Sergio
He arruinado nuestro aniversario en menos de diez minutos. Perdí su regalo, la llamé gorda y sugerí que está embarazada. Isabela que todo se lo toma a broma ha prometido hacerse una prueba, pero, me ha preguntado de todas las formas si está gorda. No lo está, está perfecta, es guapísima, es la mujer más divina del planeta y desde que tiene los gimnasios, ha sido una locura, se pasa el día haciendo ejercicios y comiendo sano. Es imposible que engorde. —Solo para dejar claro este asunto, Isa. Yo te amo así de guapa como estas, te amaré embarazada de nuestros hijos o los del lechero y te amo gorda porque no tienes tiempo, fuerza o ganas para ir al gim. Ella se queda en silencio y finalmente abre la puerta del baño. Se ve espectacular, lleva el pelo sobre los hombros y una ropa interior que estoy seguro no es legal en la mitad del mundo, pero disfruto de la vista. —Estás guapísima—digo y ella sonríe.&nbRecuerden comentar, que cuando no comentan siento que nadie leyó y que mejor les doy chance.
SergioLa reunión continua con el ambiente alegre de ver crecer a alguien a quien amas, la pequeña Olimpia que no solo roba nuestros corazones, cautiva nuestras mentes y además se atreve a vaciar nuestras alacenas para dárselas a los demás.Sus papás nos reúnen a todos alrededor de la mesa y el pastel, su mamá le acaricia el pelo y el tío Sebastian nos recuerda lo mucho que quisiera tener un tercer hijo, pero no satisfechos por el resultado cargado de energía y creatividad en los gemelos, se pusieron en busca de la niñita perfecta y lo lograron, con amor, paciencia y mucho mejor de sus expectativas.—Te cambiaron en el hospital—acusa Bastian a mi hermana.—Sin chiste, han notado los gemelos son como míos—les señala Cash. — y Olimpia es la hija perdida de Alonso.—Sí, es que ahora todos compartimos los mismos genes.—No, pero, cuando estás en un ambiente sueles imitar el comportamiento de las personas a las que admiras.Olimpia
IsabelaEstoy en casa de Mily con Love y Priscila metidas en la piscina, Mily obsesivamente les pasa bloqueador a los chicos y nosotras tres les miramos. Paris se ríe de su mamá, pero le dice que le hace falta por aquí y por allá, nosotras reímos cuando su hermano le empuja y se aparta de su madre.—¡Estoy cansado!—Prince empuja a su hermano y él ríe. — Deja de inventar.—Mami no quiere que el sol te coma la piel.—Me veo guapísimo más moreno. Déjame a mí con el sol.—Sí, sí, que ya se tiren mis hermanos—pide Love y ellos se lanzan a la piscina, Mily rié y les sigue, nos mojan por completo y el flotador se nos tuerce. Los chicos nadan hacia su hermana y le proponen un juego. Mis amigas me miran y Priscila no aguanta la risa antes de confesar que mi papá está más que seri
Isabela Los siguientes días me los paso como loca buscando cosas para el partido político de Sergio por ejemplo en todo lo necesario, desde el nombre, hasta los colores. Sergio está demasiado emocionado y agradecido y se pone a trabajar en las personas que quiere reclutar para ellos y sorprendentemente políticos de renombre, gente nueva para los cargos, muchas caras frescas, pero preparadas para trabajar duro están dispuestos a hacerlo junto a él.La cosa es que el miedo de Sergio es muy grande y cuando vamos con uno de los mejores estadistas del país, Carlos Díaz, se queda sorprendido al conocer las probabilidades que tiene su partido.—Hay un 40% de ausentismo que evidentemente está en aumento. Hay una población fiel a los Westborn y otra que no se identifica a ninguno de los partidos. Tú tienes el poder de conquistar a los fieles de los Westborn porque tienes
