Anís. Siento que estoy en un estado entre los vivos y los muertos, todo está en penumbras pero se que alguien más está aquí conmigo puedo sentir su presencia aunque no lo pueda ver, un aroma a sangre invade mis narises y escucho la voz de otso. -Despierta. Abro los ojos en un brinco por el susto miro a mi alrededor y me doy cuenta que estoy sola en la celda mugrienta en la que me han tenido retenida, miro mis piernas y me doy cuenta que son la de una mujer adulta eso me sorprende mucho, paso mis manos por ellas para comprobar que son mías y las paso por el resto de mi cuerpo y efectivamente mi cuerpo ya es de una mujer adulta, durante cuánto tiempo dormí, le roje a los dioses que me ayudarán no que me hicieran dormir durante años, que estoy pensando los dioses siempre tienen un motivo para hacer las cosas, me intento levantar del suelo pero mis piernas siguen entumidas por la falta de uso jalo la cadena que tengo en el cuello que me mantiene sugeta a la pared, intento usar mi magia
Anís.Después de que Dragos se comunica con alguien, se me acerca más y retrocedo un poco.-No me tengas miedo, no te haré daño quiero quitarte esa cadena del cuello.No se si confiar en él pero es mi mejor opción, hago mi cabello hacia un lado y me doy cuenta que lo tengo lleno de ramas y hojas, ha crecido bastante, no sé como no sé me enredo en las raíces de los árboles en el bosque, cuando los dedos de Dragos rosan mi cuello siento un escalofrío que recorre toda mi espalda pero no es una sensación que me desagrade al contrario quisiera sentir más de eso, me sorprende que de un fuerte tirón rompe el collar que presionaba mi cuello lo rompe como si fuera una simple rama seca de un árbol, no puedo evitar dar un suspiro y pasar mi mano por mi cuello al ya no tener el grillete.-Tu cuello está un poco lastimado llamaré al médico para que lo revisen.-No es necesario estaré bien.Me alejo un poco de Dragos y lo miro a los ojos son tan bellos que podría verlos todo el día, me doy cuenta
Dragos.Me da mucho alegría que Anís nos acompañe pero me doy cuenta de que se está quedando atrás la miro recarganda en un árbol, me detengo y voy por ella, al verla allí no puedo evitar ver su cuerpo sus piernas largas, su estrecha cintura y sus pechos que están cubiertos por un camisón viejo y susio que apenas tapa su tracero para mí desgracia, sacudo la cabeza para dispersar esos pensamientos y brindarle mi ayuda.-Anís quieres que te llevé.-No gracias por su ayuda pero yo puedo llegar sola.-En serio nos falta cruzar aquella montaña.Le señaló la dirección en donde queda mi territorio permanente y su cara es un poema, abre los ojos al igual que su boca con mucha sorpresa y después me voltea a ver.-Bueno pensándolo bien te tomaré el favor.Me transformo y me inclino para que suba, al sentir su cuerpo sobre el mío no puedo evitar mover la cola, me uno a los demas y comenzamos a correr a casa para poder llegar antes de la salida del sol, al principio siento como me sugeta fuerteme
Anís.Al quedarme solo en el baño recuerdo el rose de la mano de Dragas en mis nalgas, me sentí tan emocionada hubiera preferido que me tocará con toda la mano, las tiene tan grandes que cubriría bien una de mis nalgas, hay dioses que cosas estoy diciendo, mi madre me dijo que no actuará de esa forma con un hombre a menos que me fuera a casar con el y recuerdo lo que me enseñó mi abuela ase mucho que las brujas elementales no se casan jamás y una tristeza me invade, no sé si es por qué pensé en mi abuela y madre o por qué no podré estar de esa forma que pensé con Dragos, hay el es un hombre tan fuerte, grande, guapo y bien dotado pude sentir su virilidad cerca de mi muslo cuando caímos en la hierba, siento mis mejillas arder por lo que estoy pensando y mejor decido tomar el baño que me han preparado, me desvisto y me miró en el espejo de nuevo mis pechos crecieron y se parecen a los de madre solo que son un poco más grandes y tengo las caderas de mi abuela, después de darme el baño mi
