara del mundo lejano.
Este hombre es muy guapo y muy alto; Me estoy diciendo en mi misma que no sea el mi jefe que no sea el mi jefe. De verdad se ve tan pesado.
De verdad, estoy tan sorprendida y incómoda con la presencia de este hombre; Sorprendida por su perfecta belleza, de verdad es más que guapo este hombre. Y incómoda, es por la manera que el me está mirando...
Ya viene caminando hacía mi, siento un enorme estrés, de costumbre no soy la que siempre está muy estresada, pero con este hombre parece que se me fue toda el autoestima, en realidad me quedé parada mirándole pasar cerca de mi...
Ni me saludó, de verdad este chico se ve como un niño malcriado a papa; Un arrogante sin límites... Yo no ando con ropas caras , tampoco con ropas baratas, pero no son las ropas que hacen a la gente, son lo que tienen adentro, como actúan en distintas situaciones, es aquello que hace a la gente.
Y este hombre se cree tan superior a la primera vista. El pasó cerca de mi con la señorita de la entrada; Me quedé ahí preguntándome si en realidad ese hombre es mi jefe.— Ya pasó tanto tiempo que estoy esperando y nadie vino a decirme nada, eso es una falta de respeto total hacia mi persona. ¿ Y este jefe no va a llegar o puede ser que esté hombre con su reflejo de arrogancia es el jefe? Ahí ando con mis dudas y mis preguntas sin respuestas.
¿Señorita, disculpa aún no ha llegado el jefe verdad por favor?— Dije yo a esta mujer que me recibió en la entrada.
Señorita por favor, perdona; Pero usted debe esperar un poco por favor. — Dijo la mujer.
Ya está bien señorita. — Dije yo.
Ella se fue tan elegante, yo también quiero trabajar para cuidarme y ser tan elegante como ella; Me gusta ver la elegancia de una mujer, como mujer es algo claramente normal y nadie me puede juzgar por ello y decirme que soy materialista por ello...
Por mientras que nadie me hace caso, estoy caminando tranquilamente adentro de este edificio tan gran, me puse a imaginarme ahí trabajando como secretaria con mis ropas elegantes... De ahí escuché una voz con mucho desprecio que me esta gritando señorita, señorita...
¿Señorita, perdona, pero quien le dijo que puede caminar así acá? Usted no está en un parque. —Dijo el hombre.
Tan sorprendida, yo miré a la persona que me está hablando como si yo fuera la sirviente de su casa.
Cuando miré, es el hombre que ví en la entrada con la recepcionista... Tan serio me está mirando, ya no se porque yo le cae tan mal...
Perdona señor, ví que es muy hermoso el edificio, es por ello que estoy caminando un poco para disfrutar de esta bella vista, todo acá se ve tan sofisticado. — Dije yo con mi voz de mujer asustada.—¿ Pero ya señorita, usted está acá para una entrevista laboral verdad? Por ello usted debe esperar en el lugar que le dijeron de esperar. — Dijo el hombre con un tono de enojo.
Perdona señor, no quise ser indiscreta.— Dije yo.
Así quiere trabajar con nosotros, si en el primer instante usted no puede hacer lo que le dijeron. ¿ Quién sabe si va hacer capaz de ejecutar bien su trabajo?— Dijo el hombre.
Señor, con todo el respeto; Usted no me conoce así que no le voy a permitir de poner en cuestión mi capacidad profesional. Caminar acá un ratito no es un pecado, es más, eso no tiene nada que ver con mis potenciales. — Dije yo con un tono firme.
Ya veremos. ¿ Se puede pasar en mi oficina por favor? — Dijo el hombre.
Pero señor, debo volver al lugar que me dijeron de esperar. ¿ Y usted quién es por favor? — Dije yo.
¿Quiere ser entrevistada o qué? No tengo todo el día señorita por favor. — Dijo el hombre.
No lo puedo creer, parece que este hombre guapo y arrogante es el CEO de esa empresa, parece que es el que yo estoy esperando. Hay cielo espero que no sea él; Aún que el me esta pidiendo de entrar a su oficina, me quedé con la esperanza que no sea el, el jefe.
— Señorita mi nombre es Mauricio Luis de La Paz, soy el CEO de esa empresa, por ello es de mi responsabilidad de hacer la entrevista de los nuevos trabajadores; Aquí queremos gentes trabajadoras, responsables, respetuosas, proactivas, puntuales, muy profesionales, que saben su lugar, y su oficio.
La empresa está al nivel internacional, estamos ofreciendo las mejores calidades en todos los funcionamientos de distintos áreas...
Contamos con más de 100 millones de clientes al nivel nacional y internacional. Nuestros socios son de varios países.