Sergio Mi tío Cash me dio un consejo a los dieciséis después de escucharme pelear apasionadamente con la mujer que una vez fue mi esposa. El amor hay que cultivarlo y cuidarlo. Es un excelente consejo. Después de los últimos días en que Isabela ha bajado un poco la guardia con la privacidad extrema, he decidido recompensar nuestro amor con una noche de romance. Esta noche cierro un restaurante para cenar con mi novia. Isabela se muestra sorprendida cuando llego a nuestra casa con una limusina. Ella me mira en cuanto subo los escalones principales de casa, sonríe y me ajusta la pajarita.—Estás espectacularmente guapo.—Gracias, tú, le quitas el aliento a cualquiera.—Los dos sonreímos y me atrevo a besarle cerca de los labios, Isabela se gira para ir por su bolsa, pero sé que la ha dejado a propósito porque es todo menos olvid
IsabelaLa tierra del sol, como se llama el precioso, impresionante y rico en petróleo, con un desierto impresionante rodeándolo y una cultura única y muy especial en al que todavía se cree que el rey es un descendiente directo de Dios. Todo eso se vio afectado cuando el rey y su esposa fallecieron y a cargo quedó el segundo heredero al trono Isam, el esposo de mi tía Eleonor, y la verdad, de él se esperaba todo lo malo, como el delicado tema de no tener una esposa local, pero de Kamal, el hijo del verdadero rey solo se esperaba lo mejor. Sus padres no habían arreglado un matrimonio para ninguno de sus cuatro hijos, pero, el pueblo que tanto ha apoyado y anhelado la llegada de Kamal al poder.Cuando llegamos a casa, mejor dicho al castillo, me encuentro con mi tía tomando las manos de sus niños pequeños los cuales están asustados ante el panorama. Mis primos están escondiéndose detrás de su mamá y voy a brazales de primero. En el otro lado del salón est
IsabelaTodas las miradas están sobre mí, mis primos pequeños se ven más tristes que nunca, su mamá les pasa la mano por el pecho y los acaricia con lentitud. Sergio se mantiene en medio de Lorenzo y Kamal, mientras Isam tiene a cada lado a uno de los hermanos de Kamal, Elías está preparado para una segunda ronda y Max está tan triste que no puede ocultar las lágrimas o la decepción.El dinero puede destruir a una familia, mucha gente lo relaciona con la falta de ello, pero, el exceso de dinero y el poder que viene con ello, la responsabilidad que incluye un reino, la fortaleza mental, la falta de sueño o el miedo constante de arruinarle la vida a miles de personas—Comamos juntos como las familias normales, intentemos disfrutar de la oportunidad de estar juntos. Ustedes invítenos a comer algo rico y Sergio y yo vamos a trabajar en soluciones.—Me voy al desierto —responde Kamal.El desierto no es exactamente el lugar para el prínci
SergioHay hombres que creen que entre hombres nos entendemos, pero, entre más escucho al tío Isam hablar y a Kamal justificarse, no sé a quién darle la razón. Me quedo viéndoles y ellos a mí en espera de algún comentario.—No, no puedo decir nada. Creo que tienes una responsabilidad con tu país, lo has sabido toda la vida lo has querido toda la vida, pero, no haces nada para merecerlo, y tú, has sabido toda la vida que este puesto no te pertenece, pero lo haces bien y sé que equilibrar la familia y el rey debe ser difícil, pero, por qué no intentarlo mientras Kamal madura.—lleva diez años madurando y nada —reprende Isam molesto. —No es sostenible para mí. Elías está por entrar a la universidad. Farah quiere conocer un poco el exterior, Maxi es un niño que no se siente cómodo con los ataques del
SergioEn cuanto llegamos conversé con el jefe de seguridad del palacio, me mostró las salidas conocidas por el público, por los empleados y unas que tuvieron que clausurar por el deterior a lo largo de los años, puesto que al llover la tierra se enlodaba y era demasiado difícil el tránsito por el lugar, así que terminaron desarmando el puente que les conectaba.Por eso de los quince hombres que traje conmigo coloqué a dos camuflados en cada una de las salidas con el propósito de ayudarnos ante cualquier emergencia, todos aseguran no haber visto nada a la entrada, pero están seguros de que la persona que hizo eso iba de salida, revisaron las salidas a lo largo durante rondas de 2 horas.—Estén listos, tienen que salir, necesito que los entrasen, no cuentan con su presencia. Hagan todo lo posible por retrasarles o seguirles.—Salida este, señor&m