Sergio 

Apenas regresamos de la playa tomé una ducha y me cambié a ropa más formal, de camino ya había hablado con las hermanas de Arabela, Laura, Mariana y Celeste, las tres acordaron reunirme en casa de Laura, así que me despedí de mi familia con discreción y me reunió con ellas. Las dos menores estaban evidentemente molestas conmigo y su hermana mayor estaba en la misma posición que sus padres, su salud debería ser un problema de su familia y no mío. 

—He intentado todo por mantenerla viva, por regresarla a nosotros y me parece horrible desconectarla. 

Sus hermanas me dicen que tengo razón he trabajado durísimo, pero hay cuatro años de diferencia, ellas se han casado, tuvieron hijos, tienen una vida que Arabela no conoce y a la que con todo el esfuerzo que podamos hacer no va a conocer porque todo se lo perdió y porque su cuerpo nos está dando un mensaje. 

—Su mamá me lo pidió, me pidió que no la desconectara y ninguno parecía listo en el momento,