Isabela Sergio ha planeado una boda de pies a cabeza, pero creo que se ha ganado el corazón de su planeadora de bodas, la cual está obsesionada con que tengamos toda la buena suerte del mundo. Una hora más tarde, estoy vestida, y lista para casarme de nuevo con Sergio, y la verdad, no he necesitado sentarme a escribir para saber qué es lo que quiero comenzar por decirle. Tenemos el día más hermoso, un viento entre cálido y refrescante me golpea en cuanto salgo hacia el exterior. Veo a Sergio el cual sonríe y se acomoda el saco nervioso como si pudiese escapar o si estuviese dispuesta a perder toda la felicidad que siento en este momento. Yo me pongo a su lado y él me da un beso en la mejilla. El padre nos toma de la mano y comienza con una oración para la salud de nuestra familia, nuestra paz y nuestra unión y nos recuerda que el amor es la base de todo. En italiano nos pregunta si hermosa leído la biblia. —Claro—respondo en su idioma. Los dos vemos a Sergio. —Bueno, uno que otro
Isabela La comida que nos han traído está espectacular, Sergio se ha lucido con todos los detalles, la verdad, cuando me dijo boda, pensé que iban a ser unas flores, un brindis y a la cama, pero, ha contratado una banda para nosotros, el mejor vino, una de mis películas románticas de todos los tiempos favorita. —Já, nadie se va a creer que viste Barbie en el lago de los cisnes en tu boda. —Las cosas que hago por ti. Es para que vean lo poco que me respeto —los dos nos reímos, y yo sigo comiendo la mejor lasaña que he probado en mi vida, con un pan de parmesano buenísimo, todo por dios.—Pienso que no voy a poder hacer nada más que dormir después de esto. —Está muy bueno, pero, planeo bailar contigo hasta que se te baje.La película tiene el mismo final maravilloso que siempre, pero esta vez al acabar el cielo se llena de pirotecnia. Se dibujan una I & S, se llena de colores y nos dan un show maravilloso. Le doy un abrazo a mi esposo y le agradezco por hacer de la noche el momento m
Isabela Sergio no encuentra las palabras y se vuelve a tambalear mientras se pone en pie. Quita nuevamente la mano y siento un impulso de golpearlo, pero no lo hago. —Isabela, he hecho demasiado y sabes la ley de Murphy. Pongo una tina para no hacer más reguero, le chorreo el suero fisiológico, encuentro otro vidrio y antes de poder decir nada Sergio ya lo está sacando con una pinza. —No es nada, tengo entrenamiento militar. —¿Tienes sensibilidad en el pie?—pregunto. —Mi amo sí, pero no puedo vivir con un vidrio ah dentro, ella más suero—le pide y luego se echa yodo como si nada, pasa un algodón y abre un kit de suturas. —¿Quieres que lo haga yo?—¿Dónde aprendiste?—Fui misionera, cabrón. —Cierto. No gracias, esto es como hacerse cosquillas a uno mismo, si me lo haces necesitar lidocaína y tener que reposar. Yo voy a ordenar la casa y le dejo haciendo lo suyo. Sergio da puntadas muy bonitas y con costo acepta mi ayuda para ir a su habitación.Evidentemente, le voy a dar espa
Sergio Me mantienen observación un día más y me realizan todas las pruebas posibles para realizar una evaluación de lo que es menor para mí, el parche que ofrecen en este hospital es muy pequeño y discreto, pero, llevarlo subdérmico quita una responsabilidad de estar cambiando de un lugar a otro el sitio de punción. Yo converso toda esta información con Arturo quien me explica que tengo que hacer lo más cómodo para mí, pero el implante sigue siendo algo experimental y puede fallar en el peor momento sin responsabilidad médica, el parche de la casa farmacéutica que me ofrecen es muy bueno y ya está probado. —¿Por qué están trabajando en esto aquí?—Los italianos se alimentan de muchos carbohidratos y en esas zonas, se ha notado avance rápido y mucha resistencia a la insulina, los factores se basaban en alimentación, y dificultad de adherirse al tratamiento. —Está muy bien que trabajen en esto. —Claro. Sergio, has vivido una vida excepcional, sabes que hay gente que no tiene para la
