Él sonríe. "Hablas de Neah como si fuera tu hermana, pero ni siquiera te está buscando".

"Eso no lo sabes. No sabes nada de mí". Ella estaría buscándome. Tal vez no físicamente, pero ella tiene una razón para querer matarme.

Alarga la mano y me coloca un mechón de mi desordenado pelo detrás de la oreja. "Sé mucho más que tú. Pero creo que es hora de deshacerse de esto". Me agarra el pelo con los dedos y me tira de la cabeza hacia atrás mientras llama a alguien.

La mujer mayor que conocí aparece con unas tijeras, un envase de espuma de afeitar y una afeitadora nueva en una bandeja.

"¡Ahora será mejor que te quedes quieta, o podría cortarte accidentalmente algo que no debería!". Cooper musita.

Me corta cada mechón de pelo de la cabeza. Me lo corta lo más cerca posible del cuero cabelludo. Veo cómo los mechones oscuros caen alrededor de mí sobre la cama y siento cómo las lágrimas me arden en el fondo de los ojos. Amaba mi pelo, pero me negaba a llorar por él y en cuanto encuentre la