Blair

Me acosté en la pequeña cama individual que ahora era la mía. Era un alivio para mi columna vertebral después de haber pasado lo que parecía una eternidad durmiendo sobre un duro suelo de piedra. Incluso alguien había apilado unas mantas al final con una ropa de cambio.

Supongo que se trataba de mi madre, pues ya estaba aquí cuando Ryken me trajo.

Podía escuchar a mis hermanos corriendo arriba. Sus pasos golpeando el suelo. Mi madre les grita que se callen antes de que despierten a Braelyn.

Era extraño, nunca pensé que encontraría consuelo con los sonidos de mi familia. Siempre había preferido el silencio hasta que Cooper me obligó a hacerlo. Ahora cada silencio era incómodo. Cada silencio significaba un castigo que estaba en camino.

Al cerrar los ojos, una sonrisa aparece en mi rostro. Aún estaba viva. Aún respiraba. Quizás podría encontrar la manera de seguir así. Tal vez haga todo lo que me piden y se olviden de castigarme.

Escucho girar el picaporte de mi puerta y abro