No tenemos problemas de trabajar con distintas personas de distintos países, porque lo que necesitamos son profesionales para trabajar con nosotros y no razas humanas...
Le estoy contando eso, solamente para decirle que aquí no aceptamos la discriminación racial, discriminación de género. Exigimos el respeto en su totalidad para cada uno de los trabajadores, ningún compañero de trabajo no tiene derecho al faltar respeto al otro. Y también no aceptamos relación amorosa entre compañeros de trabajo; Si un compañero está con otro, nos va a quedar de llamarle al recurso humano para firmar su carta de despedida.
La idea y la meta de la empresa son: Siempre ser profesional para dar lo mejor a nuestros socios y nuestros clientes. — Dijo Mauricio Luis de la Paz.
Dios mío, no puede ser, este hombre tan pesado si que si es el CEO de la empresa; Ya no hay nada que hacer estoy perdida. Ya que en el primer instante me está mostrando que yo le cae mal, ya voy mal. — Pienso yo en mi misma.
Esta bien Señor, entiendo bien, creo que la empresa tiene una trayectoria impresionante, será un honor para mi trabajar con ustedes. — Dije yo.
— Totalmente señorita, nuestra empresa está en el ranking de las más prestigiosas al nivel internacional. Así que esperemos que será posible para usted de trabajar con nosotros. — Dijo el CEO. Déjame ver su currículum, veo que es muy interesante, y que usted habla inglés también, usted tiene muy buena recomendación y antecedentes laborales. Me puede contar brevemente sobre usted por favor señorita... — Dijo Mauricio. Soy Sofía Macarena Moyana, como usted lo está leyendo en mis documentos. Soy una persona que le encanta trabajar y hacer bien su trabajo, estudié secretaria en un instituto muy respetable y conocido del país, hice mi práctica en la empresa internacional de Mpo, trabajé un año como secretaria en la empresa Mopo. Soy muy responsable, proactiva, no tengo miedo a los nuevos desafíos laborales, estoy siempre dispuesta para aprender y para crecer más en el ámbito laboral. — Dije yo. Interesante. Así que le h
— Amor ya voy, no quiero estar atrasada en mi primer día de trabajo. Ya te dejé desayuno mi vida, por favor toma tu desayuno antes de ir al taller. — Dije yo. Claro que si jefa tomaré con gustó el desayuno que me preparó la mejor mujer del mundo. Muchas gracias por tanto mi amor. — Dijo Adrián. Muchas gracias a ti mi amor por amarme, por hacerme tan feliz. Ya voy cariño, besitos. — Dije yo y le besé. Yo creo que hoy será mi mejor día, un día de éxito; Hoy es un paso a lo más alto, a lo más grande, donde yo tendré todo lo bueno tan esperado y deseado... La empresa no esta tan lejos de mi apartamento, pero igual debo ir temprano por el metro; Me encanta tomar el metro, aunque yo quisiera comprarme una moto. Tanto amo a las motos y a las bicicletas; Siempre me pongo a imaginarme en una moto, tomando el aire, sentir el calor del sol y dejar fluir sobre mi cuerpo el pasaje del viento. Cuando uno anda en moto, solamente felicidad y libertad siente
— Está bien amorcito, no te quiero chantajear hombre wey... Pero estoy cansada de ser tu segundo plato... Tú y yo estabamos muy felices juntos, y yo no se porque tenías que andar con esta mujer. Yo soy todo tuyo cariño, yo puedo darte más que esa mina esa.— Dijo Jessica. Tranquila cariño, yo no me voy a quedar con ella por mucho tiempo. Tienes que esperarme un poco mujer, si me quieres, entonces tienes que tener paciencia y esperarme; Esa tonta ingenua la estoy usando por un ratito cariño. Y luego tú y yo iremos a Texas para pasarlo de maravilla amor. Ven acá en mis brazos cariño. — Dijo Adrián. Y los dos sonríen... Está bien papasito... — Dijo Jessica. Y se están besando... Pobre la señorita Sofía, este patrón es un imbecil y un hipócrita. Yo me gustaría tener una mujer tan trabajadora y luchadora como Sofía. — Dijo Nicolás. Por mientras en la oficina... — Así que señorita Sofía usted vio todo en el edifi