Sergio Isabela se ha estado esforzando por ser una buena esposa. En serio que sí, pero, cada que la veo cocinando o preparando cosas libres de azúcar, me preocupa, sin chiste u obsesión, quiero que mi esposa me ame y no solo me cuide. Le abrazo por la espalda y le acaricio el abdomen. —Estoy probando esta receta Sergio —Le doy un beso en el cuello y otro en el hombro. —Dios, depáranos un hijo para mentirle y burlarnos de él. —Sergio, ¿cuál es la crisis del día?—Somos aburridos. —Mi amor, hemos tenido como diez lunas de miel, o sea, hemos recorrido el mundo juntos, hemos follado, hemos practicado deportes de riesgo, nos hemos reído, estas pueden ser unas vacaciones calmadas, de gente adulta. —Isabela, estas son nuestras últimas vacaciones antes de las elecciones, es el inicio de nuestro matrimonio, quiero divertirme, quiero saber que te hice feliz y que vamos a tener un buen matrimonio. —Mi amor, el matrimonio no es la boda ni la playa o el sexo maravilloso en la ducha. Esto e
Isabela Como era de esperarse, mi marido no se ha acoplado bien. Sergio es una persona espontánea, de vivir mucho el momento y a veces la gente es más estructurad como Karim, el esposo de Frankie, o van bajo un presupuesto como Paco y Marco, Sergio siente que se asfixia, porque practicamos senderismo y hubo una obsesión más fuerte que la suya por seguir el mapa y a la hora de detenernos a cenar, había un plan de ir a un restaurante, y paco no acepta caridad. El ambiente es tenso como resultado porque todos terminamos lleno a cenar a donde se nos dio la gana, pero todos estábamos molestos, sobre todo Karim que más que aceptar caridad, le gusta que todo se lo den y en modo VIP y no devuelve la cortesía ni con una flor del camino. Veo a mi esposo y sonrío. —Eres una mala, mala, mujer. —Soy la mejor, mi amor hay que entender a la gente. —Bueno, los entiendo a todos, pero he soportado chistes sobre mi sex-appeal y he seguido planes los últimos dos días. —Mi amor, tú eres un macho alf
Sergio Como mi esposa ha estado obsesionada y preocupada por mi salud, ha sido fácil organizar con nuestros amigos una reunión sorpresa. El tío Alonso tiene algo por las playas privadas y no quiero saber cómo o por qué tiene una en República Dominicana, así que, Mily organizó el vuelo, sus hijos, el préstamo de la playa privada, modificaron sus agendas mientras yo el que Isabela estuviese distraída como para o preguntarse por qué nuestros amigos se dejaron de interesar por nosotros, esa era la intención tras ir de viaje en un crucero, sin embargo, no todo salió como esperamos y puede que haya sido un viaje de tensión en lugar de relajación. Isabela está rebosante de felicidad, piden una botella de champán para celebrar nuestras vacaciones de amigos y les recuerdo que de nuestra luna de miel, todos ríen y elevan sus copas. —Por los recién casados—brindan nuestros amigos. Todos chocan sus copas y decididnos poner algo de música para ir conversando, todos tienen algo que contarnos, p
Isabela Sergio y yo hemos estado volviéndonos locos el uno al otro con ser aburridos o no, pero para la paz mental de mi prometido no lo somos. Isabela y Sergio son dos personas maravillosas que han viajado, se han aventurado, comido, riquísimo, conocido demasiado y nos conocemos el uno al otro como nadie. Ahora, hemos pasado los últimos seis meses más estresantes, desde terminar nuestra relación, perseguirnos el uno al otro, comprometernos, la campaña política y casarnos. —Sergei. —Dime. —No somos aburridos, tú y yo tenemos una vida juntos, tú y yo, tenemos una vida. —Le enseño a Pri y Samuel acostados en una hamaca tomando pipa. —Esos dos llevan casados desde que se conocieron. Drake y Mily tienen demasiados hijos y Pablo y Amarilis se están conociendo. Entonces, es evidente, que ellos no han viada como nosotros. —Mi amor, amarilis y Pablo están echando un polvo en el agua, Drake y Mily se están besando y Pablo y Pri están siendo ellos, me refería a eso de dormir en la luna de