Anís.Al entrar al lugar me doy cuenta que es muy bonito por dentro y hay mucha ropa en unos muebles, una mujer vestida con un vestido corto y que aparece ser pequeño para ella ya que está muy pegado a su cuerpo se nos aserca con una sonrisa.-Buenos días señor en que le podemos ayudar.-Busco ropa para mi amiga ya que su casa se quemó y perdió toda pero no recuerda su talla.-No hay problema señor soy experta en adivinar la talla de las personas, a ver creo que de pantalón es 4, de cintura eres talla 0 y de blusa eres S pero de busto serás más grandes, te traeré algo para que te pruebes solo esperen allá.La mujer nos señala unos sillones a esperarla y me aserco a Dragos para susurrarle.-Entonces se quemo mi casa.-Que querías que le dijera que acabas de despertar de un sueño que duró más de 700 años.-Cierto.La mujer regresa con unas prendas que me comienza a mostrar pero dana de lo que trae me gusta.-A disculpe no tiene otro tipo de ropa es la mayoría es ropa de varón.-Pero es
Dragos.Hoy he sido demasiado atrevido pero ya soy un hombre maduro y deseo estar con una mujer, otros Alfa ya han estado a mi edad con alguna loba de bajo rango o alguna mujerzuela en la calle pero me creo más digno que eso, mi lobo está deseosa por estar en la compañía Anís.Estoy recostado viendo el techo de mi habitación recordando esa hermosa sensación de mis labios en su mejilla, quisiera poder tocar su boca, bajar lentamente por su cuello, tocar uno de sus hermosos pechos y escabullir una de mis manos debajo de su falda y en su ropa interior, un gruñido sale de mi pecho y siento como mi miembro a comenzado a despertar pero todos esos sentimientos y pensamientos se van al escuchar un gran estruendo en el cuarto de Anís, intento abrir la puerta pero no puedo y está demasiado helada así que no dudo en derribar la y al hacerlo me doy cuenta que todo el pasillo tiene una capa semi gruesa de hielo, intento abrir la puerta de Anís pero esta totalmente congelada tomo impulso y la tacl
Anís.Me despierto temprano y me doy cuenta que Dragos me está sosteniendo la mano, su mano se siente tan cálida en las mías que siempre están frías por mi naturaleza, miro su cara y no sé por qué me parece tan hermoso como si fuera un dios en la tierra, me siento mal por qué jamás voy a poder estar con el ya que se que los hombres lobos tienen una pareja de por vida, doy un suspiro y retiro mi mano con cuidado de no despertarlo, me levanto de la cama y salgo sin hacer ruido, miro como el sol comienza a salir y los primero rallos golpean mi rostro, se siente tan bien está sensación voy y me paro cerca del pequeño estanque que está en el jardín, me inco y doy gracias a los dioses por dejarme salir de ese sótano con vida y ponerme en el camino de esta buena persona, comienzo a estirarme y llenar mi cuerpo de la energía que da el sol, respiro el aire fresco de la madrugada y escucho las voces de hombres volteo y a mis espaldas están los novatos, varios de ellos me miran de una forma muy
Anís.Me despierto temprano como siempre me siento de la cama y me tallo los ojos escucho un movimiento a mi lado me volteó rápidamente y me doy cuenta de que Drados que está dormido, me colocó la ropa antes de que me vea y voy a tomar un poco de sol, escucho la puerta del cobertizo y sé que es Dragos no necesito voltear, inhalo y exhalo para no enojarme con él ya que él ha sido muy amable conmigo y me ha permitido estar en su casa, me ha comprado ropa, me da de comer y prometio ayudarme con lo que sea-Buenos días Anís.-Buenos días Dragos.-Podemos hablar de lo que pasó anoche.-No tengo nada de que hablar solo me moleste, no me gusta que me digan que hacer y que no puedo hacer y lo que más me molestó fue que me quisistes imponer una nana, no tengo 4 años Dragos.Volteo a verlo y le doy una mirada molesta, creo que estoy haciendo la misma mirada que hacía mi madre cuando hacíamos algo malo, Dragos baja la mirada y es increíble que el siendo más grande que yo y fuerte lo intimido con