Dane

Devon nos deja cuando llegamos a mi oficina. Neah se sentó en una silla de forma tan dolorosa que quise ayudarla. Le había mentido a Raven al decirle que se sentía bien. Ella sabía que yo podía leer su mente, aunque no dije nada ya que sabía que ella quería volver aquí. De alguna manera se sentía más segura en la casa.

"¿Puedo traerte algo?". Le pregunto mientras levanta las piernas hacia el pecho.

Su cabeza se sacude de un lado a otro y su pelo oscuro cae alrededor de su cara.

No me había dicho nada más sobre la cacería, tampoco me había preguntado si los demás habían muerto de la misma manera, pero no era necesario, ya se había dado cuenta y aún así, sigue sin hacer ningún comentario sobre mis decisiones. De hecho, su mente está completamente en otra cosa.

"Neah, sé que no te sientes bien".

Pellizca un hilo de los pantalones negros que se puso. "Estoy viva".

"¿Está teniendo algún tipo de colapso mental?", pregunta Aero

"Sí, lo estás". Murmuro, ignorando a mi lobo.

"No d