— Ahí ando en el metro para ir a mi casa, de repente me siento tan deprimida por mi primer día de trabajo, parece que me estoy focalizando demasiado en este hombre.. Lo único que debo hacer es focalizarme en mi trabajo y hacer lo bien; Me doy cuenta si me quedé en el comportamiento de este hombre nunca estaré bien en este trabajo, nunca estaré bien en mi vida porque el estrés me va a llenar de toda parte y me voy a quebrar en la sombra de la depresión... No quiero ser una mujer deprimida, depresiva; Es lo último que quiero en mi vida. Lo que quiero es vivir, quiero estar bien, quiero estar feliz, ya que le vaya al infierno este hombre. Yo no me voy hacer caso desde ahora y adelante. Hola mi amor, bienvenida a casa. ¿ Como te fue en tu primer día de trabajo? Ya llegué antes de ti, hoy no había mucho trabajo en el taller. Te hice el almuerzo cariño. — Dijo Adrián. Hola cariño. Estoy bien gracias, todo fue muy bien. Ah si me hiciste el
— Amor despierta, cariño despierta por favor. Debes ir a prepararte para ir en el trabajo. — Dijo Adrián. Ah sí el trabajo. Ya se me olvidé de eso cariño, y yo que me siento tan bien en mi cama. ¿ Por cierto que hora es? — Dije yo. Son las 6 a.m. de la mañana amor, vamos tienes poco tiempo para prepararte y para llegar a tiempo al trabajo. — Dijo Adrián. ¡Ya okey amor! Me voy a prepararme ahora mismo cariño. — Dije yo. Esta bien cariño. Te hice el desayuno mi amor. — Dijo Adrián. ¡ Ah si mi amor! Muchas gracias por ello, eres el mejor.— Dije yo. De nada mi vida, ya levántate ahora mujer. — Dijo Adrián. Esta bien jefe. — Dije yo. Y se sonríen... — No se si eso ha pasado a otra persona, cuando uno anda con muchas ilusiones por algo, y luego viene alguien o algún obstáculo que te hace perder toda la esperanza. Yo me siento tan desanimada, caminando hacia la entrada de la empresa, el primer d
— Este chico Héctor, no se a dónde salió, resulta que ahora me esta pidiendo de mentir a mi novio. Héctor es un chico de tamaño normal, con un estilo normal, sus ojos de color café, su cabello corto, se ve muy elegante con su traje, es un poco afeminado; Se puede ver su gustó por la moda, definitivamente Hector es un chico guapo y gay. Me pregunto por qué los chicos tan guapos son tan gays. Ya le veo tan simpático, pero el problema ahora con el es que me esta pidiendo de mentir a Adrián. No se como haré para mentir a Adrián, pero igual tengo mucha curiosidad sobre este lugar que me estaba hablando Héctor, con su tono de contarme sobre el lugar, todo suena muy interesante. De todas formas, creo que no será un pecado si iré en un club con alguien sin Adrián, como dijo Héctor debo tener mi espacio personal, voy a empezar con esto; Ir a este club sin Héctor. — Ahí ando en mi break. Hay mucha gente en el espacio, de verdad esta empresa es muy g
— Yo se en la vida no podemos agradar a todo mundo, siempre harán personas que te harán sentir que eres la peor persona del mundo. De igual forma harán otras que tomarán sus tiempos para aprender a conocerte, para aprender a apreciar lo que uno tiene a ofrecer al mundo. En toda esa etapa; Lo que veo es que lo importante es amarte primero, aprender a conocerte así no te afectará tanto o no dejarás que te afectará tanto el mal comportamiento de lo demás hacia ti.Ahí ando en mis pensamientos, ya los chicos se fueron a sus oficinas, y yo estoy caminando para ir a mi oficina; De repente escuché una voz tan dura que me esta nombrando. ¿Señorita por favor, usted puede pasar en mi oficina? — Me dijo Mauricio con un tono muy seco y serio. Si señor, díganme por favor. — Dije yo. — Miré, le quiero aclarar algo; Yo no tengo tiempo para recordarle de su trabajo señorita, de lo que tiene que hacer y cuáles son sus obligaciones en esta empresa. — Me dijo M
— Miércoles, el día que más amo en la semana, ahí me estoy tan preocupada para ir en mi trabajo para afrontar de nuevo a mi gran obstáculo que es mi jefe... Ya estoy lista, ya estoy dispuesta para afrontarlo, para afrontar a lo que sea. No me importa nada, desde ahora y adelante quiero luchar por mi bienestar, quiero estar feliz; Si yo Sofía Macarena Moyana quiero estar feliz en este mundo, es ahora o nunca. Yo sé que no tendré otra oportunidad para ser feliz después de la muerte, así que debo vivir mi vida y estar muy feliz en ella, yo sé que no tendré otra vida si no tendré otra; Ahora si que si yo sé que no volveré en la tierra después de mi muerte, así que voy a luchar por mi felicidad en contra de todos los que estarán como un obstáculo en mi camino. Aún no ha llegado Héctor Adrián en casa, tampoco me ha llamado; Ya no importa, puede ser que esta ocupado con su primo. Yo no le voy a molestar.—Así pienso yo. Una hora más tarde... Bienv