Me sentía como un ratón entre dos paredes sin salida. Yo ya estaba en la habitación. Y ella estaba solo con un encaje blanco transparente. Mientras me hablaba ella se desnudó. Sabía perfectamente lo que sucedería después.

¿Qué rayos me pasa? Me sentía sediento. Sentía tanto calor. Me moví hacia la ventana. Mi mente estaba nublada. En la mesa de noche había un vaso con agua. No pensaría que esta mujer podría poner algo en el agua, que en algún momento ella bebería.

Con mi ingenuidad lo tomé. Minutos mientras conversábamos y me oponía a su idea. Sentí que mis pies eran muy pesados y mi cabeza sostenía un bloque de tres toneladas. Mi visión estaba borrosa aunque trataba de moverme, la habitación daba vuelta. Me senté en el sofá para poder tomar control pro mis intentos fueron fallidos.

_¿Qué pusiste en el agua? Jade.

_ Nada, pero también pensé que te ayudaría a calmar los nervios!.

_¿Qué? A... a calmar mis nervios cuáles nervios hablas ¿Drogaste el agua cierto?

_ Y que si lo hice